1.
Yo jadeaba mucho, la sensación de fatiga y ganas de retomar el aire fresco en los pulmones, la sensación de desgaste, era increíble, pensaba en todos los que llevaban 30 días luchando, comencé también a gritarles, a todos, calma, control, paciencia, todos saldrán, no desesperen
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canción que conjura la fatiga de los trabajos penosos, el sueño de la vigilia
3.
He viajado por el camino ahora es mucho y creo que con fatiga de terror para armar la carpa para pasar la noche
4.
Yo también he leído, imparcial, ya que son, algo sobre el fanatismo reaccionario, muy en boga hace cuarenta años; cómo diablos tiene que pagar un alto precio por el entusiasmo de la gente! Cuántos gastos militares, las escuelas pobres y los hospitales! Qué bestia espectacular camello! Es capaz de soportar la fatiga de millas en el desierto caliente, sin mostrar el menor signo de fatiga
5.
Cualquier ser humano, a ese ritmo, se habría venido abajo después de unos minutos, yo no sólo no sufría fatiga, sino más nadé y me absorbe más energía; dolores musculares y calambres, gracias a la renovación celular continua, eran prácticamente inexistentes
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Durante cuatro o cinco díasdesempeñaba sin embarazo ni fatiga la tarea de tres mujeres
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muy bien la fatiga deaquel pequeño esfuerzo; pero, aunque ella,
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que la fatiga corporal es casi siempreun alivio para los dolores
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la vida del hombre; la compensación desu fatiga, la alegría de
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Rendido de fatiga, con el estómago revueltopor el hedor, me metí en casa
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Rendido de la fatiga, se entregó al sueño por un momento; pero tuvovisiones aterradoras
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que los pronunciaban con la vozentrecortada por la fatiga
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tiempos un vago deseo, graciasa la fatiga de su amor y aún más al miedodesapoderado
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profunda y en los rasgos desu rostro cierta expresión de fatiga, que eran lasdos cosas
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ha hechoodioso; la sucesión de las horas le fatiga; los cuidados
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asombrosa para la fatiga y las privaciones
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pesar de esta fatiga, juntó su voz álas aclamaciones de todos los grupos que encontraba al paso
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( Con fatiga y
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CUESTA ( sintiendo gran fatiga, se sienta)
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pensamiento por la fatiga y el vértigo de la desorientación,creían que la noche no iba
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El camino que llevaronfué con fatiga y peligro por ser largo y la tierra enemiga, puesta enarmas, retirados en lugares fuertes, los frutos recien cogidos de lascampañas; con que la comida las mas veces se compraba con sangre yvidas
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Abierta una puerta deGalípoli, se arrojó con sus seis caballos sobre el enemigo desalentadode la fatiga del calor, y las armas; siguiéronles los cien hombres, ycon poca resistencia todo lo vencieron, y degollaron
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ejército, sucumbediezmado por los encuentros parciales, las sorpresas, la fatiga,
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prisioneros, separa a losoficiales y se retira a descansar de tanta fatiga, dejando orden
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generación de un día, hijos del acaso y la fatiga
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Por las noches, rendidos de fatiga, entretenían la espera del
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hombre y a todos los animales que el movimiento y la fatiga
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agitado por losacontecimientos del día, la fatiga lo había sumido
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Estaba escondida como un delito, oculta como una pena, en el cuartitodel sobrado, recostada con fatiga y desaliento en el quicio de laventanuca
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Era entonces cuando buscaba enardecida los libros devotos para aplacaren los manantiales de su doctrina la sed y la fatiga del corazón
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Hacia las dos de la mañana sucumbiendo de fatiga quise
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ojos, y una fatiga en la voz y en el aliento quela ponía en cuidado
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analogías queestablecía el cerebro, enfermo acaso, le recordaban la fatiga de losreyes, la fatiga
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Al verse en el castillo dió por bien empleada la fatiga de la
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La fatiga los sumía en unestado
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dejan en tierra a las sabinas y se apresuran aapartarse, ahogados de fatiga
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despreciador de la fatiga, quecontuvo el empuje enemigo
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el Cantó,sudoroso y trémulo aún por su reciente fatiga
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fatiga de una reciente posesión; otras quejándose de su
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rendido de fatiga, sin encontrar en losferoces rostros que le rodeaban una mirada de
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eficacia y fatiga no los dejaba dormir en el ocio de su
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las obligaciones decaballero con su fatiga de convaleciente,
