Usar "esbelto" en una oración
esbelto oraciones de ejemplo
esbelto
1. Ese era más bajo que el esbelto y feo y cojeaba un poco
2. Este era rubio y poco esbelto, al pasoque el otro
3. colorvivo, fresco y puro; el corte general de la cabeza, lo esbelto
4. Parecía un andaluzmoreno, esbelto y gracioso, con un no sé qué de extraño
5. del sable, moviendo sutalle esbelto y los anchos pantalones a la turca
6. más gracioso,el más esbelto, el más engañador y salado que
7. cuerpo gentil y esbelto, que iba empequeñeciéndose con ladistancia
8. semejanzafraternal en el cuello esbelto y ligeramente inclinado,
9. esbelto y hasta la suavidad de sus manos,la separaban,
10. superficie; el penacho del Vesubioera recto y esbelto,
11. el cuello, flexible y esbelto, como el de lagacela, se unía a los hombros por una línea
12. erguía sobrelas puntas de los pies su cuerpo esbelto y menudo, y marchaba hacia
13. alto, esbelto, de un moreno pálido, con el calañéssobre un pañuelo rojo, por debajo del
14. Un haz de cañas se elevaba esbelto, y a su lado, lasagudas poas sacudían su escobillón
15. á su cuerpo, es la que lo tienemás bonito y esbelto
16. Ceñía su cuerpo esbelto un vestido de satén rosa pálido del que escapaban dos piernas muy finas encerradas en unas sandalias de tiras de cuero
17. La noche antes, Idalin, al enterarse de que Valerio no se marcharía, se estrechó contra él con alegría, recordándole que, ahora que ella iba a tener un hijo, ya no podía jugar con su vida, y Valerio, manteniendo su cuerpo esbelto entre sus brazos, se dijo que tenía razón, pues ya había visto suficientes batallas
18. El señor Laurence cambió de color, se sentó y echó una mirada ansiosa al retrato del hombre esbelto que estaba colocado encima de la mesa
19. Y Maximiliano, en efecto, tenía paciencia, admirando el contraste que había entre las dos jóvenes, entre aquella rubia de ojos lánguidos y de cuerpo esbelto como un hermoso sauce, y aquella morena de mirada altanera y cuerpo erguido como un álamo: además, en esta comparación entre dos naturalezas tan opuestas, toda la ventaja, en el corazón del joven por lo menos, estaba por Valentina
20. ; Era un animal esbelto y hermoso y, aunque entrado en años, su cabello era de un rubio admirable
21. En este punto la conversación fue interrumpida; un esbelto joven fue hacia ellos rápidamente
22. Vandam, el millonario y magnate de los aceites, era un hombre esbelto, de rostro amarillento y alargado y cabello negro con reflejos azules, colores que son los menos sospechosos, pero que, al resaltar su rostro y figura sobre la ventana y pared blanca del almacén, parecían en la sombra más siniestros y recortados; llevaba un elegante abrigo abrochado hasta el cuello, adornado con tiras de astracán
23. Frente a la estación, lo esperaba un coche abierto, con su cochero, y dos caballos bayos muy desiguales: uno pesado y el otro esbelto
24. Pese a que Alí ignoraba qué peligro les amenazaba, al oír los gritos del marinero abandonó las presas y de un salto llegó al pie de un árbol alto y esbelto
25. El pájaro aludido era un bello volátil, esbelto, vivaz, armado con una especie de cuerno que se elevaba sobre su cabeza, con alas muy robustas, cubiertas de largas plumas rígidas y terminadas en espolones asaz agudos
26. Más delgado que esbelto pero en absoluto frágil, convaleciente de una tuberculosis ósea que había estado a punto de acabar con él —por eso estoy aquí, aclaraba siempre, con la precipitación de las puntualizaciones trascendentales, porque no me han dejado alistarme— sin dejar huellas aparentes en su cuerpo fibroso, flexible, más duro que el bacilo que lo había atacado, tenía muchos motivos para estar preocupado, pero Julio lo veía sonreír todos los días
27. Allí estaba el puente, gracioso y esbelto (¡demasiado esbelto!), tendido por encima del cañón
28. Daba la impresión de que el esbelto y severo edificio se disolvía en la nada contra el cielo
29. ¡La espalda! ¡qué gracioso surco el de esta espalda que termina en un talle tan esbelto, ¡oh, sí! tan frágil, que ha sido preciso todo el poder de la divinidad para mantener sujeta a él esa grupa tan considerable!
