1.
Despues de concluido le dan ábeber un huevo de avestruz crudo, y agua, haciéndole fumar tabaco, quees el regalo que le hacen al gualichu
2.
Este dia me fué preciso detenerme á esperar los víveres quehabia quedado mandarme el Justicia Mayor: de los que por fin llegaronsiete cargas solas, de las veintiuna que debian ser: cuyas racionesdistribuí á los soldados, por ahorrar el costo de las cabalgaduras de suconduccion, respecto à ser aquellas de bizcocho, tabaco y charque
3.
Pensé en Hemingway y su "El viejo y el mar" y traté de sumergirme en ese personaje fantástico, me imaginé anciano con barba y despeinado abundante, pero con la mente tranquila mientras gustavo ese dulce sabor de la inhalación de tabaco de pipa brezo
4.
Los ancianos están relajando sus cansados miembros sentados en los bancos rudimentarios, fumar tabaco, pipas mucho trabajo
5.
mantenían en su interior paquetes de tabaco terminados, envoltorios de chicles y
6.
Tóxicos procedentes del tabaco, contaminación
7.
Nohubiera estado bien no proporcionarle tabaco después de haberle dado decomer
8.
ahorquen, más de lo que pagaron sus abuelos, allá en lostiempos felices del estanco del tabaco,
9.
aplicación del tabaco envarias formas, el sabor detestable de la
10.
tabaco yofreciendo del oloroso polvo a los circunstantes
11.
dependencias, donde se fabricaba el rapé, las del tabaco sueltoy las de los cigarros,
12.
Preparan asimismo el tabaco y la coca, y todos estos
13.
superiorá todos los del mundo, el tabaco, el algodon, la caña-dulce y otrosmuchos frutos, como el papayo,
14.
coca, el tabaco, el café, el arroz ylas bananas de que se hacen orejones; frutos con que los indios
15.
El tabaco, que se cosecha algunas veces, produjo en 1828 cuatrocientaslibras vendidas al precio de un real
16.
Los Guilliches tienen una especie de tabaco, que machacan cuando estáverde, y le componen en
17.
proveía de tabaco; hablaba del tiempo y las labores alcriado, una
18.
rompió mientras el tabaco seesparcía en chispas
19.
atmósfera impregnada de un olor fuerte a tabaco yajos en estado de descomposición
20.
El marinero abrió la caja y sacó una biblia, un libro de viajes y unospaquetes de tabaco
21.
Tras el puñado de tabaco y la caricia subsiguiente, que era un
22.
barracas de cueros, en las curtiembres delas suelas, en los depósitos de tabaco
23.
forma de traílla; la cualen la misma, y más custodiada que tabaco en rama, por los
24.
El tabaco era
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tabaco, y que a la primeraocasión habría que satisfacer su gusto,
26.
una libra de tabaco
27.
él tendría que renunciara la peseta que le daba de vez en cuando para tabaco, a los
28.
¿Y el tabaco?
29.
oliente,apestando a vino y tabaco, rojo de la cabeza a los pies
30.
patrón: no se perdió ni una libra de tabaco
31.
tío Dick, ni ladistribución de vino, de tabaco y dólares lograron consolarlos
32.
[14] Cigarro aquí se refiere a lo que en Cuba se llamaba tabaco o habano
33.
imaginación aquella veladainolvidable, y pensó en su cuartito, en el tabaco esparcido
34.
escondiesen el tabaco en los altares á trueque deque le dejasen
35.
de suinvención: tabaco, pimienta
36.
mejor hechos los de tabaco; en el paseo no les permitíanlevantarse del asiento de
37.
persuadido de que el algodón, la miel o azúcar, y el tabaco
38.
El cultivo y beneficio del tabaco, así el negro como el que
39.
beneficio del tabaco negro para el que son necesarios
40.
factoría las crecidassiembras, cultivo y recogidas del tabaco,
41.
porcionesde tabaco negro y colorado, aplicando a cada clase el
42.
tabaco y para todas lasocupaciones que tenga a bien destinarlos,
43.
