Usa "brazada" in una frase
brazada frasi di esempio
brazada
1. Mita entró poco después por la puerta trasera con una brazada de leña para el fuego
2. El investigador había cortado pasto en el Ejército Rojo, y recordaba que la siega y la natación tenían el mismo ritmo; cuanto más suave el movimiento, más larga la brazada
3. Soltó la brazada de leña en el suelo
4. Entonces, Bill me tomó por las piernas -más tarde supe que las había dejado fuera, en la tercera dimensión- y tiró de mí hacia la realidad, trayéndome de regreso con la niña, el perro y una brazada de recuerdos que prefiero olvidar
5. –Y en invierno, LeRoy, no dejes nunca de llevar una brazada de ramas de pícea en la parte trasera de tu avión; bien atadas, por supuesto
6. Después de forcejear entre el equipaje atado, el empresario reapareció con una gran brazada de ramas
7. Nadaron uno al lado del otro, los dos desnudos, al principio lentamente, después un poco menos, cambiando la calma brazada del estilo pecho por la más enérgica del crol, hasta la escollera, jadeando por el esfuerzo
8. Uno de los fusileros golpeaba el agua con una brazada cansina
9. Una vieja, cuya cara enfurruñada delataba su preocupación, se dirigió hacia su casa con una brazada de hierbas secas
10. Cordell dejaba la habitación con una brazada de almohadones cuando Margot salió del ascensor
11. Al parecer, alguien había trasladado sus cosas a ella, pero Windle solucionó el asunto por el sencillo sistema de cogerlo todo en una brazada y tirarlo al pasillo sin contemplaciones
12. Llevaba una brazada de armas de diferentes clases, y miró con expresión acusadora al extraño enano
13. El mozo entró con una brazada de leña y se arrodilló junto a la chimenea para encender el fuego
14. Tenía la brazada suave y poderosa de quien se encuentra a gusto en el agua
15. Minutos después, salía la enfermera con una brazada de ropa y una palangana de hierro esmaltado
16. Habían grabado sus nombres en algunas columnas, ¿estarían aún? Deseó entretener al guardián para ver las huellas del hermoso pasado, pero el hombre andaba a grandes zancadas, sin percatarse de que un corazón a una brazada de él se estaba derritiendo