1.
Mientras el feliz mortal, mirándoles sin comprender su indignación,respondía con la mayor frescura:
2.
Comenzó a sentir grandes angustias y fatigas en elestómago y en el corazón; visitole el Doctor Vicencio Moles, Médico dela Familia, y su Magestad cuidadoso de su salud, mandó al Doctor Miguelde Alva, y al Doctor Pedro de Chavarri, Médicos de Cámara de suMagestad, que le viesen, y conociendo el peligro dixeron era principiode terciana sincopal minuta sutil, afecto peligrosísimo por la granresolución de espíritus, y la sed que continuamente tenía, indiciogrande del manifiesto peligro de esta enfermedad mortal
3.
Al amanecer, las gentes madrugadoras del sector hallaron bajo el arco de piedra el cuerpo de Perdomo, con un lanzazo mortal en el pecho
4.
t En medio de las enlutadas y llorosas mujeres que por aquel camino sombreado acompañaban el féretro, murmurando oraciones, iba una extranjera, adulta, hermosa todavía a pesar de la mortal palidez de su semblante
5.
Y sé también en la ignominiosa y mortal asonancia,
6.
sacude el mortal plazo distante,
7.
Cuando sostienes la enfermedad mortal,
8.
Notaban en Moreno palidez mortal, granabatimiento, y un cierto olvido, extraño en él, de la atención constanteque se debe prestar a las señoras cuando se platica con ellas
9.
Custodio que estaba algoresentido por no recordamos qué desaires, supo insinuar laespecie de si el astro veniente era [150]enemigo mortal delsaliente, con lo que atemorizados los de la serenata, desistieron
10.
Matangláwin se burlaba de todas lasmedidas severas que se dictaban contra los tulisanes: de ellas solosufrían los habitantes de los barrios, que cautivaba ómaltrataba si se le resistían,ó si pactaban con él eran azotados ó desterradospor el gobierno, si es que al destierro llegaban y no sufrían enel camino un mortal accidente
11.
“Reproduzco las frases con las cuales Homero en el V canto insiste más de una vez en describir la angustia mortal que se apodera de Ulises: Temo que salgan verídicas las predicciones de la diosa, la cual me aseguraba que había de pasar grandes trabajos en el ponto antes de volver a la patria tierra
12.
Cito una vez más los versos con los cuales Homero en el Canto V insiste más de una vez para describir el dolor y la angustia mortal que se apodera de Ulises porque quisiera que el lector no se olvide de ello como se han olvidado muchos de los escritores que hablan de Ulises recordando solamente sus fraudes y sus engaños
13.
mortal, el enfermo habría curado, gracias alos medios usados
14.
andrajos, con laindignación de una ofensa irreparable y mortal
15.
¡Afortunado mortal! Desde entonces, su nombre pareció llenar lahabitación, y las dos mujeres
16.
hayanexistido en carne mortal sobre el haz de la tierra; han existido por míy para mí
17.
— ¡Para hacer bien y decir misas por los que están en pecado mortal!
18.
La tal congregación del Pecado mortal, fué creada en Sevilla hacia1723, siendo su
19.
La congregación del Pecado Mortal, salía anualmente de misiones porlas
20.
y plazas, tenían en el pregón del Pecado Mortal un avisoque le daba el alto en sus
21.
que están en pecado mortal, fué de aquellasinstituciones religiosas que dieron una
22.
nuestro aliento mortal, yallá, en el cielo, cuando nuestras almas se desprendan de la
23.
Pero doña Juana quedo en una ansiedad mortal
24.
habituados á la lucha mortal con el mar cántabro, lehacían
25.
dedicados ámeditar sobre el pecado mortal, la muerte y el
26.
han llegado apasión mortal estos amores malhadados, tales son
27.
A los médicos no les pareció mortal el accidente, pero cuando
28.
puedeencontrarse uno con su mortal enemigo, el terror de los
29.
pequeñostratados sobre el pecado mortal y su perdón
30.
mortal palidez; los dientes, blancos y fuertes,clavábanse en los
31.
La cuchillada mortal había sido por cuestiones de juego
32.
la blancura del polvo de los caminos, cual síacabase de sufrir una emoción mortal; otras veces
33.
Presa de mortal angustia, permanecía yo en el más alto
34.
mortal a su señor y al precipitarse los criados en lahabitación,
35.
quisounirse con ella y hasta con el cuerpo mortal donde ella se encierra
36.
El presidiario se torció las manos, angustiado por su ignorancia, que élcreía mortal
37.
sangre en la pálidasien, y una ansia mortal lo sofocaba, porque
38.
¿Tiene una antipatía mortal a los poderes europeos?Pues bien: los
39.
que hay profundos secretos que descubrir en lacorrespondencia de las organizaciones, y en el modo con que influyenunas sobre otras; pero secretos que quizás estén velados para siempre álos ojos del débil mortal
40.
probable que el encontrarlos no es permitido aldébil mortal, mientras habita sobre la tierra
41.
él, mientras vivimos esta vida mortal ytenemos el alma en el cuerpo, y cuando son los que se
42.
fría, comprendió laseñora, considerada la palidez mortal que
43.
