1.
Incluso la moda había cambiado desde el bombín clásico y paraguas, había ido a los pantalones vaqueros, botas y chaquetas de cuero
2.
Llamando a las puertas rojas brillantes pidiendo unas monedas o un paraguas o sólo una palabra: una palabra que el sueño de la noche, ya que para ellos se ha convertido en una quimera, "amigo"
3.
La gente lo mojaba con los paraguas
4.
y lagente pasaba chapoteando en el fango, con el paraguas calado
5.
Tónica, cuidando de ladear el paraguas paraque la cubriera bien, y mirando al suelo, como
6.
Envuélvese la mano en el pañuelo, toma elgran paraguas, da vuelta la llave en
7.
paraguas, y luego la portezuela; Doroteasalió, y cubierta con el paraguas, salvó de un
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paraguas, charlando envoz alta al través de las calles solitarias y
9.
los pocos pasos me volví y le dejéel paraguas a Jacoba
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negro, con el paraguas debajo del brazo, el mismoque en mi cuarto tranquilo y feliz de la travesía
11.
—Abre el paraguas, Carlota—dijo Presentación por lo bajo
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paraguas bajo el brazo
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estaciones un Viernes Santo, en adorablecompañía; el paraguas
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Le complacía poco salir enprocesión, bajo un paraguas, con la
15.
Que en el invierno soy Paraguas,
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No tardó tres minutos en regresarcon un paraguas viejo entre las
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emprenderpor la cuesta abajo un trote ligero, con el paraguas debajo del brazo
18.
) Bajo un paraguas de Pinón de Pepa—el casero de losmarqueses—recorren, como
19.
voces, furioso, empeñado en abrir el paraguas quetropezaba con las ramas y se enredaba en las
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buscando un paraguas por las calles de Lúzaro
21.
no traía paraguas
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ofrecerle el paraguas y taparme con el de la criada, le dejé irmojándose hasta casa
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en los días nublados si le faltaba el paraguas
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paraguas en el sobaco; y con el pan y el quesoen una mano y en
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elhorizonte, y metieron los ojos en el plato, abriendo el paraguas
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las casas negros, las acerasinvisibles bajo las encontradas corrientes de los paraguas, y
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paraguas iban por las aceras,cediéndose el paso con dificultad y cubriendo mal a las
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El paraguas se letrababa a cada instante con los
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Apuntando con su paraguas a una esquina de la acera de enfrente, añadióel buen hombre lo
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Diciendo lo cual, cogió de la red manta, saco y lío de paraguas; peroLucía con su juvenil vigor
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Con la varilla de un paraguas viejo, hacen un buril, y con este y unmal cortaplumas, tallan todo lo
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abriera el paraguas pues lo llevaba en la mano y, aun así, me mojaba
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Detrás de ella, yacían los cadáveres de las gaviotas negras y un paraguas roto
34.
Pero lo más importante de todo es que el Apolo proporcionó un escudo, un paraguas bajo el cual se enviaron naves robotizadas de brillante ingeniería por todo el sistema solar para que efectuaran un reconocimiento preliminar de docenas de mundos
35.
A la admiración de los griegos clásicos por el amor homosexual le sucedió el repudio cristiano de esa forma de amar que en el siglo xxi ha encontrado, no obstante, un paraguas legal que lo protege en la legislación de los países más avanzados
36.
Alguien había abierto un paraguas, y lo sostenía sobre su cabeza
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Estaba sentado en un rincón, con el abrigo puesto y el paraguas Arthur en brazos
38.
Los que estaban fuera habían abierto los paraguas
39.
–Hay corral… Ahí tras la puerta está el paraguas
40.
El equipo de mi madre consistía en una colchoneta, un saco de arroz y un pesado paraguas construido con un lienzo pintado con aceite de t'ung[6] todo lo cual debía transportar a sus espaldas
41.
Y a él le bastó eso, pues ella le rodeó el brazo con ambas manos y mostró bien a las claras que se consideraría feliz de caminar por el mundo junto a él aunque no tuviese más protección que un viejo paraguas, siempre que fuera él quien lo llevara
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Los mismos; VENANCIO y un MOZO con paraguas y capotes
43.
Bajo el paraguas de la CIA
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A la media hora abandonaba el aeropuerto, con la pequeña maleta en una mano y el paraguas de empresa en la otra
45.
Se puso el cigarrillo en la boca, cogió el recibo, su maleta y su paraguas y se encaminó al hotel
46.
El Obispo sacó al Nazareno en procesión y todo el mundo salió detrás rezando y haciendo mandas debajo de sus paraguas, ante las burlas de los empleados del Instituto Meteorológico, quienes se habían comunicado con sus colegas en Miami y podían asegurar que, de acuerdo a las mediciones de los globos sonda y las octavas de nubes, el aguacero iba a durar nueve días más
47.
Mi abuela llegó cansada y de mal humor al campo, pero a los pocos días enarboló un paraguas y con Caramelo a la saga recorrió los alrededores con gran curiosidad
48.
