1.
pecado manifestar cualquier expresión de alegría, de afecto, un abrazo, un beso
2.
Dejo todas las respuestas a los hechos y que se acerca a la mujer, abrazo y suavemente, cerrando los ojos, mis labios en su colina, mover la lengua para palpar los dientes y para fusionarla con su propia; envolver mis brazos alrededor de ese cuerpo con curvas y una emoción de placer a través de mi espalda
3.
Abrazo y beso entonces la mujer con el placer, como mi mano se desliza sobre su pecho
4.
Sólo creo en el abrazo de la tierra
5.
seguimos solos en el abrazo y en el recuerdo,
6.
El abrazo de sus compañeros
7.
Como en un abrazo
8.
grito desde el centro del abrazo
9.
Tampoco en el abrazo” – El
10.
Todo concluyó con un abrazo cordial y un espléndido regalo al sublevado, consistente en dos hermosos caballos que le trajo del Perú, una espada y una lanza con incrustaciones de oro, así como un equipo de campaña
11.
el cerco del abrazo con las piernas
12.
“¿No soy digno de un abrazo?” me preguntó mientras me abría los brazos
13.
Con la muerte de por medio,la una en la vida visible y la otra en la invisible, bien podría ser quelas dos mujeres se miraran de orilla a orilla, con intención y deseos dedarse un abrazo
14.
Lo recibió alegremente con un abrazo y un trago de ron pa’ el calor
15.
la abrazo a Carmen para hacérselosoltar, pero con la agitación y
16.
no te metas en lavaduras de suelo, y mientras nos vemos yte doy un abrazo recibe la bendición
17.
apretado abrazo y sonorosbesos
18.
Y ambos amigos confundiéronse en un cariñoso abrazo, mientras el pueblorepetía,
19.
el beso o el abrazo de reconciliación, forma protocolar de losarmisticios conygales?
20.
Con estas maldiciones hípicas y un abrazo se despide mi amiga Luisita,que tiene
21.
El abrazo que se dieron fue largo y apretado, sincero tal vez,
22.
—Ahora un abrazo por el rey legítimo de lasEspañas
23.
Las dos mujeres se estrechaban en un abrazo mudo, como si
24.
el bajo parapeto del puente, que durante un momentoestuvieron unidos en un abrazo
25.
despido de los compañeros, un abrazo al amigoque espera en la
26.
queriendounir en un abrazo de conciliación el pasado y el
27.
fuertes besos, un largo abrazo, un saludo para mí, yel padre
28.
Siglinda, estrechándose eneterno abrazo, formando un solo cuerpo como cuando los
29.
entre las bocas juntas y los pechos oprimidospor el abrazo, fue cuando Leonora
30.
se debatecontra un abrazo desesperado
31.
dos cabezasinclinadas hacia él, y los aproximó en un abrazo
32.
esto no bastaba, un abrazo
33.
uniéndolos en carnal abrazo
34.
furiosamente ambos enemigos, y rodandopor el suelo en mortal abrazo, llegaron al
35.
—¿Yo? Un abrazo muy apretado y un millón de besos
36.
confundieron en un estrecho abrazo, con unsentimiento de bienestar indefinible
37.
Dejó partir a Fernando solo, porque trataba de ocultarle su repentinoregreso, y en el muelle se despidieron con un abrazo cordial
38.
ocasión del abrazo de aquellossacrílegos amantes
39.
del abrazo en el Acuariohabría ocurrido en sueños
40.
apretando a la hija de sus entrañas conun abrazo y estrechando con la otra mano la del
41.
elcuerpo en estrecho abrazo y cubierto el rostro de besos
42.
El padre y el hijo se dieron un abrazo muy apretado y muy prolongado
43.
sellada conun abrazo fraternal; allí estaban las dos, hablando de
44.
sentado en el féretro, medio un abrazo y me besó paternalmente,
45.
que para tener el gusto de darte un abrazo
46.
—El padre y el hijo se estrecharon en un tierno abrazo con una efusión extraordinaria
47.
En este momento despertó el príncipe, le dió un abrazo y
48.
