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enano frases de exemplo
enano
1. Tiene allí el Príncipe dosaños y esta representado en pie sobre un peldaño en segundo término:ante él se ve un paje enano
2. El enano, situado un peldaño más abajo que su amo,vuelve hacia éste la enorme cabeza: lleva amplia valona lisa y cadena alcuello; un delantal le cubre la parte inferior del cuerpo
3. cepilló el enano barrigón, que tuvieron que ponerle un escabel para llegar a la altura
4. Dentro hay un enano, un monstruo, vestido con balandrán rojo y turbante,alimaña de transición que se ha quedado a la mitad del camino darwinistapor donde los orangutanes vinieron a ser hombres
5. Adivino,pintada de colores diferentes, y la Casa del Enano, tan
6. atardecer siendo niño, en compañía del enano, apoyó su espaldacontra las almenas y
7. —Ya se ve bien por el resultado de tal unión—dijo el enano con malhumor
8. El cíclope enano no hizo alto en esta equivocación, y pude salir a lacalle satisfecho
9. incurrir en el desagrado de aquel enano autoritario, que loexpresaba en frases
10. La voz cavernosa del enano, poblando de sones ásperos y profundos laestancia,
11. No me descompuse en manera alguna por los insultos del enano
12. que lo mejor fueraconsultar a Bob el enano, puesto que tanto
13. sibilinarespuesta del enano, y no la comprendía
14. »Desde aquel momento la tripulación se achicó: de gigante se convirtióen enano; desapareció
15. eran tan desacordes, que la bayoneta del enano tocaba losdoblados hombros del gigante
16. Diógenes Pendergast vio desaparecer por el pasillo a aquella especie de enano
17. –El capataz tenía una cuenta kilométrica sin pagar, en la que estaban incluidas sus consumiciones y las de sus ocho primos -los puso al corriente el enano, sin dejar de restregar platos-
18. El enano llevaba puesto un mono de trabajo lleno de manchas que absorbía las salpicaduras del agua jabonosa
19. Aunque de modales ásperos y arrogantes, era bastante atractivo para ser enano
20. – Los ojos del enano se prendieron en los de Kit
21. La fama actual de la posada El Ultimo Hogar resultaba más extraordinaria si se tenía en cuenta su reputación bajo el gobierno de los anteriores propietarios, un matrimonio de Enanos de las Colinas cuyo carácter agrio parecía transmitirse a todo, desde la cerveza hasta la atmósfera, por lo general inhospitalaria, que los viajeros percibían al momento de entrar en el establecimiento; por no hablar de los olores que salían de la cocina, que habrían molestado a un enano gully… Bueno, no tanto, pero casi
22. Por fin al enano le pareció escuchar un golpe apagado en las rocas de abajo
23. – ¡Chist! – dijo Tanis al enano, que, con las prisas, entró trastabillando y chocando con los demás
24. En medio de las continuas quejas del enano, Tanis se lo echó sobre los hombros y lo transportó por la orilla hasta donde aguardaba Raistlin
25. El enano, fruncido el entrecejo, no parecía muy convencido
26. Por primera vez, el joven examinó a los asistentes del forjador: un elfo, un humano y el enano que debía de llamarse Khildith, pues fue él quien dio un paso al frente
27. tan sedientos como un enano lo es del oro,
28. Había cinco, pero ¿a quién le interesaba por ejemplo aquel enano jorobado de nombre La Révelliére-Lépeaux?, ¿o el simiesco y gordo Reubell? ¿Y qué decir de Carnot, tan vulgar y avaro que cuando quería presumir de rumboso como gran cosa invitaba a sus amigos a tomar sopa?, ¿o del insignificante Letourneur? En medio de este cuarteto decadente y muy poco atractivo, Barras destacaba más que nunca
29. No por casualidad se comentaba que era el inventor de los chistes de "El enano maldito", que todos los días lanzaba sus pullas desde la portada de Puro Chile, en el período de la Unidad Popular, justo antes del golpe de 1975
30. Me alegraba saber que no era un enano, pues eso ya era algo
31. Diez días más tarde avisaron que un fulano que respondía a la descripción del enano sonriente solía desayunar en un bar de «La Candelaria»
32. Conseguí una caja de «bolear» y los muchachos se preocuparon de que el viejo que solía limpiarle los zapatos al enano decidiera quedarse en su casa esa semana
33. La metí en la bodega debajo de un montón de bocetos a tinta china que hizo Jimmy el Enano antes de morir
34. Aun así, no creía que el enano dijese del todo la verdad, porque Las Arenas Espumosas era un establecimiento fuera de las posibilidades de los trabajadores del muelle y los camareros
35. El enano se encogió de hombros y alzó ambas manos en un gesto despreocupado de aceptación; luego bajó de un salto del tonel y desapareció
36. Mientras, el elfo se apresuró a contrarrestar un golpe del primer hombre, un barrido bajo que habría tumbado a todas luces al enano
37. El enano increpó al mercenario y lo empujó con la punta de la daga
38. Pero para su sorpresa, un profundo rumor de risotada se agitó en el vientre del enano y fue subiendo hasta su garganta en oleadas
39. , el rostro de un joven enano con una barba castaña y corta y un inusual entusiasmo a la vez por el alboroto y el romanticismo
40. ¿Cómo podía ser cierto? La última vez que lo había visto, el enano estaba descubriendo los lujos de Las Arenas Espumosas mientras intentaba borrar los recuerdos de diez años de servidumbre con cuanta agua cálida y burbujeante y mujeres medio desnudas pudiese comprar con las monedas de que disponía
41. Le sorprendió que un elfo como él fuese compañero de un enano
42. El enano frunció el entrecejo y se situó en mitad de la trayectoria del hombre que venía a la carrera
43. Nunca he querido mirar los pies de un enano
44. Un enano dio un paso hacia delante y, en el idioma de los enanos, pronunció el nombre del ganador del último torneo, así como los nombres de los siguientes contrincantes del Ghastgar
45. Cada vez que se encontraba con un enano, saludaba con un gesto de cabeza y ellos siempre le devolvían un enérgico:
46. El enano que había estado a punto de apuñalar a Eragon yacía en el suelo, revolviéndose, y tenía el cuerpo lleno de quemaduras
47. Eragon tuvo por un momento la imagen mental de la hoja de destellos de arcoíris emergiendo del cuello de Kvîstor y la expresión de agonía del enano cuando hubo caído al suelo para morir
48. Esa misma noche, más tarde, en las horas muertas de antes de la mañana, los pensamientos de Eragon vagaban mientras él permanecía en los brazos de un mullido sofá de enano y su conciencia se disolvía en la desordenada fantasía de sus sueños de vigilia
49. » Pensó que preferiría que lo mataran a sufrir un destino como ése y, por un momento, sintió un pinchazo de pena por aquel enano, aunque esa pena desapareció al cabo de un instante, en cuanto recordó la expresión de Kvîstor al morir
50. Al principio, Eragon pensó que la petición de Gannel no recibiría respuesta, porque no notó ninguna corriente de magia en el enano cuando hubo terminado de hablar