Surgió un portero con un gran paraguas y se ofreció para acompañarnos al coche, que es-peraba en la puerta, entonces salimos sin decir palabra, dudando
49.
Manfred se caló la gorra y la chica se resguardó con un pequeño paraguas
50.
Antes de entrar en un viejo portal miró hacia donde él estaba por ver si la seguía, un guiño disimulado y cómplice, en tanto plegaba el paraguas, y desapareció de su vista
51.
Nacib contó el dinero, agregó unos pesos de más -a pesar de todo, ella lo merecía-, la ayudó a tomar el baúl, el paquete pesado con los cuadros santos -antes colgados profusamente en su pequeña habitación de los fondos-, y el paraguas
52.
Luego te meten en la punta del pijo una especie de paraguas y aprietan un botón que lo abre
53.
Mariko estaba ahora de pie a su lado, en la galería, sacudiendo el paraguas en la oscuridad
54.
Su madre, su hermano y él estaban en la playa examinando los montones de restos del naufragio y algas marinas en la arena, cuando un viejo de barba gris, con alzacuello y un paraguas se acercó a ellos
55.
mi hermana Anita dejaba el paraguas goteando y subía al desván a parar el gramófono, y llovía el día entero, y se encendían las lámparas a las dos de la tarde y mi hermana Julieta paseaba sobre nuestras cabezas, ¿Qué tendrá hoy?, y esto todos los domingos de ese invierno, todos los lluviosos domingos de ese invierno,
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y él, despeinando las coles con el paraguas,
57.
Los vecinos de arriba, a quienes sus manejos de ave intrigaban hasta el punto de olvidarse de detestarlo, lo encontraron en medio de las coles, un sábado de Pentecostés, conversando con criaturas invisibles en un lenguaje lunar, y mi tía se topaba a veces con él a saltitos en la rotonda, cerca de la cervecería de los caracoles y de las ensaladas de pulpo, indiferente al tráfico, tropezando con las fachadas en fugas de perdiz que lo obligaban a regresar a casa, cubierto de tintura y de papel celo, hasta caer en el banco del huerto con la resignación de los ángeles baldados, así que el lunes por la mañana se ponía el sombrero tirolés, se proveía del paraguas y de la cartera y tomaba el autobús hacia la Secretaría de Estado como tomó el tren ese julio fatídico del año pasado en el que mi tía decidió que fuésemos a Esposende, Ana, a visitar a mis abuelos, de modo que viajamos horas y horas a lo largo de un paisaje de pinos y dunas, y hasta la madrugada siguiente no llegamos a una villa a la vera del mar, con nubes que rozaban las olas, los sauces llorones y las jaras de la margen, y dimos con la tienda de telas de mi abuelo, con las persianas cerradas, en uno de los extremos de la plaza,
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Había salido antes del desayuno, y yo me había sentado a tomar el mío cuando entró dando zancadas en la habitación, con el sombrero puesto y una enorme lanza de punta dentada bajo el brazo, como si fuera un paraguas
59.
Sí; Y un paraguas con puño de oro, muy apretado, y una chaquetilla de piel de foca, con botones de trencilla
60.
Puso en su cuarto de la calle de los Rederos un cartel pintado anunciando su ausencia temporal, echó se a la espalda un fardo de mantas y provisiones, empuñó su paraguas y partió a buen paso
61.
Apoyado en su viejo paraguas, arrollado ahora, el Padre Chisholm recorría, en peregrinación postrera, su Misión de San Andrés
62.
Levantándose de la mesa, cogió en un rincón de la estancia el paraguas de lana escocesa que MacNabb le diera tantos años atrás
63.
–Este paraguas goza de cierta importancia entre los paraguas distinguidos de Paitan
64.
[365] En la otra parte, sobre el tablero desnudo, se veían maletitas, sacos de viaje, líos de bastones, espadines y paraguas
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–Muy bien – respondió Carol, mientras tomaba las bolsas y el paraguas
66.
Sin molestarme en abrir el paraguas, corrí hacia la puerta y la abrí
67.
Por las aceras y las calles transitaba gente que se protegía de la lluvia, que ahora arreciaba, con paraguas abiertos o con periódicos sobre la cabeza
68.
Al menos la lluvia había cesado; eso era algo bueno pues ella había dejado el paraguas
69.
Los reporteros de las televisiones resistieron, acurrucados bajo paraguas y en sus camionetas, comentando los acontecimientos de la noche
70.
–Es que hay unos nombres tan raros en esto de los bastones y los paraguas… Son buhoneros
71.
Encontró al comerciante de paraguas ya vestido de fiesta y comenzó a caminar en su compañía hacia la casa del propietario, cuando Virginie, su cocinera, le dijo:
72.
Birotteau tenía derecho a considerarse un hombre superior en comparación con Molineux, así que la contestación del vendedor de paraguas le causó una sensación muy agradable y lo saludó con un gesto majestuoso
73.
–Cuando se tiene la cabeza bajo un paraguas, se piensa generalmente que se está a cubierto de la lluvia -dijo el arquitecto
74.