El plantío y beneficio del tabaco, así torcido como
44.
El tabaco de Filipinas por su calidad, y segun el gusto y opinion delos consumidores nacionales y estranjeros, ocupa el primer lugar,despues del de la Habana, entre todas las clases de tabacos que secultivan en Asia y América, y el precio ventajoso que el tabacode Manila conserva
45.
Los defectos del tabaco en un pais de jeneral consumo sonbien conocidos del público, y porque los conoce, es porque seretrae lo posible de su compra, y prefiere malo por malo el
46.
a Que se estienda el estanco del tabaco en Filipinasá todas las provincias exentas de él, sin escepcionalguna, valiéndose aquel gobierno de los medios suaves y delenidad con que se hizo la conquista y adquisicion de aquellos paises,y nunca, ó en muy raro caso, de la autoridad ó de
47.
ejército y superintendenciajeneral subdelegada de la hacienda pública, rentas del tabaco yvino, aduana, correos y secretaría del superior gobierno, aunquemerecian ser tratadas cada una en
48.
indijencia: y por último, que las rentas del tabaco y vinodeben ocupar un lugar muy preferente en el ánimo del Gobierno,para sacar de ellas todas las ventajas de que son
49.
contador, tesorero y factor de la rentadel tabaco, con los administradores de aduana y renta del vino, y conel ajente fiscal; los cuales, ademas de reunir los diferentes destinosincompatibles con su principal empleo, disfrutan acciones en la Nao deAcapulco en calidad de comerciantes y
50.
También se cultivan el tabaco, el trigo, el maíz, la quina y el caucho;y las empresas industriales
51.
El cultivo del maíz, el algodón, el tabaco y el cacao se estáextendiendo en el Brasil
52.
una coracha de tabaco ycon un buen alijo de algodones: apto, en suma, para pasmar a todos
53.
cultivar la tierra ysembrar el tabaco que se dá aquí en gran
54.
parné; y comouno es un cabayero y grasia a Dió quea siempre bien, dan pa tabaco y
55.
en que los esperimentadores usaban tabaco?
56.
Esto que se recoge, es el tabaco,
57.
plantas de todos los climas,inclusos el té y el tabaco
58.
El canton de Soleure, católico en su mayor parte, se distingue tambien con sus fábricas de gas, de algodon, tabaco, y papeles pintados
59.
Franciscanos, y hoy lo es por el clero secular, siendo su párrocoen la época á que se refieren estos viajes ó sean los años de 1878á 1882 el Padre Llorente, quien después de hacer toda la campaña dela primera guerra civil al frente de bravos gastadores isabelinos,dejó las armas dedicándose á espirituales ejercicios, hasta llegará la administración parroquial de Tabaco, el que le debe, gracias ásu actividad y aficiones artísticas, no pocas mejoras
60.
Los productos que constituyen la riqueza del pueblo de Tabaco, sonel abacá, el palay, el cacao y el café
61.
Tabaco tiene buenos edificios, siendo de citar la iglesia, el convento,el tribunal, las escuelas y no pocas casas de particulares
62.
Linda por Este con la mar, por Oeste con el pueblode Bují, de la provincia de Camarines Sur, por Norte con Tiui, y porel Sur con Tabaco
63.
El alcoholismo,el tabaco, los goces sensuales, la gula, y cuanto constituye unvicio ó un placer se puede servir á domicilio en todas partes delmundo, y solo el chino para proporcionarse el goce de aspirar
64.
, una especie de tabaco de las dimensiones de un
65.
Félix volvió a meterse la bolsa de tabaco en el bolsillo y empezó a apretar el tabaco firmemente en la cazoleta de su pipa
66.
No me jodas que me he dejado el tabaco en la habitación
67.
El tabaco picado no me gustaba en absoluto, pero Rose solía perfumar el suyo con un polvillo antillano que, por lo visto, enardecía algo más que las pituitarias
68.