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engendrada por la fatiga física
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dos en unabrazo, llorando don Sabas y ahogándose de fatiga el
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casa, cuerpo yespíritu abatidos por la fatiga y el poco éxito, pues
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26 en caminos muchas veces: peligros de rios, peligros de ladrones, peligrosde los de la nacion, peligros en los Gentiles, peligros en la ciudad,peligros en el desierto, peligros en la mar, peligros con falsos hermanos: 27 en trabajo y fatiga, en muchas vigilias, en hambre y sed, en muchos
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mano, y tan pálido por la fatiga y la pérdida de lasangre, que la demacración le desfiguraba
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—En esto, muy sencillo; cuando se siente fatiga intelectual por
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Por la fatiga que sentía, por el calor que lo abrumaba, por la
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consecuencias de una fatiga intelectual yfísica, un abuso de estimulantes morales y
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por latarde, y produce la sensacion de fatiga con rigidez de los músculos dela pierna
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En la region renal, hay dolor como de luxacion estando sentado,inquietud, fatiga y
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Cuando Martín volvió triunfante, muerto de fatiga y con sus dosjabalíes, el pueblo entero le consideró
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Todos acusaban la fatiga de la caminata de la noche anterior
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Era la una de la manana y Maurice, pese a su vigor atletico, estaba deshecho por la fatiga: por fin renuncio a su busqueda, y Lorin detuvo un coche de alquiler
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El corazon de la joven se henchia con estas dulces palabras: la languidez del amor, la fatiga de sus sufrimientos pasados, consumian sus fuerzas
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La fatiga pudo más que el miedo
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Irene sintió la maleza desgarrándole la piel de los tobillos y el peso de la fatiga consumiéndole los músculos
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Al fin, cuando presiente que sus recursos van a agotarse, que una reiteración puede quitar relumbre al juego de la Protagonista, habla tan persuasivamente de mi fatiga, de mi deseo de reposo y de intimidad, después de tantas y tan crueles tribulaciones, que nos dejan marchar, entre los guiños entendidos de los hombres que ven descender a mi esposa la escalinata de honor, colgada de mi brazo, con el cuerpo modelado por el vestido
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La fatiga se le marcaba en el rostro y parecía tener doble edad de la que aparentaba tres días antes
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—Todo el mundo parece encontrarse en un estado de agitación, excitación, fatiga general y gran irritabilidad, todo muy característico de esta clase de acontecimientos
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La llegada de su columna levantó el ánimo de los guardias civiles sublevados, que empezaban a ser víctimas de la fatiga y del desaliento, conscientes de que el fracaso de la negociación entre Armada y Tejero había impedido un desenlace favorable del secuestro y de que a cada momento que pasaba era más difícil que el ejército acudiera en su auxilio; pero, además de proporcionar una momentánea dosis de moral a los rebeldes -permitiéndoles creer que por fin la Brunete se había unido al golpe y que aquel destacamento era sólo la cabeza de puente del esperado movimiento general-, tan pronto como se puso a las órdenes de Tejero Pardo Zancada se concentró en la tarea de insubordinar otras unidades: provisto de un listín telefónico de la división que se había procurado en el Cuartel General y saltando de teléfono en teléfono a medida que quienes dirigían el asedio al Congreso le cortaban las comunicaciones con el exterior hasta dejar únicamente cuatro o cinco aparatos en funcionamiento de los ochenta de que disponía el edificio, Pardo Zancada habló (desde un despacho de la planta baja del edificio nuevo, desde la centralita, desde las cabinas de prensa) con numerosos jefes de la Brunete dotados de mando en tropa; tras dar novedades a San Martín llamándole al Cuartel General, habló con el coronel Centeno Estévez, de la Brigada Mecanizada II, con el teniente coronel Fernando Pardo de Santayana, del Grupo de Artillería Antiaérea, con el coronel Pontijas, de la Brigada Acorazada XII, con el teniente coronel Santa Pau Corzán, del Regimiento de Caballería Villaviciosa 14
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y la realidad era que a aquellas alturas de la madrugada -a medida que tras la comparecencia del Rey en televisión caían en cascada las condenas al golpe de las organizaciones políticas, sindicales y profesionales, de los gobiernos autonómicos, de las alcaldías, de las diputaciones, de la prensa y de un país entero que había permanecido en silencio hasta que vislumbró el fracaso de los golpistas- el interior del Congreso empezaba a estar maduro para la capitulación, o eso era al menos lo que pensaban quienes dirigían el cerco al edificio y habían abandonado ya la idea de asaltarlo con grupos de operaciones especiales por temor a una escabechina y concluido que bastaba dejar correr el tiempo para que la falta de apoyos externos hiciese sucumbir a los secuestradores: salvo los principales líderes políticos, aislados durante toda la noche en otras dependencias del Congreso, los parlamentarios permanecían en el hemiciclo, fumando y dormitando e intercambiando en voz baja noticias contradictorias, a cada minuto que pasaba más seguros de la derrota del golpe, vigilados por guardias civiles que intentaban hacerles olvidar los ultrajes de los primeros instantes del secuestro tratándolos con mayor consideración cada vez porque cada vez estaban más desmoralizados por la evidencia de su soledad, más diezmados por el sueño, la fatiga y el desaliento, más arrepentidos de haberse embarcado o haberse dejado embarcar en aquella odisea sin salida, más asustados ante el futuro que les aguardaba y más impacientes por que todo acabase cuanto antes