30. Hizo el cuerpo de proporciones discretas, ni largo ni corto; el talle esbelto, los andares graciosos, el pecho lozano
31. – Sparkes dio unas palmaditas en el esbelto cuello y en la testuz del corcel
32. Un estremecimiento le hizo arrodillarse cuando pudo contemplar los rasgos que tanto había buscado: los labios gruesos, la barbilla ovalada, el cuello esbelto y unos pechos redondos como planetas
33. Él es exactamente tal como lo recuerdo: alto y esbelto, tranquilo, fuerte, listo para lo que se tercie, siempre al mando de la situación
34. Su aspecto decía mucho en su favor, era guapo y esbelto, de trato muy afable
35. El antiguo atleta ya no era pelirrojo, ni su torso antaño esbelto estaba ya en forma, y cojeaba alguna que otra vez por los efectos de una rodilla artrítica
36. Sus ojos la estudiaban, observando el usado abrigo, que llevaba abierto y medio caído de los hombros, y el cuerpo esbelto, con su vestido gris, que parecía un uniforme de oficina
37. El pantalón ponía de relieve la larga línea de sus piernas, la ligera y firme actitud de permanecer en pie sin esfuerzo, dispuesto a iniciar el movimiento en un momento dado; las mangas cortas revelaban el esbelto vigor de sus brazos; la camisa desabrochada descubría la piel tirante de su pecho
38. Una pequeña reunión sin etiqueta, ofrecida por él, James Taggart, a los directores de una compañía recién formada: la Corporación de la Amistad y el Progreso entre Países Vecinos, de la que era presidente Orren Boyle y secretario cierto esbelto, gracioso y movedizo caballero de Chile: el señor Mario Martínez, pero a quien Taggart, luego de establecer determinadas similitudes, sentía la tentación de llamar señor Cuffy Meigs
39. Envolvió con los brazos el cuerpo ágil y esbelto de la mujer y aceptó el significado del rostro de ella apoyado en su pecho
40. Con sus seis metros de eslora, diminutos en comparación con un acorazado, pero aun así mucho más largos de lo que hubiera imaginado jamás, la cubierta del esbelto kayak estaba equipada con su propio armamento: un asta de arpón con una extensión en el extremo de su empuñadura para lanzarlo; una punta de arpón independiente de unos quince centímetros de largo, la cual podía ajustarse al asta mediante un cazonete; un dardo para aves que no solo disponía de una punta de flecha en su extremo, sino también de tres púas que apuntaban hacia delante junto al asta para acertar en el pájaro en caso de que el extremo mismo se desviara; varias vejigas de piel de foca que sirvieran de flotadores para las ballenas o focas arponeadas; y una lanza para asestar el golpe mortal al animal arponeado
41. Luego se presentó al camarero mayor, a cuyas órdenes quedaría: un hombre esbelto, hermoso, narigudo, que seguramente ya tenía unos cuarenta años
42. El segundo es hermoso, esbelto, bien formado; es un placer verlo manejar el florete
43. Mientras Freed se subía al coche por la puerta de su lado, Dane echó a correr hacia adelante y recogió el cuerpo del esbelto camboyano que había caído, lo cargó al hombro y lo arrojó en la parte trasera del coche, para consternación de Michelet, Lucien y Chelsea, que gimieron y se encogieron, apartándose todo lo posible de él
44. Todos ellos iban revestidos con brillantes petos y estaban ejercitándose en un amplio prado, a las órdenes de un esbelto jovencillo llamado Rossy, a cuya mínima palabra obedecían los animales
45. Esbelto y con aire confiado, llevaba alrededor de los ojos los tatuajes de un sumo prelado del Cantón de las Finanzas
46. Alto, esbelto como un junco, con músculos estupendos y porte y talante de conductor de hombres
47. Quedó más esbelto que nunca pues había bajado cuatro kilos en seis meses
48. Georgia estaba allí de pie, en todo su esbelto y enojado esplendor
49. Venía de regreso a la ciudad y llevaba lo que parecía un cesto sobre la cabeza que, sin embargo, no la hacía perder su compostura ni alterar el grácil movimiento de su esbelto cuerpo
50. 8 La Importancia del Calcio en La Dieta y la Leche Para Estar Esbelto