Varios notables: el Práctico de Raudales, el Alcalde y el Maestro, el Pescador de Toninas, el Curtidor de Pieles, acababan de inclinarse sobre el cadáver, luego de echar la colilla de tabaco en el sombrero
69.
María Carlota era alta, morena, muy mona, alegre, sonriente y andaba siempre de punta en blanco, andaba siempre impecable, en la oficina era muy difícil encontrarla porque iba a diario a la peluquería y eso, claro es, le robaba mucho tiempo, el mudo Alejo cubría con muy cumplida eficacia todas sus ausencias, Alejo era listo como un rayo y además ponía buena voluntad, María Carlota le regalaba una cajetilla de celtas todas las semanas, a Alejo le duraba dos días y después fumaba lo que le diesen, la gente suele regalar tabaco con largueza, pitillos y hasta puros, eso es algo que se agradece mucho, es una costumbre que da pena que esté desapareciendo, es probable que Alejo también fumase colillas, pero eso no importa y tampoco hay por qué traerlo aquí, nunca hay razón para humillar a nadie, María Carlota tenía un novio de toda la vida, Esteban Rosende, delineante del arquitecto don Eduardo, el tío del jugador de chapó Cándido Julián, que había estado en la Legión, bailaba el tango y navegaba en piragua como pocos, si sigo por ahí me meto en otra historia y esto es peligroso porque después no hay modo de salir, María Carlota y Esteban Rosende acabaron riñendo, la verdad es que nunca supe la causa, y entonces ella empezó a salir con amigas y a rodar por la cuesta abajo, no tuvo suerte con los hombres, en eso influye mucho la casualidad, Cándido Julián se sabía el Martín Fierro casi entero, donde no hay casualidad suele estar la Providencia, vo esto no me lo acabo de creer del todo, la casualidad es como un jilguero metido en una jaula, que a lo mejor canta y a lo mejor se muere, la muerte de los pájaros es siempre caprichosa, y pudiera ser que no brotase sino en los espíritus que aciertan a buscarla, María Carlota no tuvo suerte con los hombres y también acabó bailando al son de la música de jazz de los derrumbamientos
70.
Como no viera a nadie más con quien hablar, emprendí el regreso a casa, deteniéndome para comprar tabaco y una botella de jerez y de paso obtener algunas impresiones más sobre el crimen
71.
Tras el discurso del capitán Muñecas la atmósfera del hemiciclo se distiende, los diputados intercambian fuego y tabaco y miradas mortecinas y Adolfo Suárez le pide por señas un cigarrillo a un ujier y a continuación se levanta de su escaño, camina hasta el ujier, coge el cigarrillo que éste le tiende y vuelve a sentarse
72.
Suárez es un fumador impenitente, lleva siempre tabaco encima y esta tarde no es una excepción (de hecho, ya se ha fumado varios cigarrillos desde el inicio del secuestro), así que su gesto es una forma de pulsar a los asaltantes, tanteando su grado de permisividad con los secuestrados e indagando el modo de conseguir información sobre lo que está ocurriendo
73.
O sea que en este asunto estaban metidos Mary Ann (¿o era la condesa Zerkowski?), el coronel Pikeaway, sentado en su despacho en medio de una densa nube de humo de tabaco con los párpados entrecerrados como si estuviera a punto de quedarse dormido o acabara de despertar, y Mr
74.
–Espero que hayan puesto tabaco -dijo Harley, mientras abría la puerta-
75.
Míster Micawber nos tendió la mano a los dos, después se cubrió el rostro con el pañuelo, que al parecer no sabía estuviera tan sucio de tabaco, y volvió a su ponche en el mayor estado de hilaridad
76.
Alí, también calla do y atento, les dio tabaco, sirvió el café y desapareció
77.
Contemplaba con cierta diversión a su compañero, hurgando en todos sus bolsillos en busca de tabaco con que llenar la pipa
78.
