1.
Entrose en una pieça, que era la librería de S
2.
contemplación de esta soberbia librería como ante una esfinge que sabemos contiene un
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latigazo en el interior de un panel de la librería al tiempo que emitía un gruñido cansado y se
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Había una enorme librería
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diferentestítulos en Madrid en la librería de Antonio Sanz,en la
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Librería, que hace recuerdo siempre que en ella se entra, de vnSeñor que tanto supo
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posee esta casa, hajuntado una gran librería y en ella tantos volúmenes de todas
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En la librería hay las pinturas siguientes:
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El Oratorio alto de esta Casa está hoy sin uso en la librería; y secompone de un
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Estátuas de la galería alta de la librería: En esta galería que mira aljardín hay las
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en la galería baja de la librería haciendo frente á lahabitación del jardinero hay lo
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los de la librería vienena ser todos quarenta y tres ymagenes como estan referidas
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librería questa abaxo en lasala de azulejos y de la que está en el corredor que le tengo señalada
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La librería, por tanto, sería adquirida en venta por el ilustre D
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pueden, con recursoslimitados, como la librería Ulysse, ubicada en la isla Saint-Louis, enel corazón de París, pero sin hacerse demasiadas ilusiones acerca delhuracán que se las está llevando por delante
16.
La librería en línea Amazon
17.
La actividad de la sociedad, fundada en abril de 2000 seis meses antesdel estreno de la librería, en realidad es una actividad triple:librería online, estudio de fabricación y difusor
18.
Franklindesarrolla también una librería digital en su sitio web, tras la firmade acuerdos con varios editores, por ejemplo con Audible, para obtenerel acceso a su colección de 4
19.
Denis Zwirn,presidente de la librería digital Numilog, explica en febrero de 2003:"En los diez próximos años, el material de lectura digital utilizadopor los individuos y por las empresas se irá adaptando cada vez más asituaciones de movilidad, impulsando la creación de máquinas cada vezmás
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#Creadora de la librería Ulysse, la más antigua librería de viaje en el mundo
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es un célebre abogado; la librería que tiene al lado es eldisfraz con que os engaña
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en Barcelona, en la librería de
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a fines delsiglo pasado, en la librería del convento de Santo
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que sepusiesen en la librería estatuas romanas y retratos de Sumos
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armas en la librería y hasta armasdebajo de la cama y entre sus colchones
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librería a comprar alguna
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Estabantambién la librería, las sacristías, los
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precede,el duque estaba sentado en su librería enfrente de su
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Entró a la librería y, al mirar los volúmenes amontonados sobre el sueloy las gafas
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escaleras, pasando por la librería y avisandosilencio a los criados que se adelantaban a
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Habíase sentado en un sillón de la librería, esperando que aderezaran sulecho
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ciertos secretos, cuya cifra seperdió en el incendio de una gran librería de la
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En una librería alineábanselos tomos de las Sesiones del Senado,
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mercado entra en una librería para pedir un devocionario"bien
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de la Librería religiosa, y castiza y admirabletraducción del P
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A un lado estaba la librería: un armario de roble con los cristalessiempre cerrados,
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La llave de la librería andaba desde entonces por los cajones de lamesa, revuelta
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La actividad de la sociedad, fundada en abril de 2000 - seis mesesantes del estreno de la librería -, en realidad es una actividadtriple: librería online, estudio de fabricación y difusor
39.
colaboración con los editores para poderconsultar en la pantalla fragmentos de libros, y luego encargarlos auna librería online
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(199 y 349 dólares US), con o sinsuscripción anual o bianual a la librería digital de Gemstar eBook
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Franklin desarrolla tambiénuna librería digital en su sitio web, tras la firma de acuerdos convarios editores, por ejemplo con Audible para obtener el acceso a sucolección de 4
42.
Para Denis Zwirn, presidente de Numilog, la gran librería onlinefrancófona, el 2008 es una fecha clave en la curva de crecimiento delmercado de los libros digitales, con la combinación de tres factores:
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William Ireland estaba con su padre en el comedor situado arriba de la librería
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– Con esa expresión se refería a la librería de la planta baja, si bien había aprendido que nunca debía mentar esa palabra en presencia de su padre-
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En ese momento William Ireland entró en la librería
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Tras despedirse en la puerta, Samuel Ireland entró en la librería
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Le pasó las señas de la librería y corrió tras Mary, quien, sin éxito, intentaba detener un coche en la esquina de Milk Street con Cheapside
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Alguien acababa de cerrar la puerta de la librería y se alejaba a toda velocidad
49.