César dejó su paraguas junto a la puerta
75.
No sé si montar en bicicleta es un buen ejercicio, me tiene sin cuidado, no tengo ningún interés en vivir más años de los que sean estrictamente necesarios, pero me parece que hacerlo me permite un conocimiento más preciso y cabal de mis dimensiones humanas y, a la vez, un cierto deslumbramiento ante las bellezas insospechadas de mi barrio: los gatos que me miran con una inteligencia superior a la que poseo, las mucamas que se protegen del sol con paraguas y me saludan con una alegría tropical que nunca será mía, las chicas adolescentes que me ignoran y se ponen pantalones cortos bien apretados y me recuerdan con qué facilidad podría ser yo un criminal si alguna de ellas me mirase y me guiñase el ojo y me permitiese tocar ese cuerpo que las leyes me prohíben tocar, las mujeres que corren cantando una música que sólo ellas escuchan, las ardillas esquivas, los pájaros que se obstinan en cantar sobre los cables de luz, las casas espléndidas en las que nunca viviré y a las que nunca me invitarán porque un escritor impúdico y desleal no es bienvenido en las fiestas de aquellos que preservan una cierta reputación (una reputación que a menudo es falsa), los obreros de construcción y los jardineros ilegales y los limpiadores de piscinas que me quieren y me saludan porque saben que ellos, como yo, no tienen reputación y eso curiosamente nos hermana, nos hace iguales
76.
Sacó otra fotografía, en esta ocasión de un paragüero lleno de paraguas y de fémures a partes iguales
77.
Curiosamente para mí, entre la gente había muchos paraguas abiertos contra la nieve y, por alguna extraña razón, la visión de aquellos paraguas negros hizo que me diese cuenta de la altura a la que me encontraba
78.
…Te pedí diseños alternativos para el mango de un paraguas y me entregaste el diseño de un impermeable
79.
Deseo ideas creativas acerca del modo en que los paraguas comunes podrían usarse en publicidad
80.
Ante ellos, dos mujeres levantaron los paraguas simultáneamente
81.
No, no era sólo por Felipe, volvió a repetirse, mientras llegaba, aparcaba el automóvil en el garaje y corría con el paraguas violeta, bajo la lluvia, hacia la puerta
82.
Cerró los ojos, ladeó el paraguas y miró hacia delante
83.
Tyrin sacó un paraguas plegable del bolsillo de su impermeable y lo abrió
84.
Mientras subía por las escaleras cerró el paraguas, lo guardó en el bolsillo del impermeable y luego se lo quitó
85.
El funcionario del Ayuntamiento había abierto su paraguas y observaba la operación
86.
Y el grupo, bajo los paraguas, era una estampa enlutada de estremecedor y angustioso simbolismo
87.
—¿Quién es el tío del paraguas?
88.
Las costureras llegaban a la casa de los Coelho, bajo la protección de gruesos paraguas, con empapados rollos de tul y costureros llenos de lentejuelas y plumas tornasoladas
89.
Entonces lo olvidó, pues debía esforzarse; el maletín no resultaba liviano, y tenía el viento completamente en contra que le sacudía el gabán y le hacía doblar las varillas del paraguas
90.
Raban siguió con la mirada con la cabeza inclinada, apoyó el mango del paraguas en el hombro para ver mejor
91.
McFeyffe recogió su paraguas y echó a andar en dirección a la puerta
92.
–Cuidado -Hamilton apretaba con firmeza el mango del paraguas, mientras se dirigía al padre O'Farrel-: ¿Es agua lo que hay en ese recipiente?
93.
Antes de llegar a la puerta, Cras ya volvía a entrar por ella, cubriendo con su paraguas a un cura que vestía una larga gabardina negra sobre la sotana
94.
Les seguía otro cura, negro y grande, con el mismo atuendo y su propio paraguas
95.
Cras abrió con una llave que extrajo de un gran manojo, cedió la vez al sacerdote, cerró el paraguas y dejó que el cura negro entrara en último lugar
96.
Alvaro Tertulli y Ríven salen del edificio de administración —todavía con la sensación de absurdo producida por el contraste de los alegres adornos navideños que compartían la oficina con una desbordada burocracia funeraria—, ajustan los cuellos de sus gabardinas y, parapetados bajo el paraguas de Alvaro, se disponen a seguir las indicaciones del funcionario para encontrar el panteón de Coronado Basquier
97.
Riven, imantado por la proximidad de la mujer, cambia la protección del paraguas de Alvaro por la del tejado del panteón y se coloca junto a ella
98.
Alguien deja un paraguas olvidado en el bar La Pilarica
99.
Alvaro sostiene el paraguas con una mano y la maleta con la otra
100.
Mientras el sacerdote negro que siempre lo acompaña sostiene el paraguas y vigila el resto de las entradas del corredor que rodea la segunda planta del patio interno del número 34 de Ciudad Jardín, el obispo Magallanes llama impaciente por tercera vez a la puerta 23