Un abrazo de la mujer con quien se ha criado en la casa paterna, un soloabrazo de su hermana, ha curado
49.
Sturm dio un abrazo a Tajanubes algo estirado, pero dictado por el corazón
50.
Los premios son tan sustanciosos, y los grupos de presión militares de países hostiles mantienen un abrazo mutuo tan siniestro, que al final el mundo descubre que se está deslizando hacia la destrucción definitiva de la empresa humana
51.
Y doña Celia y don Gerardo se sumarán en breve al abrazo
52.
Si nadie más, alienígena o humano, puede librarnos de este abrazo mortal, sólo nos resta una alternativa: por doloroso que resulte, tendremos que lograrlo nosotros mismos
53.
Los tres amigos permanecieron unidos por un momento en un abrazo mudo, ardiente y casi alegre
54.
Poco después, contemplaron en silencio el abrazo de Ben a su hermana, bajo la nieve
55.
Me despedí de Germán con un abrazo en el andén de la estación
56.
Cuando terminó, no faltaron quienes se levantaron para darles un abrazo a ambos, mientras la sala se llenaba del rumor de los susurros
57.
Por una puerta abierta veía su cama demasiado bien arreglada, con las sábanas mejores, las flores en el velador, mis pantuflas colocadas al lado de las suyas, como anticipación de un abrazo previsto, al que no faltaría la reconfortante conclusión de una cena delicada que debía estar dispuesta en alguna parte del departamento, con sus vinos blancos puestos a enfriar
58.
Un fuerte abrazo
59.
Desde luego no era un baño aromático en una suite de lujo de un hotel de Coruscant, pensó distraída mientras algo pequeño, azul e inofensivo le pasaba por los pies, pero después de haberse pasado días encima de un suubatar al sol, el abrazo cálido de la corriente era algo parecido al paraíso
60.
también en el último abrazo con el que se había despedido de su padre, orgulloso y conmovido de ver cómo su hijo dejaba a su espalda las fáciles y costosas distracciones de la juventud patricia para convertirse en un hombre
61.
Su abrazo azoró en cierto modo al centinela que avanzaba en su dirección a lo largo del camino de ronda
62.
-No desperdicies la luz que has recibido -concluyó el pescador y antes de que pudiera darme cuenta me dio un fuerte abrazo
63.
–Escribirás en cuanto llegues -fue la súplica de tía Gloria, acompañada de un beso y un abrazo
64.
Tenía la sensación de que necesitaba un abrazo después de la aparición de Niall
65.
Le devolví el abrazo a Sam
66.
Pero al año siguiente entró en la vida de Morrie un abrazo salvador: su nueva madrastra, Eva
67.
Mientras me separaba del abrazo con unas palmadas en la espalda de Tara, me di cuenta de que encontrármela allí era lo peor que podría haber pasado
68.
Esto era la libertad, el abrazo de la gravedad
69.
El abrazo de Vergara
70.
Casi inmediatamente Defarge saltó la barrera que lo separaba del viejo y lo estrechó en mortal abrazo, en tanto que su mujer, que lo había seguido, agarró una de las cuerdas que sujetaban al preso
71.
Me dio un abrazo
72.
Rhothomir le devolvió el abrazo mientras por encima de su cabeza buscaba con la mirada a Arilyn
73.
Yo permanecía rígido, en ese abrazo
74.
—Pero —dice, y antes de que siga lo abrazo con fuerza, riendo sobre sus labios
75.
Un abrazo emotivo, un abrazo extraño, de persona a persona, sin dinero de por medio, sin segundas intenciones, extraño
76.
Se arrancó bruscamente de su abrazo y sacando las pistolas del cinto se lanzó entre el humo de la pólvora
77.
Viéndose en brazos de Sun-Pao se ruborizó, después palideció y haciendo un esfuerzo para librarse de aquel abrazo, dijo:
78.
fundiéndose en un abrazo cariñoso
79.
Había historia, familiaridad e incluso, por sorprendente que resultara, compasión en aquel abrazo
80.
Se quedaron perdidos en el abrazo durante un largo rato
81.