La habitación estaba austeramente amueblada y olía a humo de tabaco barato
79.
Ya en la escalera se olía fuertemente a tabaco
80.
Al igual que el abisinio, es un excelente andador y raras veces emplea el mehari (dromedario), el cual recorre sesenta y setenta kilómetros en doce horas, bastándole un poco de harina, agua y humo de tabaco, que es el café de esos rumiantes
81.
También puede obtenerse extrayéndolo del tabaco ordinario
82.
Miguel obedeció con cierta repugnancia y encontró un cuchillo de maniobras, como el que emplean los gavieros; además, una pipa y una bolsa de tabaco casi vacía
83.
En las pocas ocasiones en las que se ha podido conseguir son aquellas en las que el fumador reduce el consumo durante un tiempo corto para luego «mojarse» dejando el tabaco por completo
84.
{15} Pipa para fumar, muy usada por los orientales, compuesta de un largo tubo flexible, del recipiente en que se quema el tabaco y de un vaso lleno de agua perfumada, a través de la cual se aspira el humo
85.
La gran verdad es que no dependes del tabaco, ni siquiera mientras te dure la adicción a la nicotina
86.
En cualquiera de los casos, ¿por qué tienes que tener tabaco? Si todavía sientes la necesidad de llevar un paquete de tabaco a todas partes, creo que deberías volver a leer el libro
87.
Si el ex fumador no habla del tabaco, puedes pensar que se le ha olvidado, y a lo mejor no quieres recordárselo
88.
No temas, hablar del tabaco y sigue con las alabanzas
89.
Veo un fenómeno similar en la apatía que muestra nuestra sociedad hacia el problema del tabaco
90.
Los domingos en la puerta de la iglesia se retrasaba para ver pasar a los hombres, atraída por el ronco sonido de sus voces, sus mejillas afeitadas y el aroma del tabaco
91.
Cruzaron a pie las tierras bajas, donde la humedad maceraba la vegetación en un caldo eterno de lodo y sudor, subieron y bajaron los cerros entre iguanas inmóviles y palmeras agobiadas, atravesaron las plantaciones de café esquivando capataces, lagartos y culebras, anduvieron bajo las hojas del tabaco entre mosquitos fosforescentes y mariposas siderales
92.
Me explicó que su método para mantenerse en forma era simple: trotaba y levantaba pesas porque sin flexibilidad y músculos no había futuro en esa profesión, fumaba marihuana pero nada de tabaco porque a muchos clientes americanos les molestaba el olor, no bebía alcohol durante su trabajo, evitaba la tensión y pensaba poco, para no cansarse
93.
- Pues no es malo aunque ennegrece los dientes, y es menos venenoso que el tabaco
94.
Vegetariano, abstemio, enemigo del tabaco, carecía por completo de pretensiones intelectuales y obtenía sus mayores goces de las diversiones al aire libre y los encuentros amorosos
95.
Kate dio un suspiro de alivio: al menos no tendría que oler el maravilloso tabaco de Angie, la tentación era demasiado grande
96.
El aliento fétido a ajo, licor y algo parecido al tabaco de los hombres la golpeó como un puñetazo
97.
Me hace bien respirar el aire puro de las montañas, decía mientras aspiraba el humo negro de su tabaco
98.
Antes de despedirse le deseó buena suerte y le regaló sus más pre-ciadas posesiones: un paquete de tabaco y su cantimplora con los res-tos del aguardiente
99.
Bebió todo el contenido de un tirón y luego, instruido por la mujer, que había combatido junto a los hombres durante meses y sabía tanto de cuidar heridos como los médicos, se echó a la boca un puñado de tabaco y lo mascó ávidamente para amor-tiguar los espasmos del choc post-operatorio
100.
El humo del tabaco hacía que el ambiente, en verdad, estuviera caldeado y caso de levantar un brazo para intentar coger la consumición que uno de los atareados camareros pretendía largar desde la barra, el problema era unirlo de nuevo al cuerpo