Use "ensayo" em uma frase
ensayo frases de exemplo
ensayo
1. Agradó tanto este ensayo del poeta,que se le excitó á que escribiera otro semejante para la fiesta de laNavidad
2. Escribió odas, epístolas, elegías y tragedias, y en prosa un ensayo de arte poético y un tratadode elocuencia académica, en los cuales tuvo la singular modestia deinsertar ejemplos en verso y prosa sacados de sus obras, y además otroslibros de filosofía y bellas artes
3. un arduo proceso e composición, ensayo y grabación
4. ensayo sobre la teoría de la visión, en el que ofrecía una solución
5. a) “No existe en el mundo ni un libro, ni un ensayo, ni un poema, ni un cuadro, ni una escueta escultura, ni una danza, ni una canción, ni una película que no sea entendida de diversas maneras, pues en la interpretación de los mensajes filosóficos, políticos, económicos, jurídicos, artísticos y musicales, no hay uniformidad en su captación por el impredecible y creativo ser humano”
6. ) El ensayo en
7. ensayo de organización para la felicidad
8. Así, la Iglesia de los primeros siglos fué una dulce y baldíaanarquía, un ensayo de organización para obtener la felicidad
9. En aquel ensayo de organización para la felicidad fueronmenospreciados o
10. habíamostomado por un reciente ensayo de cultivo, era sólo
11. unacosa tan curiosa y tan interesante para ciertas gentes un ensayo de laOpera! Les
12. inherente a su profesión, ycuando al concluir el ensayo general
13. Una tarde en que su amada no tenía ensayo, fue a la puerta del
14. A medio día salió al ensayo
15. Los palpos ó antenas, órganos de ensayo, de prevención, de
16. Entonces, ensayo la persuación
17. En unentreacto del ensayo, la primera
18. Una tarde, á la hora del ensayo, penetraba en el escenario
19. Con esta aleación haremos un nuevo ensayo
20. dirigía estos últimostrabajos, como también el ensayo de los metales de la provincia
21. ¡Pero qué penosos son los primeros días depráctica! ¡Como nos aturde y desespera el primer ensayo de esta
22. En la mañana del otro día hice un ensayo general de la lectura poética
23. empleados a los clientes, la cosa nunca podrá tener elvalor de un ensayo social
24. De su "Ensayo sobre educación", aparecido en momentos de
25. —Hora es ya de hacer en Francia el ensayo de la cultura
26. Del ensayo resultó que para evitar el pronombre daba la pobrecillainfinidad de
27. el ensayo dela obra?
28. Iba hacia laiglesia para ver el ensayo y hablar a don
29. Bacón, ensayo de moral y de política; un tomo4
30. Al día siguiente, a las doce de la mañana había ensayo, y allí estabaBonifacio, más muerto que
31. verdadero, el teatro pordentro, era el del ensayo; a Reyes no le gustaba la ficción en nada, nien el
32. Sin faltar a un solo ensayo, y yendo también al teatro todas las nochesde función en que podía
33. fin, un ensayo, y quedó convencido de que eran nulas las
34. Una vez todos listos empezó el ensayo
35. A todo ello se añadía la minuciosa elaboración de un espectáculo de luz y sonido oculto dentro de la presentación multimedia que había absorbido los esfuerzos de todos, y su ensayo con el técnico y el incauto de Wicherly
36. Hicieron un segundo ensayo, con el mismo resultado
37. Bastante sorprendido, Charles había reparado en la intensidad e impaciencia con las que su hermana dirigía el ensayo
38. Tres días después de la representación de Pizarro, los Ireland asistieron al ensayo de Vortigern en el auditorio vacío del Drury Lane
39. Y en medio de la expectacion general ensayo su metodo, que consistia en clavar los codos en los espectadores y deslizarse entre sus cuerpos, ya que era de pequena talla
40. autor se demora en una apología, elocuente y con argumentos poco nuevos, de Tomás Alberto Malthus y de su Ensayo sobre el Principio de lo Población
41. El resultado de este ensayo de catarsis fue lamentable: los expedientes, sanciones y purgas provocaron más purgas, más sanciones y más expedientes, y hacia el verano de 1982 el PCE era un partido en trance de desmoronarse, con menos de la mitad de los militantes con que contaba apenas cinco años atrás y con una presencia social cada vez más reducida y precaria, roto en tres pedazos -los prosoviéticos, los renovadores y los carrillistas- e irreconocible para quien hubiera pertenecido a él en la exuberancia clandestina del tardofranquismo, cuando era el primer partido de la oposición, o en el optimismo inicial de la democracia, cuando aún parecía destinado a serlo
42. Y hace un rato, después de escribir la frase de Borges que encabeza este fragmento, pensé que el gesto de Suárez es un gesto borgiano y esa escena una escena borgiana, porque me acordé de Alan Pauls, que en un ensayo sobre Borges afirma que el duelo es el ADN de los relatos de Borges, su huella digital, y me dije que, a diferencia del falso duelo que alguna vez inventaron Adolfo Suárez y Santiago Carrillo, esa escena es un duelo de verdad, es decir un duelo entre hombres armados y hombres desarmados, es decir un éxtasis, un trance vertiginoso, una alucinación, un segundo extirpado a la corriente del tiempo, «una suspensión del mundo», dice Pauls, «un bloque de vida arrancado al contexto de la vida», un agujero minúsculo y deslumbrante que repele todas las explicaciones o tal vez las contiene todas, como si efectivamente bastara saber mirar para ver en ese instante eterno la cifra exacta del 23 de febrero, o como si misteriosamente, en ese instante eterno, no sólo Suárez sino todo el país hubiera sabido para siempre quién era
43. Pero el gran aedo era Ernest, que terminaba por acaparar la palabra y mimar con una justeza de gestos —que Jacques y Daniel estaban en condiciones de juzgar— la salida de los perdigones, el conejo que se precipita dando dos rodeos y rueda sobre el lomo como un jugador de rugby que marca un ensayo detrás de la línea de gol
44. El que ese desesperado ensayo resultara triunfador constituye, de por sí, una justificación
45. Quedamos de acuerdo en que empezaría mi mes de ensayo tan pronto como quisiera, y que mi tía no necesitaba seguir en Londres ni volver cuando expirase el plazo, pues era fácil enviarle a firmar el contrato necesario
46. Le anunció que el señor y la señora Denman habían salido para un ensayo, pero que habían dejado el encargo de que el señor Satterthwaite dispusiera a su antojo de la casa hasta su vuelta
47. El populacho seguía rugiendo y las cosas se desenvolvían como si todo aquello fuera un ensayo general para la muerte
48. Las cuatro desgraciadas se dieron las manos y se dispusieron a hacer el último ensayo
49. En este experimento de sociología controlada, habíase asegurado a varias poblaciones de ensayo que el género humano había establecido contacto con los extraterrestres
50. aprendiz, hay después de El león de Comarre un ensayo proponiendo el empleo de