Volvió a entrar en la librería
50.
El material no ardió con facilidad ni rapidez, ya que la tinta y el lacre reaccionaron al contacto con las llamas y provocaron un intenso humo negro que ocultó la librería
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–En esa librería están las enciclopedias, la Biblia, el Corán, Lao Tse y los libros de filosofía
52.
Está el tío que se pasa por la librería preguntándote si tal libro vale algo, y si lo vale depende de lo honrado que seas, pero desde luego intentas ganar algo
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La última vez que hice algo parecido, al cabo de tantos años de solucionar ya los primeros contactos en bares pensados para ese propósito, fue no hace mucho, en unos grandes almacenes, en la sección de librería, entre los anaqueles de obras sobre deporte, observando y dejándome observar con evidente interés, siguiendo y dejándome seguir, durante más de media hora, por un chicarrón con pintas de futbolista -muy alto, estrecho y ceñido de torso, pero con un tren inferior, culo incluido, de primera división y Champions League- que parecía extranjero y recién llegado, hasta que pensé que todo aquel cortejo primitivo y silencioso, a mi edad y con mi aspecto -maduro señor canoso, enchaquetado y encorbatado-, resultaba patético, y me fui
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—¡Oh! Mezclada con varias cosas en la sala de mi casa, en uno de los estantes de la librería
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—No estoy segura, pero creo haberla visto en la librería de su casa
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Del donoso y grande escrutinio que el cura y el barbero hicieron en la librería de nuestro ingenioso hidalgo
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Yo venía de una pequeña librería íntima, cuyo librero, gran amigo de todos nosotros, acababa de conseguirme un raro ejemplar de los poemas de Rimbaud, sintiéndome infantilmente feliz aquella tarde sabiéndolo apretado bajo mi gabán para librarlo de la lluvia
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El examen de ingreso era bastante duro, pero gracias a sus lecturas nocturnas en el desván de la librería de Yibin obtuvo el primer puesto
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¿Qué es esto, las medidas de una librería, acaso?
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Entró en una librería que exhibía libros ingleses en sus escaparates, pero su pregunta sólo obtuvo un encogimiento de hombros y un movimiento negativo de cabeza
61.
Se parecía bastante a una librería, con la diferencia de que había varios grupitos de sillas, y estaba poco iluminada
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-¡Oh! Mezclada con varias cosas en la sala de mi casa, en uno de los estantes de la librería
63.
La de su esposo está en el punto opuesto de la mesita de la librería
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Vuestro libro tiene unos cien días en la estantería de la librería antes de ser considerado un fracaso oficial
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En la cafetería de la librería, mientras elaborábamos el guión, me dijo:
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Luego de tomar asiento y presentarse, le dijo que su gran afición eran los libros antiguos y que su librería era una de las más notables y completas de Portugal
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La librería de don Manuel estaba totalmente ordenada y puesta al día
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Siguió trabajando en la librería hasta que debió retirarse por orden médica y pasó las últimas semanas en un sofá, aplastada por el peso de la barriga
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Cuando estuvo cierta de que se había quedado sola extrajo de su escarcela una de las figurillas y la colocó en el bolsillo de su jubón en tanto se aproximaba, como quien quiere buscar un tomo o curiosear los volúmenes en ellos alojados, a los anaqueles de la librería
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Echó mano al bolsillo y tomando el muñeco lo colocó, subiendo una escalerilla móvil, en el último estante de la librería detrás de un grueso volumen de la Suma Teológica de san Agustín; luego descendió rápidamente, se alisó las ropas y se dispuso a aguardar la llegada de los anfitriones de la casa
71.
Lo que había sido una leonera con trenes eléctricos puching-balls de boxeo y otros maravillosos juguetes, se convirtió, en su adolescencia, en un cuarto de estudios con dos escritorios de persiana colocados contra las paredes y después, pasando el tiempo, terminó siendo su sanctasanctórum, con cómodos sofás, una gran librería adosada, carteles de propaganda, lotos de chicas y de ídolos deportivos y un equipo de radio emisor y de música carísimo que, con la antena que su amigo Eric, que era muy apañado para estos menesteres, había colocado en el exterior y alrededor de la casa, metida entre la hiedra, podían escuchar por la noche cuantas emisoras extranjeras les viniera en gana, y así mismo ponerse en contacto con otros radioaficionados de todo el mundo
72.