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La coca, de la que cargaban una buena provisión, los ayudaba, pero en esta ocasión no hacían uso de ella con intención de aturdirse, sino tan sólo con el fin de aplacar el hambre y vencer la fatiga
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A fin de evitar la fatiga de los quelonios, estableció turnos y reemplazos cada sesenta mil años
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El normando, que estaba rendido de fatiga, se arrojó sobre las pieles y se durmió a los pocos momentos, mientras el negro y el kabileño, sentados cerca del fuego, velaban por la seguridad del ganado
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El marinero abrió los ojos con fatiga:
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Abrumado por la fatiga, Miller se deslizó hasta quedar sentado, y apoyó el pecho en acción de gracias contra la segura barrera de la cuerda
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Para entonces a Jesús Dionisio le sonaban todos los huesos y a Claveles los colores del vestido se le habían desvanecido, tenía la expresión hechizada de una sonámbula y un siglo de fatiga se había derramado sobre el esplendor de sus veinte años
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El normando, que estaba rendido de fatiga, se arrojó sobre las pieles y se durmió a los pocos momentos, mientras el negro y el cabileño, sentados cerca del fuego, velaban por la seguridad del ganado
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Después de beber el resto del vino, escuchar el concierto dos veces y hablar de mil cosas, estaban muertos de fatiga y ella sugirió descansar en el diván
72.
Culpa por los sueños húmedos donde ella lo llamaba con gestos obscenos, culpa por observarla escondido cuando se agachaba a orinar entre las matas, culpa por seguirla a la acequia a la hora del baño, culpa por inventar juegos prohibidos en los que se escondían lejos de los demás acariciándose hasta la fatiga
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Eran muy fuertes y ágiles, cada uno llevaba más de treinta kilos de peso encima, pero eso no les molestaba, los músculos de piernas y brazos eran de cemento armado; mientras que los expedicionarios jadeaban, a punto de desmayarse de fatiga y calor, ellos corrían con pasos cortos y los pies hacia fuera, como patos, sin el menor esfuerzo y sin cesar de hablar
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La impaciencia o la fatiga la hacían torpe, culebreaba buscándolo pero resbalaba en la humedad del placer y del sudor del verano y por último le dio risa y se desplomó aplastándolo con el regalo de sus pechos, envolviéndolo en el trastorno de su pelo revuelto y dándole instrucciones en español que él no comprendía
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El frío, el hambre y los temblores que le producía la fatiga le otorgaron una peculiar sensación de clarividencia; le parecía flotar por encima de su cuerpo, como si el vínculo entre su conciencia y su cuerpo se hubiera atenuado, y le invadió una sensación de conciencia extrema con respecto a la ciudad y a la isla entera
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Hambre, fatiga, miedo
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Yo me quedé atrás, medio oculta por unas lonas; desde allí vi a Pedro y el alma me dio un brinco de amor y tristeza y fatiga
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Estábamos en medio del funeral, al que asistieron todos los vecinos, cuando aparecieron en Santiago dos soldados en harapos, cayéndose de fatiga y uno de ellos malherido
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La hermana-gata hace una pose, con el músculo del ceño agarrotado con expresión de fatiga
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Marías, y justamente por eso lamentaba que la fatiga fuera más fuerte que su pasión
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Álvaro, que no por estar alejado era ajeno a las estrecheces de su casa, pudo observar las muestras de fatiga y el deterioro que el paso del tiempo y la falta de medios habían ocasionado tanto en el edificio como en su contenido
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Aparecieron en la capital muertos de fatiga, barbudos y roto-sos, habían caminado millares de kilómetros en una naturaleza incle-mente de valles y alturas, de calores infernales y de hielos eternos, jun-tando por el camino llamas y vicuñas del altiplano, calabazas y armadi-llos de las pampas, pájaros de las cumbres más altas
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Era un correo del padre de Clemencia, que apenas pudo hablar de fatiga
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"Sí, es necesario", asintió Ernesto, con fatiga
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Mi decepción y fatiga estaban a punto de provocar un fuerte gruñido, que hubiera soltado muy a gusto, de no ser porque de repente Rachel me dijo:
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Gracias al paquete de la Cruz Roja Internacional me salvé de esta enfermedad y comencé a restablecerme de la fatiga
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Apenas disparados los primeros tiros, otros muchos franceses, extenuados de fatiga, y encontrándose ya sin fuerzas para combatir si no les caía del cielo o les brotaba de la tierra una gota de agua, acudieron a beber, y viéndola tan reciamente disputada, se unieron a los defensores
88.
