1.
Platón se despidió de su amigo, y cogió el lío diciendo quetenía que ir a la calle del Arenal
2.
puertadel Arenal, otro en la de Minjoar y el otro en la de la Carne
3.
Arenal sitio el más animado y bullicioso de laciudad y Lope de Vega, que lo conocía,
4.
dió á una de sus comedias portítulo El Arenal de Sevilla, haciendo del lugar la
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frecuentaban el Arenal, y así se ven desfilar por elteatro, tapadas, soldados, mozos de
6.
El autor acentúa más la nota en elogio de Arenal haciendo decir al Forastero en la
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figura ya indicada la Alameda del Arenal, y lo mismo en el queen 1788 se publicó
8.
Arenal, paseo siempre concurrido; á la derecha el puente debarcas y un dilatado
9.
Hacia 1808 se hicieron algunas reformas en el Arenal, con las queganaron en
10.
Punto como lo era el paseo del Arenal de amplitud y gran concurrencia,cuando los
11.
El paseo del Arenal, cuando en 29 de Agosto de 1812 penetraron ennuestra ciudad
12.
Volvieron para el paseo del Arenal días de esplendidez, transcurridosaquellos años
13.
Por los alrededores del Arenal se veía en los buenos tiempos del paseomuy variados
14.
Arenal y Triana y andaban por la cestería con barcos yandaba el agua por santa
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arenal de floresmaravillosamente raras cada una de las cuales
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Dos hombres adelantaban por la calle del Arenal, hacia lasubida de San Martín
17.
calle de Carretas a tomar la del Arenal
18.
tranvías ylas carretas, y entró en el Arenal
19.
que los vaporesllegasen hasta el mismo paseo del Arenal
20.
Fernando:parece un señoritingo de los del Arenal
21.
Las criadas que pasaban por el Arenal con la cesta al brazo,
22.
Un día, en Bilbao, se encontró en el Arenal con el capitán
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puentedel Arenal vió muchos balcones colgados con trapos de
24.
encontró alatravesar el Arenal con un obrero de ropas haraposas
25.
Pasó la manifestación el puente, extendiéndose por el Arenal y
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estaban citados losde la peregrinación en el Arenal
27.
Arenal estabadesierto: quedaba un gran espacio libre, del que se
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desalmados, furiosos después dela lucha en el Arenal, se habían
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En la calle del Arenal oyó que le llamaban
30.
Pintè en el arenal desabrigado
31.
El arenal que se confundía con el camino, se extendía á mi
32.
Al anochecer saltaban los pulgones en el arenal, y los agujeros redondosdel solen echaban
33.
formaba un arenal fangoso, en donde estaba elastillero de Shempelar
34.
Idos por el arenal y loencontraréis
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un carro por el arenal, aguijoneando la yunta; se oíael chirrido de los ejes de la carreta y el ruido
36.
Pasamos los tres por el arenal y salimos a la punta del Faro
37.
Hizo encallar la proa de la pequeña goleta en el arenal de Frayburu
38.
últimos trabajos realizados en el piso de la calledel Arenal
39.
para suviaje á la Asunción, la envió á reconocer aquel arenal y
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en la del Arenal
41.
Después,cúmplanse tus maldiciones, y lleven los perros por este arenal micorazón desesperado
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monotonía deaquel movedizo arenal
43.
por el quieto arenal del playerío
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Aquella mañana, el criado fuese al mesón donde se alojaba Simón a entregarle una misiva en la que le explicaba que no debía acudir a la quinta del Arenal ya que ella había sido citada a presencia del rabino mayor de todas las aljamas de Sevilla junto a su esposo, a fin de escuchar las juiciosas recomendaciones que tuviera a bien hacerles el sabio anciano antes de incoar su separación
45.
La manera de operar era siempre la misma, Simón recibía un mensaje críptico a través del correo que ejercía el bueno de Gedeón o el recado que le trasmitía Myriam, mediante el sencillo sistema de lanzar a la ventana que daba a la plaza de Doña Elvira un puñado de arena, y al día siguiente y a la hora preestablecida, ambos se reunían en la quinta del Arenal
46.
—Ahmed, arrea a las mulas, no vaya a ser que con el peso de las cajas, el carro quede clavado en el arenal
47.