Desayu-nábamos en un pequeño comedor de diario mientras comentábamos las noticias importantes de los periódicos, luego me daba un par de horas de clases regulares y el resto del día íbamos al museo y a la librería Si-glo de Oro a comprar libros y tomar te con el librero, don Pedro Tey, vi-sitábamos artistas, salíamos a observar la naturaleza, hacíamos expe-rimentos químicos, leíamos cuentos, escribíamos poesía y montábamos obras de teatro clásico con figuras recortadas en cartulina
73.
Esas opiniones lo condu-cirían poco después a formar un grupo disidente que se pasó a la oposi-ción cuando estalló la Guerra Civil, tal como hizo Matilde Pineda y su amigo de la librería Siglo de Oro
74.
A su derecha una librería atestada de títulos de medicina y a su izquierda un armario de instrumental con todas sus piezas perfectamente alineadas e impecables
75.
Después de allanar la librería, golpear a los empleados y hacer pilas con centenares de libros y prenderles fue-go, se llevaron al librero catalán a los siniestros cuarteles, donde le aplicaron el tratamiento usual
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La librería contaba la historia de mi adolescencia: Carry On, Jeeves, Black Mischief, The Heart of the Matter [El revés de la trama], Afternoon Men, Women in Love [Mujeres enamoradas], Gormenghast, Cat's Cradle, L'Etranger
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Mientras contemplaba esta última moneda, el comisario recordó lo que había visto mientras se agachaba para recoger el libro que se le cayó al suelo delante de la librería
78.
La librería más cercana era la de Edwards y Skittering, en Piccadilly
79.
Entró en la concurrida librería con la compostura con que hubiera podido entrar en una iglesia
80.
La habitación estaba llena de muebles, consistentes en un canapé casi tan grande como una cama, un sillón, dos sillas más pequeñas, una mesa, una librería con libros y una alfombra en el suelo
81.
—Pero de todas formas puedo mirar en el nuestro —dijo ella, yendo a la librería
82.
¿Y por orden? Buscó con los ojos las antiguas Biblias que descansaban en un estante bajo de la librería de Blake
83.
Recité una oración en silencio y seguí al esclavo a través de la pequeña selva de higueras y palmas bien regadas hasta el interior de la gran librería
84.
Quedaba abierta una librería, con gran profusión de libros bajo las lámparas que la iluminaban
85.
»Una tarde en que me encontraba en la librería, el sacerdote se acercó a mí y te señaló
86.
Los bomberos me conducen a una librería de segunda mano que hay en un edificio deteriorado de East Colfax
87.
Estaban ante la librería de Sosio, en el Argiletum, lugar en el que se había alzado durante décadas uno de los mejores mercados de Roma, y, por eso, mientras hablaban, iban comiendo tartas rellenas de pasas con natillas y miel; un chiquillo los miraba atentamente, listo para acercarse a ofrecerles una jofaina de agua caliente y un paño
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En Barcelona, hasta la Librería Europa se sumó a la solidaridad con Palestina y, casualmente, la última conferencia celebrada, en diciembre de 2008, en su pequeño salón de actos la pronunció el famoso revisionista Joaquim Bochaca, y trató sobre «Los Protocolos de Sión» y la supuesta conspiración judeomasónica internacional
89.
Rosamond avanzó unos pasos hacia la librería, luego se detuvo y miró a un lado, hacia el último rincón de la habitación
90.
El mayordomo me ha llevado el café a la librería y he aprovechado la oportunidad para hacerle unas preguntas
91.
" He pasado una instructiva tarde en la librería del rector, y he aumentado mi saber añadiendo el hecho que Vermissa es una floreciente pequeña ciudad al frente de uno de los más conocidos valles del carbón y hierro de los Estados Unidos
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Patrick aparcó el Lincoln junto al bordillo delante de la librería
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Aunque me encantaba la librería, no estaba allí para comprar
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Con expresivas cabezadas asentí a las observaciones del Presidente, el cual siguió mostrándome curiosos ejemplares de su soberbia librería
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Antes de irse, volvió a la sala y se quedó de pie ante la librería
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Es la reina de las secciones de librería en los grandes almacenes…
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No ve a Pepe Lobo hasta que lo tiene delante, saliendo de una librería con un paquete bajo el brazo
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Se calla y mira alrededor: la puerta de la iglesia bajo la estatua del santo, el suelo de tierra de la plaza donde picotean palomas, las tiendas abiertas, la vitrina y los cajones de la librería de Salcedo y las cercanas de Hortal, Murguía y Navarro, con sus libros expuestos
99.
Los cojines del sofá estaban rajados, y el contenido de una enorme librería diseminado por el piso