Y duró de tal forma aquel estado de cosas cuarenta días enteros, quejándose siempre Abu-Kir de un resto de mareo: y a diario, una vez a mediodía y otra vez al ponerse el sol, iba el barbero al khan para servir y dar de comer al tintorero con la ganancia que le proporcionaba el destino del día y su navaja; y el tintorero se tragaba panecillos, cohombros, cebollas frescas y agujas de kabab sin fatiga ninguna de su cuidado estómago; y en vano el barbero le encomiaba la belleza sin par de aquella ciudad desconocida y le invitaba a que le acompañase a dar un paseo por los zocos o los jardines, pues Abu-Kir contestaba invariablemente: "¡Todavía tengo mareo en la cabeza!" y después de exhalar diversos regüeldos y soltar diversos cuescos de diversas calidades, se sumergía de nuevo en su pesado sueño
89.
Juan de Dios, libre de la fatiga del Parlamento, que tan agobiado le traía, se dedicó a remover el personal de su Ministerio: todo era traslaciones, cesantías, empleados que venían no se sabe de dónde; otros que se iban a sus casas a mascar el vacío, como dijo un cesante de aquel tiempo
90.
Cualesquiera que fuesen los móviles, estrategia o fatiga, ello es que la Soberana y el Soldado se separaron cada cual con su tema
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¿Iba a acostarse ahora? ¡No! La fatiga de hacía media hora había desaparecido
92.
Después de comprobar con sorpresa que la paciente no deseaba responder a ninguna pregunta acerca de la clase de vida que había llevado en el pasado, solamente podía presumir que padecía la dolencia desde hacía mucho tiempo; que ésta había sido originada por algún sobresalto muy grande, seguido de un periodo prolongado de ansiedad, del cual había señales evidentes en su rostro, y que había empeorado gravemente por la fatiga de su viaje a Londres, el cual la propia paciente reconocía que había emprendido en un momento en que un gran agotamiento nervioso la incapacitaba totalmente para viajar
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Lo es también que un paisano, vecino de Quitapellejos, se presentó en el Cuartel general de López Domínguez con el cuento de que los de Atalaya se hallaban muertos de fatiga y de hambre, y que acaso se rendirían si se les aseguraba que no serían fusilados
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El éxito de los experimentos le cargó temporalmente de energía, como sucedía siempre, pero la fatiga finalmente lo venció en las horas anteriores al alba y se fue a acostar al laboratorio del láser
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Pero mientras se abrazaban empezaron a sentir la fatiga y comprendieron que debían dormir
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Erica se dio un baño para quitarse la tierra y la fatiga del viaje, a pesar de que el trayecto en avión había sido reconfortantemente corto
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También da la impresión de que funciona como un tónico general: combate la fatiga, aumenta el bienestar, agudiza los sentidos y alienta la lucidez, pues incrementa la memoria a largo plazo
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El estrago de la enfermedad secreta es fácilmente atribuible a achaques de los años, a fatiga, al cada día estancado en la rutina roma de una vida sin objeto
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Aire de fatiga
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Bajando por la escalera bajo la mirada dolorida del Cristo azotado, el comisario siente bombear su propia sangre, lenta y fuerte, desvaneciendo la fatiga