1.
habíasido una gran adquisición, porque era un estuche de cosas,
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gafas de oro en el estuche, y salió del gabinete a la
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Puse otra vez los dos retratos y el estuche en el cofrecillo, éste
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venerable estuche de recogimiento, depiedad, de silencio, de
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deseaban; y fue que conunas tijeras que traía en un estuche quitó con mucha presteza la barba
6.
abrir el estuche de las joyas
7.
—Tomad—dijo el duque abriendo un cajón y sacando deél un estuche
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Montiño, que no se había repuesto de su turbación, habíatomado un estuche por
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está la encomienda (y sacó delbolsillo el estuche que le había dado el duque de
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vi en el fondodel estuche dos pálidos y admirables zafiros
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un estuche en la mano
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raíces, abrió el estuche de lostornillos de diamantes
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—Pongámoslos en el estuche
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El notario dobló metódicamente las gafas, las puso en el estuche y dijo,después de
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conchas de su estuche y echando fuera toda lacabeza
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alteración, Teodoro Golfín sacó su estuche,del estuche unas pinzas, y en un santiamén extrajo la
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pusieron ante el espejo de un estuche de costura para que se mirase
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Sacó del bolsillo un estuche complicado, abrió una hoja en forma de destornillador y con la
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Como el día anterior, el silencio nos cubrió como un estuche
20.
El cúmulo de Virgo es ya la colección de galaxias más rica que conocemos, repleta de espirales, elípticas e irregulares, un estuche lleno de joyas en el cielo
21.
Luego, volvio a colocar el papel en el estuche y coloco este en el pan
22.
Con dedos temblorosos desgarró el papel que lo envolvía y descubrió el conocido estuche de cuero
23.
Hasta que hubo abierto este estuche y visto la tabaquera, en un lecho de algodón en rama no quedó tranquila
24.
Todavía porfiaba mi marido, con la gorra en la mano, a querer ir acompañando al alcalde, viendo lo cual mi señora, llena de cólera y enojo, sacó un alfiler gordo, o creo que un punzón, del estuche, y clavósele por los lomos, de manera que mi marido dio una gran voz y torció el cuerpo, de suerte que dio con su señora en el suelo
25.
Días de mayo en París en que el estuche blanco de las flores de castaño flota en todo el aire
26.
Los guardaba en un estuche de madera tallada y le dejaba jugar con ellos y elegir dos para que ella se los pusiera
27.
Alargó la mano y examinó el estuche del CD
28.
Colócala, mi buen Jorge, en el segundo cajón del tocador, junto al estuche que contiene los gemelos de perlas
29.
Pasó sus manos cariñosamente por el estuche
30.
- ¿Y el estuche de las joyas?
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El galeno terminó su examen, guardó las agujas en su estuche y, tras ordenar que recostaran al enfermo en el lecho, se retiró a un lado junto a las mujeres y habló:
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Gallo estaba bajando de una silla con un estuche de cuero en la mano
33.
—¡Eso es lo que hay en el estuche! —exclamó Mimì, golpeándose la frente con la palma de la mano
34.
Montalbano se había sentado en una silla con el estuche entre las piernas
35.
Vuelve a vestirse, abre la vitrina, toma el violín, lo introduce en la maleta y saca de la misma maleta el violín sin valor y lo coloca en el estuche
36.
Fatty sacóse un pequeño estuche de piel del bolsillo
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Al reló siguieron cuantas baratijas encontré a mano, entre ellas guantes perfumados, un estuche de marfil, pequeñas estatuas de alabastro y después unos mapas del Asia, libros lujosamente encuadernados que sin duda los muy necios se creían libres de la Inquisición, unas pantuflas, cuatro casacas con galones de plata y oro y el pupitre en que dos días antes se había extendido mi recomendación
38.
Y también recuerdo el estuche
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El coronel volvió a guardar los prismáticos en su estuche
40.
»Tomé en las manos el precioso estuche y miré con cierta perplejidad a mi ilustre cliente
41.
Sin embargo, cuando me quedé solo con el precioso estuche encima de la mesa, delante de mí, no pude evitar pensar con cierta inquietud en la inmensa responsabilidad que había contraído
42.
