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contable
1. Ése fue el pacto acordado, cuando el doctor Ortega le comunicó a su mujer que le habían ofrecido un puesto de contable en la platería de Moratín y que abandonaba la medicina
2. Trabajo como contable en una empresa farmacéutica, pero por las tardes cojo el taxi para aumentar mis ingresos
3. Helga, la hija de Tomás, el contable jubilado del taller de joyería de su padre, aquella pequeñaja flaca con quien había jugado alguna que otra tarde de su niñez, pertenecía al partido, sin que jamás Manfred lo hubiera sospechado, y vivía en uno de los bloques de viviendas que el Partido Nacionalsocialista había construido para trabajadores, en Windit, uno de los barrios extremos del nuevo Berlín, y que eran verdaderos hormigueros humanos donde las personas que en ellos habitaban lo hacían en el más absoluto anonimato
4. La explicación estaba en que se trataba de alguien de dentro (el ladrón trabajaba como contable en el propio banco)
5. Después el contable la acostaba desnuda en la cama y la olfateaba largo rato
6. —Tengo una curiosidad, señor contable: ¿usted, Lapecora, Mandrino y Finocchiaro eran los compañeros habituales de juego?
7. Se presentó ante el administrador, el contable Inclima, un grueso y cordial cincuentón, quien, tras escuchar la pregunta del comisario, se sentó delante de un ordenador
8. —Será mejor que se lo diga el contable
9. —El contable ha descubierto que los ladrones le han robado una cosa
10. Pero, un momento antes de cerrar los ojos, volvió a ver las cajas cuidadosamente colocadas en las estanterías de la habitación del contable
11. —¿Y por qué no quería que el contable lo oyera?
12. ¿Dónde coño había ido a parar el traje de submarinista que se había puesto la última vez —de eso hacía por lo menos dos años—, cuando había tenido que sumergirse en busca del coche del contable Gargano? Puso la casa patas arriba, y al final lo encontró en un cajón interior del armario, debidamente envuelto en celofán
13. —Doscientos cincuenta millones de sestercios, que diría un contable —apostilló César, sonriendo y meneando la cabeza—
14. Hazlo con el Lloyd's de Londres, y asegúrate de que el valor contable sea inferior a veinte millones
15. Unos pasos a la derecha, en el mismo patio, está la puerta de las dependencias comerciales que ocupan la planta baja, con otra puerta para géneros y actividad mercantil que da a la calle de los Doblones: el almacén de mercancías delicadas, la salita de recibir, el despacho principal y el de oficina, donde dos escribientes, un empleado, un tenedor contable y el encargado trabajan a la luz de quinqués de petróleo, inclinados sobre pupitres cubiertos de copiadores de cartas y libros de asiento, cargazones y facturas
16. La voz de la contable siguió zumbando, y la chica nueva sólo la interrumpía con el convencional y admirativo «¿de verdad?», en los momentos apropiados
17. Una piadosa leyenda asevera que la Santa Cena quedó sin pagar, pues el contable, Judas Iscariote, se fugó con la caja de la empresa y los apóstoles se declararon insolventes tras la muerte del jefe
18. HA VENIDO UN CONTABLE DE OPERACIONES
19. John Winston era el contable de Henry
20. La voz, seca y clara, la de un diestro contable
21. Por supuesto que la cara de la sábana era la de Glass, el contable imprudente
22. –Sólo Irving, el contable
23. En algún lugar de la residencia habría un viejo contable que acogiera mi investigación con un espíritu más realista que el de la quisquillosa mujer
24. Socios de una misma gestoría contable, con sede en Montclair, Estado de Nueva Jersey, uno era experto en cuestiones fiscales y el otro, censor de cuentas
25. Cuando una compañía contrata a un contable para que lleve los libros, lo primero que éste hace es decir que tiene tanto trabajo en lo que respecta a la política financiera de la compañía que necesita un empleado que sepa de contabilidad para que le lleve los libros
26. Caminaron por calles limpias y bien cuidadas, como si fueran el director y su contable
27. Por eso analiza lo menudo, las cifras y las más inadvertidas posibilidades de error -figura 8- como si fuese un contable exigente o un inventor desconfiado
28. La estilográfica de Curto marcaba los números con la seguridad y el equilibrio de un avezado contable
29. -¿Qué haces aquí, Peter? ¡Fuera, rápido, que está el contable, vete ya! Es la voz de Kleiman
30. Por suerte habían sido destinados tres oficiales para interrogar al hombre, un contable que compartía el control de una red de muchachas con su proxeneta
31. A lo largo de las seis semanas siguientes, Serena entabló amistad con dos enfermeras y un contable, quien le entregó los documentos que permitieron a los abogados de Peter interponer la demanda de petición de pruebas y negociar un acuerdo por la vía rápida
32. –Necesito los nombres del contable y el abogado del señor Sorenson, ¿los tiene?
33. Le encontró allí hablando con un contable
34. Mientras Morath y Novotny entraban a la sala, un funcionario local cargado con dos libros de contabilidad subía pisando con fuerza las escaleras; tras él iban un contable y una secretaria con dos libros más
35. Entregué los resultados al departamento contable a las cinco y media
36. –Dos millones de sestercios -respondió el contable
37. Paolino ha dejado el trapo y la caja de basuras y se apoya en la mesa del contable
38. –Será mejor que se lo diga el contable
39. El contable Culicchia, que vivía en el primer apartamento del cuarto piso, en cuanto abrió la puerta, propinó un empujón al comisario y lo apartó
40. –Y, ahora, ¿qué hago yo? ¿Qué hago? ¡Ésa me cuenta el dinero! – se quejó el contable, retorciéndose las manos
41. El contable se acercó al agente y le dijo en un susurro:
42. El contable entró en su casa y, poco después, regresó con una bandeja en la que descansaban un panecillo, un buen trozo de queso caciocavallo, cinco lonchitas de salchichón y un vaso de vino
43. –Tengo una curiosidad, señor contable: ¿usted, Lapecora, Mandrino y Finocchiaro eran los compañeros habituales de juego?
44. –El contable ha descubierto que los ladrones le han robado una cosa
45. –Disculpe, contable -preguntó, deslumbrado por una repentina iluminación-
46. –¿Y por qué no quería que el contable lo oyera?
47. No solo porque, como decía, la norma legal consagra que la verdad contable es la opinión del Banco de España, sino porque, además, si se trata de acentuar la «prudencia» en el análisis patrimonial de una entidad, el auditor siempre se sentirá más confortable cuanto mayor sea esa «prudencia», y si resulta que su origen es el propio Banco de España, tanto mejor
48. Claro que si, además, hubieran surgido problemas adicionales en el mercado interbancario, la intervención estaría justificada por un problema contable (recursos propios) y por otro derivado de la situación «objetiva» del mercado
49. Igualmente expliqué en la rueda de prensa del día 11 de enero de 1994 que algunos de los conceptos alegados por el Banco de España tenían una naturaleza estrictamente contable y que, además, en ciertos supuestos, carecían de todo soporte legal
50. Es bastante normal que el lector se pregunte que, si según el ministro y el gobernador esa cifra de 500 000 millones de pesetas no es el agujero de Banesto, si esta entidad tiene un volumen muy importante de recursos propios, si hay plusvalías latentes y si, además, los saneamientos no han de realizarse de modo inmediato, entonces ¿por qué se ha intervenido? ¿Por qué se ha optado por una solución tan traumática? En el turno de respuesta añade todavía más claramente el gobernador lo siguiente: «(…) porque por supuesto una parte del saneamiento tendría un carácter básicamente contable»