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astas frasi di esempio
astas
1. · La disposición de la sustancia gris en las astas anteriores y posteriores
2. La finalización del canal sacro, el hiato sacro y las astas del sacro
3. Aunque puede resultar difícil, trate de identificar las inserciones delos músculos constrictor medio de la faringe (en las astas mayores del hueso hioides) y las fibras del constrictor inferior de la faringe (relacionadas con los cartílagos tiroides y cricoides)
4. astas, los huesos, los dientes del caiman, etc
5. menesterque uno le deje en las astas del toro
6. Si las que están en este caso tienen astas, se aplica á
7. pierden, no pudiendo transportarse las lanas, sebos,cueros, astas, etc
8. lafrente y las astas, se paseaba alrededor del circo en actitud
9. Entonces el toro, con las astas y la frente teñidas en sangre, se
10. conductores con sus astas enormes de reses viejas
11. Cuando el toro, recobrando su agresiva fiereza, bajó las astas, eltorero rodó hacia
12. astas, plantados cerca de la vía ymirando el tren con más
13. Para llegar á sus puertas es preciso ir en una góndola: las primeras gradas de la escalera que le dan acceso, hállanse cubiertas por el agua: se atracan las graciosas embarcaciones á unas astas que á las puertas de los palacios se encuentran, y se penetra con toda
14. El prisionero arrancó la última red de su testuz, coronada por sendas astas y emitió un amenazador bufido en dirección a quienes lo habían reducido
15. Así murió Ta-mdóka, el ciervo de siete puntas en las astas
16. Sus ojos se habían posado sobre la leña recogida para alimentar la hoguera, y en medio de la leña divisó dos bambúes jóvenes y como de dos o tres metros de largo; cañas muy ligeras, es verdad, pero de una resistencia a toda prueba; como que los javaneses y los indios hacen de ellas las astas de sus picas
17. El campamento estaba en silencio, la poca actividad que había en él era perezosa y soñolienta, desde las tranquilas conversaciones de los guerreros hasta la quietud de las banderas en las astas
18. Al examinar el musgo con mayor atención, vio que lo que en principio había tomado por las puntas de unas viejas ramas asomando por entre la alfombra de vegetación en realidad eran fragmentos de costillas y astas de ciervo: los restos de uno o más animales
19. y en las manos van las astas con buen hierro tajador,
20. a la distancia de seis astas antes del mojón
21. Cuando aquellas hermosas mujeres se vistieron los trajes que debían llevar, se adelantó un grupo de guerreros valerosos armados de escudo y lanza, cuyas astas eran de fresno
22. Una vez repartidos las torcas, pulseras, medallones y estandartes y después que algunas cohortes recibieran condecoraciones de oro y plata para las astas de sus banderas, habló Cayo Mario
23. Permanecieron mirando un lugar en que estaban clavando en el suelo seis águilas de plata en astas también de plata, adornadas con coronas, phalerae y torcas; ante ellas ardía un fuego en un trípode, había una guardia firme y un sacerdote togado con la cabeza cubierta echaba incienso en las brasas del trípode mientras recitaba las plegarias del atardecer
24. Tanto mérito tiene el que se pone entre los cuernos de una fiera, como el que se cuadra ante las astas de una nación [162]
25. Por primera vez veo vivir gente en movimiento: muriendo, en las astas del toro
26. Era ya mediodía cuando se avistó al macho con sus prodigiosas astas, y los cazadores pararon para estudiar el despliegue
27. Una vez alcanzado su total desarrollo, y pese a que los huesos dejaban de crecer, las enormes astas en continuo agrandamiento contribuían a dar la impresión de que el megacero macho aumentaba en altura y anchura cada temporada
28. Tuvimos que cortarle las astas para separarlos
29. Asintieron con la cabeza y se apresuraron a coger las astas de lanza envueltas
30. Crozier supone que a Silenciosa le ha costado media hora, o menos aún, hacer el trineo con patines de pescado y astas de caribú, pero se queda sentado en su pila de pieles durante una hora y media o más, porque calibrar el paso del tiempo es difícil sin su reloj de bolsillo, y sigue cayendo en un sueño ligero, aun estando sentado, mientras la mujer trabaja en los patines del trineo
31. Ahora ya sin astas
32. Se demoraron escasos minutos en fijar los hierros a las astas y luego partieron al galope
33. Encima del hogar hay una cabeza de ciervo con grandes astas
34. El viento del deshielo, un toro que no es un toro de arar, ¡un toro furioso, un destructor, que con astas coléricas rompe el hielo! Y el hielo ¡rompe los puentecillos!
35. Los látigos, las astas de los venablos golpean a los esclavos
36. Los árboles atrapan las astas del sol, que sangra en un cielo púrpura
37. Esa noche sueño que me persiguen, que corro eternamente como un venado ante las lanzas del cazador, con las astas enhiestas, aterrada porque he perdido el tesoro, y en el sueño lo busco antes de que los otros lo encuentren
38. Las pinturas eran negras y rojas sobre el fondo ocre de las paredes, y los colores estaban fundidos en la piedra: ciervos con astas y bueyes de largos cuernos que huían de las lanzas de los cazadores
39. No, aquellas minúsculas astas de madera tenían algo misterioso que provocaba la muerte con un simple rasguño
40. ¡Lo que le gustaría tener unas cuantas más de aquellas astas portadoras de muerte! Si la mujer abandonara su tarea un instante, él se descolgaría hasta el suelo, cogería un puñado de flechas y estaría de vuelta en el árbol antes de que la mujer hubiese respirado tres veces
41. y casi mágicamente convirtieron aquellos troncos en tablones, vigas, costillas y astas
42. Llamador de Cuervos golpeaba con un hueso las astas de un caribú y entre cánticos extendía su Sueño de Poder sobre los presentes
43. Ante ellos se alejaban con elegancia el caribú que antes se había detenido para estudiarlos y en el que ya se formaban las protuberancias de las nuevas astas
44. Soledad aminoró la marcha y se detuvo a pocos metros de un soberbio ejemplar de lomo musculoso y astas afiladas como puñales, plantado junto a una vieja encina, muy entretenido en comer las bellotas que alfombraban el suelo
45. En el centro del ejército romano los manípulos de las legiones habían sido dispuestos de acuerdo a lo que era costumbre, con los jóvenes velites en primera fila, a modo de infantería ligera avanzada al grueso de las tropas; tras ellos venían los hastati, a los que se les había armado especialmente para aquella ocasión con lanzas más largas de lo habitual, armas que recordaban aquellas astas del pasado de las que tomaron su nombre pero que luego habían sido sustituidas durante la larga guerra contra Aníbal por pila, más cortos, similares a los del resto de tropas; pero en aquella mañana, por orden de Lucio, y siguiendo las directrices marcadas por su hermano, los hastati habían recuperado sus antiguas largas lanzas para hacer frente así con mayor efectividad a las largas sarissas de la falange enemiga; completaban su armamento con un escudo rectangular denominado parma y con corazas de cuero, espinilleras y un yelmo que en muchos casos aún era de bronce
46. Las astas oscuras hendieron el aire con un silbido y golpearon contra los escudos y cayeron a la arena del desierto
47. Entonces, oí el roce de los arpones contra las rocas y las astas
48. Casi ávidamente, como un joven gamo irrumpiendo en nuevo prado, con las astas dispuestas, saltó a la canoa de los mensajeros y emprendió el regreso al poblado
49. La echa y las astas del animal habían sostenido la
50. La cabeza alzada sobre las astas en el cojín de metal,