Años más tarde, Concepción Arenal y Victoria Kent continuarían con iniciativas similares
48.
El premio de la Real Academia se convirtió en un importante aval para Concepción Arenal
49.
En él, Concepción Arenal abogaba por la reforma de algunos artículos del Código Penal
50.
Concepción Arenal era una persona que decía la verdad y por tanto su presencia resultaba, en determinadas circunstancias, un tanto molesta
51.
Concepción Arenal, a petición del Gobierno, redactó unas bases para una ley de beneficencia
52.
Las Cortes aprobaron un nuevo proyecto de reforma penitenciaria y Concepción Arenal, ya alejada de los círculos de la Administración, elaboró un escrito en el que manifestaba sus dudas sobre los auténticos deseos del ejecutivo de reformar las cárceles:
53.
Concepción Arenal tuvo la valentía, la decisión y la modernidad de rechazar un colonialismo de prisiones que no le parecía ni adecuado para el país que trataba de colonizar ni para el país receptor del conjunto de los que eran delincuentes, y condenó en su monografía, que premió la Real Academia, este intento, entonces, de moda en distintos países
54.
Clara Campoamor es una de las principales impulsoras del monumento a Concepción Arenal
55.
En un acto conmemorativo del aniversario de la muerte de Concepción Arenal, Clara Campoamor dice en su intervención:
56.
A Concepción Arenal no se le hizo la justicia a que tenía derecho pleno, y bien es cierto que muchas de sus máximas cayeron en olvido
57.
Escenas bulliciosas de animación, de risas, de plácemes, de gritos, de palabrillas un poco jacobinas alegraban las calles del Arenal y Mayor
58.
Cuando el batallón Sagrado y las demás fuerzas mandadas por Álava entraron en acción resuelta, fue al iniciarse la retirada de los facciosos por la calle del Arenal hacia Palacio
59.
Efecto maravilloso y estupefaciente causó Aura en la juventud bilbaína, cuando hizo su primera salida con Prudencia y la señora y señoritas de Gaminde en el paseo del Arenal, pues si bien la fama había anticipado ya ponderaciones de tan singular belleza, la realidad empequeñeció la obra de la fama, al contrario de lo que en la mayoría de los casos sucede
60.
[254] Era principal objetivo de los facciosos poner su mano en lo que creían llave de Bilbao, el convento de San Agustín, situado entre el Arenal y el Campo Volantín, al pie de cerros elevados y casi al borde de la ría
61.
Soldados de Trujillo y Toro, y algunas compañías de Nacionales, defendían la Cendeja, llave del Arenal y de Bilbao, con un tesón de que sólo se encontraría ejemplo en las épicas jornadas de Zaragoza y Gerona
62.
Ves el paseo del Arenal, y adelante siempre, junto a la ría; ves el teatro, y adelante
63.
Esta calle no estaba tan obstruida por el gentío como la del Arenal, donde las multitudes se obstinaban [239]
64.
Arrastré suavemente el pez hacia el diminuto arenal
65.
Partió Serrano a galope sin que le tocaran los disparos que en las calles afluentes a las del Arenal le hizo el paisanaje
66.
En esto, llegando los tres cerca de la Costanilla de los Ángeles, vieron espeso gentío que estorbaba la entrada por la calle del Arenal
67.
Y mencioné el propósito de asistir, con el capitán, a la representación de la comedia El Arenal de Sevilla, que tendría lugar en el corral del Príncipe al día siguiente
68.
El caso es que aquella jornada se reponía en el Príncipe una celebrada comedia de Lope, El Arenal de Sevilla, y la expectación era enorme
69.
abandonar el arenal calcinado por el sol, no por miedo a contraer un melanoma, sino porque se sintió llamado a predicar el Reino de Dios
70.
Parece que una corriente tomó la gamela y le dio camino hacia tierra, que estaba muy próxima, y fue tan feliz la corriente, que puso a Pablo en un arenal, al tiempo mismo que una niña que llamaban Virginia buscaba en las arenas un pendiente que se le perdiera
71.
Por todo el arenal, muy lentamente,
72.
Llegamos al borde de un bosque en el que árboles que gritaban emergían de un arenal en llamas
73.