Una palidez mortal se extendió por el rostro de Juan, y todo su
44.
blanca, con unapalidez mortal; los ojos agrandados por el
45.
al trabajo y que lainacción es mortal; pero se callan lo que la ciencia añade, o sea que eltrabajo
46.
unapoesía patibularia y mortal, que encoge el corazón y roba la alegría
47.
hermano del Pecado Mortal interrumpiendo elsueño para recordar la cercanía de la muerte; y
48.
Y como el joven, cubierto de una palidez mortal e inundada en
49.
el mortal que tal posee»
50.
Unacontracción, producida, al parecer, por el hábito de la sonrisa; unatensión violenta de los párpados, como quien expresa el último grado delasombro; palidez mortal, interrumpida por súbitas
51.
que pululan en lasociedad, sería una mortal ponzoña
52.
abolición mortal solíabajarle de la garganta a los pies, suprimiendo todas las
53.
furiosamente ambos enemigos, y rodandopor el suelo en mortal abrazo, llegaron al
54.
hiciera caso, porque la menorcongestión sería para ellos mortal
55.
puñalada mortal al entraren su cuarto y gritar: «¡Muera la esposa infiel!» para que ellaconteste:
56.
laenfermedad mortal del hambre y únicamente pueden seguir viviendo si securan de ella dos veces al día
57.
existencia mortal a arriesgar la salvación eterna
58.
mortal logra penetrar en la isla de San Borombón
59.
negruzca y mortal tumefacción
60.
¡Las horas deaburrimiento mortal ante
61.
el golpe mortal y por qué lugares invadiríaná Alemania las
62.
mortal, conservaban susarmas y sus equipos, pensando en el
63.
Nuncael pie de un mortal vulgar ha manchadolas
64.
mortal para loshombres sólo contraía la epidermis marina,
65.
letargo mortal, conlos pies hundidos en el agua que llenaba el
66.
Lalucha era breve y mortal entre los dos
67.
queuna de ellas era la del gran dramaturgo y su enemigo mortal
68.
¿Por qué era su enemigo mortal Estévanez? Tristán lo
69.
mortal delos páramos, la inclemencia de la soledad; allí, el
70.
vomitarinjurias contra su mortal enemigo
71.
mortal, y rodaba por laarena el picador como un monigote de piernas amarillas,
72.
silencio precursor de la estocada mortal: un silencio másgrande que el de la soledad
73.
olvidado deLita y de la injuria mortal que recibiera
74.
menos imitados, mientras anduvo en carne mortal por la tierra
75.
Se ha dado el golpe mortal
76.
No me extraña que algunos lo hayan acusado de ser el consorte mortal de la Reina, su retorcida imaginación es digna de ella
77.
Sólo una pincelada apenas visible fluctuó en el enrarecido aire como recordatorio de que la encarnación del Mal había visitado a un mortal
78.
Entretanto, los acontecimientos se precipitaban: girondinos y jacobinos, tras diez meses de enfrentamiento en los que se habian dirigido pequenos ataques, se aprestaban a una lucha que se anunciaba mortal para uno de los dos
79.
Si nadie más, alienígena o humano, puede librarnos de este abrazo mortal, sólo nos resta una alternativa: por doloroso que resulte, tendremos que lograrlo nosotros mismos
80.
Premia la cooperación y castiga la deserción muy pronto (en el juego inmediato) y posee la gran virtud de ser una estrategia completamente clara para el oponente (la ambigüedad estratégica puede ser mortal)
81.
Su padre, continuó diciéndole, tenía un miedo mortal a los ladrones, y, en su opinión, más que precaución se había convertido en obsesión
82.
Pero, de repente, durante el transcurso del mortal duelo, el rostro del sari quedó vuelto hacia ella
83.
El último mensaje de los delfines se interpretó como un intento sorprendente y complicado de realizar un doble salto mortal hacia atrás pasando a través de un aro mientras silbaban el «Star Spangled Banner», pero en realidad el mensaje era el siguiente:
84.
Por desgracia, no todas mis cavilaciones son tan útiles: hay —solamente en la imaginación, para inquietarme— la esperanza de que toda mi enfermedad sea una vigorosa autosugestión; que las máquinas no hagan daño; que Faustine viva, y dentro de poco yo salga a buscarla; que nos riamos juntos de estas falsas vísperas de la muerte; que lleguemos a Venezuela; a otra Venezuela, porque para mí tú eres, Patria, los señores del gobierno, las milicias con uniforme de alquiler y mortal puntería, la persecución unánime en la autopista a La Guayra, en los túneles, en la fábrica de papel de Maracay; sin embargo, te quiero, y desde mi disolución muchas veces te saludo: eres también los tiempos de El Cojo Ilustrado: un grupo de hombres (y yo, un chico, atónito, respetuoso) gritados por Orduño, de ocho a nueve de la mañana, mejorados por los versos de Orduño, desde el Panteón hasta el café de la Roca Tarpeya, en el 10, abierto y deshecho tranvía, fervorosa escuela literaria
85.