Eragon cogió a Roran del antebrazo y lo atrajo para darle un fuerte abrazo
82.
-¡Dame un abrazo, hijo mío! Eres el más honrado de todos los monos y de todos los orangutanes de la Tierra
83.
después del primer abrazo los amantes pueden
84.
A pesar de la conmoción, Roran sólo pensaba en la mujer que tenía entre sus brazos y que le devolvía el abrazo
85.
Había perdido el miedo al abrazo de la muerte,
86.
Con lentitud y cierta torpeza, porque le temblaban las manos, abrió uno por uno los botones de su blusa y descubrió el hueco tibio de sus axilas, la curva de sus hombros, los senos pequeños y la nuez de sus pezones, tal como los había intuido al sentir su roce en la espalda cuando viajaban en la moto, al verla inclinada sobre la mesa de diagramación, al estrecharla en el abrazo de un beso inolvidable
87.
Los hombres asesinados yacían sobre las mujeres a las que habían tratado de proteger, las madres aún llevaban a sus hijos en brazos, y los amantes que habían intentado escudarse mutuamente descansaban en el frío abrazo de la muerte
88.
Jena, la esposa de Beyé-Dokou, se acercó a su marido, le dio un breve abrazo y le dijo unas palabras al oído
89.
Encontrar al compañero adecuado había sido una callada obsesión de Carmen en el pasado, cuando le faltaba hombre se le poblaban los sueños de fantasmas lujuriosos, necesitaba un abrazo firme
90.
Tensing estrechó a su discípulo en un fuerte abrazo
91.
Eragon sintió un miedo creciente y buscó a tientas la empuñadura de Brisingr en el momento en que Saphira se liberaba del abrazo del agua y empezaba a ascender
92.
Ambos se agarraron por los brazos y se estrecharon en un abrazo
93.
Catalina dejó la alforja en el suelo y ambas mujeres se dieron un abrazo violento y desesperado
94.
Catalina, que hubiera deseado que aquel momento se eternizara, sintió que Diego la tomaba por los hombros y la apartaba lentamente aflojando su abrazo y mirándola al rostro con atención
95.
Las caras compungidas de los hombres agrupados ante su puerta y el abrazo colectivo de las mujeres se lo confirmaron
96.
El pueblo de Lindos cerró filas en torno a la joven viuda y sus hijos, pero ese abrazo no podía sostenerlos por tiempo indefinido
97.
Después dormitaron en ca-liente abrazo cubiertos con las mantas y el abrigo de Susana, como un par de niños inocentes
98.
Tras estas palabras, como un solo hombre, los invitados se pusieron en pie alzando sus copas mirando a la presidencia en tanto el anfitrión y el coronel Kappel se daban un afectuoso y cómplice abrazo
99.
Los dos se abrazaron sin decir nada más, y el que sobrevivió recordó para siempre aquel abrazo, lo atesoró entre los instantes más preciosos de su vida, lo evocó con la codicia del avaro que recuenta sus monedas sin cansarse y volvió a vivirlo muchas veces, en los días más duros y en los mejores, entre el deslumbramiento del amor y el acecho de la muerte, entre la velocidad del infortunio y la lentitud de la prosperidad, entre el olor a miedo de los vagones de los trenes, el olor a miedo de las noches al raso y el inconsciente olvido del olor a miedo, y después, con las emociones y los deseos, con los domingos y los días laborables, con el calor del cuerpo de su mujer en noches de invierno muy arropadas y las risas de sus hijos que crecían sin el fardo agotador de su memoria, Ignacio Fernández Muñoz guardó siempre el recuerdo de aquel abrazo como un tesoro sin precio, el salvoconducto que le permitió seguir estando vivo, llegar a ser feliz en un mundo donde ya no existía su hermano Mateo
100.
En aquel instante estaba tan emocionado, tan enamorado de la mujer que las había dicho, que sólo pude besarla, abrazarla con fuerza y mantenerla pegada a mí, y eso era lo único que importaba, un todo que excluía el antes, el después, y cualquier otro concepto que sucumbiera a la vana ilusión de existir fuera de aquel abrazo