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Tipos de flora en el intestino:
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● Flora proteolítica, cuando disminuye la flora protectora proliferan estas bacterias que compiten por el
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flora y de las lenguas, usos, religión y costumbres de tierras ynaciones remotas
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un ejemplarfemenino y bondadoso de la flora del Sudoeste,
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Flora Vods, la queservía la mesa en el Hotel de la Templanza?
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laDuquesa tuvieron a bien llamar a Flora; Flora no era una
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insuficiencia de alimento, Flora propuso una nuevadistracción:
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en la flora de lacomarca
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Cuando esto decía, sentí la voz de doña Flora y los pasos de un
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Laverdad, señora doña Flora; es una
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Doña Flora, por elcontrario, veía mermados con
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—El pueblo quiere que juren—dijo Flora
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Lord Gray, que había puesto atención a lo que doña Flora nos
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Dejome lord Gray en las garras de doña Flora, la cual continuó
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Me despedí con gran precipitación de doña Flora, dejándola en
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Sieboldt cuyasnotables obras acerca de la flora japonesa lehan conquistado
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proporciones,tienen también su flora y su fauna; las rápidas pendientes expuestas alsol del mediodía, se
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encanto de susmatorrales, la flora de las landas, la de los
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lamaravillosa flora de los mares
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Flora y Demetria tomaron riendo los cucuruchos que les ofrecía elcapitán y le
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La vivaracha Flora le hacíasufrir
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En esta triste situación la sorprendió Flora al entrar para darle losbuenos días
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Y allá va Flora camino del río con mucho más peso en la cabeza que lasdamas que
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las jóvenes, Joyana hacia Flora, Plutón haciaDemetria
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inclinación porque Flora era con ella tan tierna comorespetuosa
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de unhombre encaramado en el balcón del cuarto que ocupaba Flora
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En seguida silenciosamentesubió arriba y fué al cuarto de Flora
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Flora hacía signos negativos con la cabeza, pero en el fondo de su almaestaba
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uno de ellos, el destinado á Flora, sonóun golpe
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Flora atravesó la estancia de los molares y abrió la puerta que sehallaba en el fondo
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Flora después de vacilar un
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Flora con la cabeza baja
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Y al decir esto Flora besó conmovida sus propios dedos que había puestoen cruz
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psíquico de sus compatriotas y contraria enteramente ála ley de la evolución, Flora se
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Flora rechazaba las últimas con energía, peroescuchaba las primeras con
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Flora no pareció por Entralgo
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Flora se dejó convencer y permaneció en la casa
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Esta conductatenía sorprendida y disgustada á Flora
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Así pasaron al comedor llevando á Flora en el medio
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labios del ama de gobierno una sonrisa maliciosa yprofirió dirigiéndose á Flora:
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antes de su salida para Oviedo, el reconocimiento de Flora porhija del capitán y lo
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Felicia, Flora yalgunas mujeres permanecieron en el prado
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Flora gritaba y queríaarrojarse igualmente, pero el barquero la retuvo
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había celebrado en la pequeña iglesia de Entralgo la unión deJacinto y Flora, de Nolo
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bastantepara alimentar á su propia flora de bosques, céspedes y musgos, muysuperior, por el número de las
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Es un cambio continuo en el aspecto de la flora, conforme su aproximauno á las
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escalonamiento de la flora
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estudiaban la flora arrancandohierbecillas y discutiendo ampliamente acerca del
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Después de haber charlado mucho, entraron con Doña Flora en la iglesiadel Carmen, y allí,
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bueno ysano en casa de Doña Flora
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Flora, máspintorreado aquel día que un retablo, y ferozmente desfigurado con laalegría que mi
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Doña Flora se entristeció, y llamándome aparte