Julián Santiso va un par de veces al mes, quizá cinco cada dos meses, al piso que tiene en Santiago, en la calle de Romero Donallo, y que huele a humedad y a marijuana, los dos olores están ya pegados a la paredes y dibujando muy extrañas figuraciones, una nariz, una mujer, una puesta de sol, un ahorcado, allí se reúne con sus compañeros/as de salvación y hablan palabras y palabras, Julián Santiso traza en un papel los mensajes y las órdenes que le dicta el Sumo Arquitecto, su mano es llevada por el mismo Sumo Hacedor y no por ningún siervo mortal, y va dejando su huella sobre el papel, Julián Santiso escribe con los ojos cerrados porque el Altísimo le guía con su sabia y serena benevolencia, Dios dispone de las vidas y las muertes y no titubea jamás, las benditas ánimas del purgatorio ofician de despertador al durmiente que tiene que ir a la oficina, pero no ayudan a ahuyentar los sueños pecaminosos, para ello debe pedírsele ayuda a san Cipriano poniéndose de rodillas entre una vela blanca y un ramo de olivo, después se tomará un baño con veintiún claveles también blancos, agua de colonia, azúcar y amoniaco, todos los aliados son buenos para luchar contra el comunismo y las ideas disolventes, amén, a fines del mes de julio de 1969, mientras don Juan Carlos presta juramento ante las Cortes y los astronautas del Apolo regresan a la Tierra, a los rusos se los llama cosmonautas, Julián Santiso reúne una noche en Santiago a sus más leales seguidores, Salustiano Balado Abeijón, también maestro ínfimo de la Escuela de Albores, caminemos hacia la paz blanca y espiritual, Ana María Monelos, la viuda del joyero que se tiró por la ventana, en una bolsa de seda verde mete un trozo de pergamino con tu nombre escrito en letra redondilla, tres clavos de carpintero de ribera usados, una siempreviva, trece cabellos de tu propia cabeza y una estampa de santa Elena, pídele que aleje de ti la histeria, la neurastenia y el mal de amores, el favor debes pagárselo regalando una cruz de Caravaca a una doncella noble, también Fran o sea Simón Pedro,
86.
Los olmos tienen una enfermedad punto menos que mortal, la grafiosis; el viajero no había oído ese nombre aunque sí otro muy parecido, grafioles, puede que no tenga singular, que son como unos melindres de mantequilla
87.
Aguardó sin que se alterase la calma mortal
88.
Tendida en el suelo, crispando aún los dedos en la pistola, con una mueca de mortal perversidad, estaba
89.
El portero corre a salvarla y recibe la segunda bala que es mortal
90.
Todo esto acabaría de quedar claro para el Rey cuando a principios del mes de abril Suárez dio el golpe más audaz de su carrera, otro salto mortal político, pero esta vez sin red: la legalización del partido comunista
91.
Puede que, católico hasta el fin, debilitado por la edad y la desdicha, lo que acabase de derrotarlo no fuese esa doble afección mortal, sino la culpa
92.
¡Oh memoria, enemiga mortal de mi descanso! ¿De qué sirve representarme ahora la incomparable belleza de aquella adorada enemiga mía? ¿No será mejor, cruel memoria, que me acuerdes y representes lo que entonces hizo, para que, movido de tan manifiesto agravio, procure, ya que no la venganza, a lo menos perder la vida?» No os canséis, señores, de oír estas digresiones que hago; que no es mi pena de aquellas que puedan ni deban contarse sucintamente y de paso, pues cada circunstancia suya me parece a mí que es digna de un largo discurso
93.
Un aburrimiento mortal
94.
{60} La cuestión no era saber si la pareja saldría del paso, no estaba permitido dudar de eso, sino tan sólo descubrir cómo lo haría, lo que explicaba que tantos espectadores, árabes y franceses, volvieran la semana siguiente para ver a los enamorados detenidos en su caída mortal por un árbol providencial
95.
Llegaba a un restaurante y veía a todos aquellos tipos tan serios e importantes, con mujeres espléndidas, vestidas de superlujo, pero al cabo de un rato les miraba las caras, comprobaba su mortal aburrimiento y comprendía que tenían la oreja puesta a cualquier chorrada que soltara mi Luna y dispuestos a cambiármela al instante
96.
Pero aquellas solemnes lecciones que siguieron las recuerdo como un golpe mortal dado a m¡ tranquilidad, como una tarea diaria, penosa y miserable
97.
Razas nuevas y poderosas, con superioridad de armamento, le desafiaron con éxito en el terreno de la supremacía militar; las luchas dinásticas, deficientes crecidas del Nilo y una progresiva pobreza asestaron a la idea un golpe mortal
98.
Casi inmediatamente Defarge saltó la barrera que lo separaba del viejo y lo estrechó en mortal abrazo, en tanto que su mujer, que lo había seguido, agarró una de las cuerdas que sujetaban al preso
99.
De sus bocas numerosas proviene un hedor, cuya percepción es mortal para los hombres y para las bestias
100.
Aquel cataclismo modificó la estructura del cosmos y la condición humana: la comunicación entre la tierra y el cielo se cortó y el hombre se hizo mortal