Admirable era su tez, de blancura un tanto marfilesca, sin ningún afeite ni polvos, ni nada más que lo que al pincel [162] de Naturaleza debía; hechicera su boca fresca, estuche de los mejores dientes del mundo; arrebatadores sus ojos negros, con un juego de miradas que recorrían todos los registros, desde el más burlesco al más ensoñador; deliciosas las dos matas de pelo castaño que se partían sobre la frente, extendiéndose en bandas, no con tiesura pegajosa, sino con cierta ondulación suave, un trémolo del cabello que iba a parar tras de la oreja, bordeándola graciosamente
43.
En sus cajones se habían encontrado varios artículos pertenecientes a la víctima -entre ellos, un estuche con navajas de afeitar-, pero él explicó que se trataba de regalos de la víctima, y el ama de llaves corroboró esta versión
44.
-Yo te aseguro, Vicente mío, que aquí [229] me acomodo como una joya en su estuche
45.
Todo ello forma una trama acabada en radios y círculos, trazada con instrumentos que están en el cajón de la mesa: reglas de cálculo, patrones de distancia, compases, cartabones, una lupa grande y una brújula inglesa de buena calidad en un estuche de madera
46.
Cuando coloqué mi estuche rígido en la cinta transportadora para que pasara por rayos X sabía lo que sucedería a continuación
47.
Después de poner el estuche rígido sobre el borde del escritorio, lo abrí y saqué las secciones de hueso envueltas en plástico
48.
Belén es hoy una ciudad de intenso turismo pío, hoteles, pensiones, restaurantes, hamburgueserías, Kentucky Fried Chicken, heladerías, tiendas de souvenires, puestos de rosarios confeccionados con huesos de aceitunas del huerto de los Olivos, botellitas con licor de pétalos de rosa del huerto de Getsemaní, pisapapeles de metacri-lato que muestran en su interior un metacarpo procedente de la tumba de Lázaro; perchas de la madera del olivo en el que (según la tradición) se colgó Judas; coronas de espinas;210 comercios de todo a cien, en los que pueden adquirirse fotografías del Papa, estampas, imágenes, postales, bufandas del Betis Balompié con la imagen de la Virgen de Fátima en un extremo y la del Jesús del Gran Poder en el opuesto, estampitas del Niño Jesús tocadas en el sagrado pesebre, frascos de agua del Jordán en elegante estuche de piel de camello alusivo a las vestiduras de san Juan el Bautista (o Inmersor), etc
49.
Casey abrió el cajón, que contenía disquettes, papel, un par de tijeras y algunos rotuladores en un estuche
50.
Y trae un estuche de sutura a la habitación dos
51.
Donovan sonrió y se puso un detonador en el estuche que llevaba al lado, con gesto de ostentación
52.
Harry se puso en la cola detrás de un hombre con sombrero de vaquero, colocó el estuche sobre la repisa y se volvió para observar las mesas de juego
53.
Mientras deslizaba la pistola dentro del estuche que llevaba en la cintura, Billy dijo:
54.
Ella cerró los dedos para asirlo, pero el trozo de metal ya había caído en el estuche
55.
Desarmó el fusil pieza por pieza, guardando cada una en su correspondiente compartimiento del estuche
56.
Envolvió la bala explosiva en un trozo de papel fino y la metió en el estuche, entre los trapos para limpiar el arma y los cepillos
57.
Una vez cerrado el estuche, lo entregó, junto con la caja de municiones, al inglés, quien se guardó las balas en el bolsillo y cogió el estuche por el asa
58.
Antes, depositó el estuche del fusil en el fondo del
59.
A su lado, el Halcón desabrochó un estuche de cuero que llevaba enganchado a la cartuchera
60.
Decían que Bandeira estaba saliendo con una cantante de cabaré y había muerto con un estuche de la Joyería Krauze en el bolsillo, un obsequio para su amiga
61.
Lanferman -dijo al retirarse, combado por el peso del cargado estuche, como si el aire se escapara despacio de él-
62.
– Puso en el mostrador un estuche de cuero y dijo:
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Los dos hombres callaron mirando el revólver en el estuche abierto de madera de teca y la caja empezada de munición
64.
El señor Tagomi hizo una reverencia y guardó el arma, la munición, el estuche en el portafolios
65.
Hileras de cuchillos y armas de fuego, expuestas en estuche de terciopelo
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Ellen se rió mientras echaba su estuche de la guitarra encima de la mesa de la cocina cubierta con papel
67.