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La siniestra luz de las rojizas llamas delMayon, los monstruos y quimeras del Lignion, la flora de sus campos,las leyendas de sus bosques, y sobre todo la
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Las hojas enormes, abiertas como manos, parecen de flora submarina, por sus texturas de madrépora y de alga, con flores bulbosas, como faroles de plumas, pájaros colgados de una vena, mazorcas de larvas, pistilos sanguinolentos, que les salen de los bordes por un proceso de erupción y desgarre, sin conocer la gracia de un tallo
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flora de los fuegos, tú,
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Flora se sentó muy compuesta en el ancho diván que corría a lo largo de la pared y miró al inspector
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Flora se alejó de él con los ojos dilatados por el horror
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—Lo que me gusta en usted —dijo Flora con algo de malicia— es su alegre conversación
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Echó un guijarro en el agua y, cambiando de actitud, se volvió hacia Flora
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Miss Flora Ackroyd hereda inmediatamente la cantidad de veinte mil libras
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Flora se había vuelto hacia el secretario
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Flora tenía la mano en el picaporte y Parker entró por la puerta del vestíbulo, llevando la bandeja
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—Usted no comprende —replicó Flora con desesperación—
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Los árboles, que hasta aquel momento habían visto, no tenían frutos, pero en el interior de la selva esperaban encontrar frutales, sabiendo que la flora de las islas Andamanas no es muy distinta que la de la India
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Los tamarindos son muy comunes en la India, pero en cambio en las Andamanas se ven con muy poca frecuencia, pese a la similitud de flora entre aquellas islas y el continente
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La conversación se centró exclusivamente en los graciosos seres alados y en la flora de la comarca
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La faena de levantar aquel rompecabezas duró cuatro años, alteró la flora y la fauna y tuvo un costo tan elevado como todos los barcos de guerra de la flota nacional, pero se pagó puntualmente con el oscuro aceite de la tierra, y el día del aniversario de la Gloriosa Toma del Poder cortaron la cinta que inauguraba el Palacio de Verano
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Su figura maciza se recortaba a contraluz entre la flora exótica del Nuevo Mundo y la bota del conquistador
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Me parecía que yo era sólo una extensión de mi vientre, esa caverna que imaginaba como un hueco en-sangrentado donde fermentaban humores y se desarrollaba una flora ajena y terrible
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Flora miró a su tía con una expresión en la que se mezclaban la culpabilidad, la contrición, el desafío y varias emociones más, difíciles de interpretar
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Flora estaba en la sala, esperando a su padre
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Había en la actitud de Flora algo que la inquietaba—
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Así pues, él fumaba su pipa y la tía Greysteel tosía; y Flora, que se sentía culpable por retenerlos en casa, los miraba de vez en cuando con aire contrito
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Percibía vagamente figuras y formas de esas que no pertenecen al mundo visible, ni a la humanidad, ni a la fauna ni a la flora, ni al cielo ni a la tierra, sino a cierta misteriosa geología, a yacimientos que contradicen todas las leyes de la estática y la dinámica; percibía una fantástica y continuada concatenación de colores geométricos que se enredaban en mi cuerpo como culebras, y en aquella transmutación de lo físico y lo moral, se verificaba el fenómeno de que un color me dolía, y un objeto semejante a una espada, a un cangrejo o a un arpa pronunciaba palabras incomprensibles
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En aquella crisis del egoísmo, yo no comprendía que el Universo con sus mil mundos, su fauna y su flora, sus inagotables recursos y prodigios existiese para nadie más que para Josefina y para mí
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Cuando esto decía, sentí la voz de doña Flora y los pasos de un hombre
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Doña Flora dijo:
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-El pueblo quiere que juren -dijo Flora
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[169] nublado de sus adulaciones y cortesías, doña Flora, aprovechando un claro de la conversación, me dijo:
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Aconteció, pues, que cerca ya del oscurecer en el siguiente día entraba yo con toda tranquilidad en casa de doña Flora, cuando esta, Amaranta y su hija saliéronme al encuentro con gran sobresalto y alarma
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Y más tarde la vieron entrando en Hyde Park en compañía de Flora Millar, una mujer que ahora está detenida y que ya había provocado un incidente en casa del señor Doran aquella misma mañana
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Alguna prueba que complicara a Flora Millar en la desaparición
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¡Quién nos había de decir que aquella simpática jamona, todavía fresca, más graciosa de palabra que de hocico, divierte sus ocios de exclaustrada en cacerías y robos de [149] hombres guapos! ¡Qué cosas se ven, y cuán caprichosas, en su inmenso reino, son la flora y la fauna del vivir humano! ¡Qué infinita variedad de formas, qué extravagancia en algunas, qué sencillez elemental en otras!