Los dos hombres revisaron los cuerpos tendidos en el arenal
74.
—Atraquen los lanchones en el arenal y que los descargue esa gente —dijo Rufino, señalando a los bogadores
75.
—¿Cree que hubiera sido mejor dejarle morir en el arenal? Le ahorré el sufrimiento de una larga agonía, allí tirado y con aquel calor
76.
Dexter únicamente quería descubrir una cosa antes de que se hiciese cualquier detención: ¿quién era Letizia Arenal y quién era «papá»?
77.
Letizia Arenal pasó el control de pasaportes sin más contratiempo que la formalidad de ir apretando las yemas de los dedos en un pequeño panel de cristal y de mirar a la lente de una cámara para el reconocimiento del iris
78.
Se llevaron a Letizia Arenal convertida en un mar de lágrimas
79.
Cuando se reunió con su compatriota, acompañados por una agente de la DEA que hablaba español y que se quedó en un rincón de la habitación, Letizia Arenal relató toda la historia a aquel hombre con quien solo se había encontrado para cenar y desayunar en el hotel Villa Real
80.
—Y como eran nueve o diez hermanos, y todos fuertes y valientes, decidieron explotar el arenal
81.
Santa, que a los principios mostrábase hosca y muda o arrancaba a esconderse en su vivienda, con objeto de no dar oídas al galanteador, fue ablandándose poco a poco; ya reconocía a distancia los andares del moro, ya se detenía frente al espejo más de lo que había acostumbrado detenerse; ya se sentaba a la vera del Arenal -la ancha calle que a San Ángel lleva-, por el que tarde a tarde y sin escolta descendía el gallardo municipal
82.
Hundidos hasta las pantorrillas en el arenal, tiraban del pobre asno mientras el vendaval ululaba a su alrededor con un silbido espeluznante
83.
El pequeño Artoo observaba desde el borde del arenal
84.
Luke luchó por arrastrar a Threepio fuera del arenal mientras trataba de observar las rocas circundantes y al mismo tiempo prestar atención a sus pasos
85.
Le tranquilizó saber que el nombre de su hermano no aparecía en la lista y no quiso ni imaginar que fuera uno de los caídos que, según las dos mujeres, los suyos habían enterrado cerca del arenal
86.
Desfilaron en silencio ante sus verdugos, las miradas perdidas, los ojos enrojecidos, y abandonaron San Sebastián en dirección al barrio del Antiguo cruzando el arenal sin que ni uno de ellos volviera la vista atrás
87.
Bajó al arenal, una vez que se despejó el camino, con la intención de buscar el cadáver de Eddie y encargarse de que tuviese un entierro digno
88.
Un hombre había bajado al arenal y caminaba sin prisa hacia él
89.
Atravesaron el pueblo por la Karrika Handia y salieron al arenal por el otro extremo
90.
Tras andar un trecho por la arena, llegaron a una cabaña de madera construida entre las rocas, en la punta del arenal, al abrigo de las olas y también de miradas extrañas
91.
Avanzaron en silencio, las miradas clavadas en el vacío, hasta que llegaron a la playa y se dejaron caer en el arenal
92.
Cuatro jinetes que, por no ser reconocidos, llevaban bien calados los chambergos y el rostro embozado con las capas, salieron de la ciudad por la puerta del Arenal y, entre jolgorios y bufonadas, comenzaron a alejarse rodeando las murallas en dirección a los lugares de trajín ilícito de cantoneras
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aquel que venía por el arenal
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Tras despedirnos de nuestros amigos, el capitán y yo anduvimos Arenal abajo hasta el puente de barcas, donde aguardaba, puntual y riguroso como de costumbre, el contador Olmedilla
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a ellos, en el interminable arenal
96.
Hacia las cuatro, Joe indicó un objeto que sobresalía en el inmenso arenal, y pronto pudo afirmar que eran dos palmeras que se elevaban a poca distancia
97.
Es tan grande mi impaciencia por tenerlas al alcance de mi mano, que lanzo a mi caballo al galope por el arenal, seguido de cerca por Máximo
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Al echar a andar por el arenal, Fintan y Sabine Rodes vieron desaparecer la nube gris río abajo