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Para Suzanne aquel mundo estaba lleno de extrañas contradicciones, la ciudad, con su avanzada tecnología, parecía muy futurista, pero la vegetación tenía un aspecto primitivo, la flora le recordaba la existente durante el período carbonífero, trescientos millones de años atrás
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Para colmo, en la numerosa comunidad cristiana de Córdoba florecieron dos fundamentalistas, Eulogio y Álvaro, que, consternados por la creciente islamización de sus feligreses (muchos de los cuales vestían chilaba, parlaban algarabía, se aficionaban a los baños e imitaban otras costumbres no menos perniciosas de la secta de Mahoma), convocaron a sus ovejas a una tanda urgente de ejercicios espirituales y consiguieron que trece aspirantes al martirio, entre ellos dos mujeres, las vírgenes Flora y María, se presentaran ante la autoridad islámica para insultar a Mahoma
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Sin embargo, Flora y Sabina, las tías de mi madre, se quedaron en Elche a cargo de la turronería de la primera
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Ya te he contado que se llamaban Flora, Sabina y Palmira por convicción anticlerical del padre, don Trino Lloret, mi bisabuelo, que no quiso cristianarlas y por eso escogió para ellas tres nombres romanos
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En cuanto a Flora, se había casado a los dieciocho con un marino mercante oriundo de Benidorm, pero enviudó a los veinte y tampoco quiso volver a saber nada de hombres desde entonces
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No era raro que Flora, tan avanzada y culta como era, se sintiera atraída por un marino, porque de siempre en Alicante los pueblos del interior han sido más tradicionales y los pueblos marineros y las partidas municipales más liberales y matriarcales, aunque sólo fuera por necesidad, debido a que los hombres no estaban mucho en tierra
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Después de aquello Sabina y Flora se fueron a vivir juntas y, con el poco dinero que a Flora le había dejado su marido, abrieron un negocio que era heladería en verano y turronería en invierno
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También es de su mano el foso de Persse Castle, que está formado por un canal de agua en el que flota una capa de tierra de un dedo de gorda, que basta para alimentar copia de varia flora, y nadie sospecha que esté debajo el agua, y vienen los caballeros enemigos osados cabalgando, y se hunden en lo que creyeron césped y jardín del perpetuo verano
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Eran demasiado húmedos para permitir el crecimiento de grandes masas de pasto, y sus reducidos y ácidos suelos producían plantas cuyas toxinas evitaban fueran consumidas por grandes multitudes, las cuales habrían destruido la flora de crecimiento lento y delicado
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La gran diversidad de la flora en toda la región creaba una sensación de abundancia y fertilidad, y propiciaba la existencia de una fauna igual de variada
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A medida que se fueron adentrando en el bosque, la flora se volvió más densa e impracticable y al cabo de un rato Thurbrand indicó que todos debían detenerse y desmontar
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Hoy está a punto de transigir, mañana querría entrar a sangre y fuego; más tarde se hace de pasta flora
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Es decir, toda una representación de la flora de los países por los que había “peregrinado” la Síndone durante los primeros siglos, tal y como refieren infinidad de testimonios y documentos históricos
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Tiene que ser bastante difícil caminar por las montañas y las junglas de los hombres, luchando contra las sombras mutadas de la fauna y de la flora, entre inmemoriales fantasías humanas
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Pese a todas las cualidades del elegido, el emperador declaró que lo había designado porque, en la época en que aún no era más que pretor, había celebrado los juegos de Flora exhibiendo unos elefantes que bailaban sobre la cuerda floja
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Ser liberal hoy sólo significa estar contra la oligarquía y el clero, ¿lo puedes creer? Así es la cultura de este valle: un aguacero puede alterar su topografía, pero no su flora y su fauna
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–Qué gracia -dijo Flora