Sin entretenerse, recogió los gemelos, que colgaban de un perchero en el vestíbulo, los sacó de su estuche de cuero y corrió escaleras arriba con ellos
68.
Un estuche con el daguerrotipo de un hombre inexpresivo y barbado, una vieja espada, la dicha y el coraje de ciertas músicas, el hábito de estrofas del Martín Fierro, los años, el desgano y la soledad, fomentaron ese criollismo algo voluntario, pero nunca ostentoso
69.
Perrin oyó los movimientos susurrantes de Gaul, que deslizaba la lanza en el estuche y después se retiraba con el silencio de un gorrión que levanta el vuelo
70.
La mayoría de la parroquia es estuche de honorabilidades; soldados desertores, que allí mismo venden y negocian los uniformes, los chacos, las cartucheras y los marrazos; rateros prófugos, que allí ocultan, por lo pronto, lo diminuto y frágil apañado con sus artes e industrias; fletadores de tierra y de agua, de canoas y carros que meten más matute que mercancías declaradas; buhoneros y carcamanes, que regresan o parten a las ferias rurales; comerciantes al menudeo, de la vecindad, con más trampas y deudas que existencias en sus tiendas, a las que no pueden tornar, porque, injustamente, se las ha sellado el juzgado; infieles administradores de pulquerías, sin empleo, pero con odios, con reales y con revólver al cinto… En ocasiones excepcionalísimas y a vueltas de influjos y parlamentos con la dueña del ergástulo, algún pobrecito reo de homicidio que, aburrido de no saber si lo fusilarán o lo indultarán con veinte años de presidio, se fuga de Belén y allí lo albergan sus valedores mientras le procuran disfraces y seguridades
71.
El peso del estuche de pino, en efecto, siguió siendo igual cuando sacamos el cuerpo
72.
Salía desde muy temprano con el estuche de la santa, y a veces regresaba tarde en la noche, exhausto y triste, pero siempre con un rescoldo de luz que le infundía alientos nuevos para el día siguiente
73.
Sin saber qué hacer mientras tanto, escudriñó el cuarto con la mirada, y descubrió el estuche de madera sobre la chimenea
74.
Margarito no le contestó, sino que entreabrió la persiana para que entrara un poco de luz, llevó el estuche a la cama y levantó la tapa
75.
Cuando le llevaron el agua, abrió sobre las rodillas un cofre de tocador con esquinas de cobre, como los baúles de las abuelas, y sacó dos pastillas doradas de un estuche donde llevaba otras de colores diversos
76.
El sobrecargo había desaparecido tan pronto como despegamos, y fue reemplazado por una azafata cartesiana que trató de despertar a la bella para darle el estuche de tocador y los auriculares para la música
77.
Era un estuche de piel artificial, y dentro del estuche, en su nido de raso, estaba el anillo que le habían quitado a Maruja la noche del secuestro
78.
(Además, en el estuche viene un disco con el repertorio de la «clavecinista» antes y después de la restauración
79.
En seguida se encogían y ennegrecían, y después de una breve discusión sobre la oportunidad de conservarlos en un estuche, los arrojaban a la basura
80.
–¡Eso es lo que hay en el estuche! – exclamó Mimì, golpeándose la frente con la palma de la mano
81.
Al estrechar una mano cuyos dedos le parecieron tan largos y retorcidos como las ramas de un arbusto, Salvador se dio cuenta de que, aunque en el atril había una partitura, Rescaglio no había sacado aún el chelo del estuche
82.
La trombonista vio, por la expresión del chico, que éste estaba francamente intrigado por el instrumento, así que fue a por el estuche y lo abrió en presencia de sus dos anfitriones
83.
Mientras Perdomo se levantaba a calentar las albóndigas en el microondas, Elena guardó el trombón en el estuche y fue contando algunas anécdotas a
84.
Mientras tanto, en el interior de la terminal, Andrea Rescaglio había atravesado ya el control de pasaportes en compañía de Gregorio y de su violonchelo, para el que había comprado un billete de pasajero, pues aunque la caja era de gran resistencia, no estaba dispuesto a correr el riesgo de que los brutales zarandeos a los que son sometidos los equipajes en las terminales aéreas le ocasionaran la más mínima fisura; y no ya al instrumento, sino al estuche mismo
85.
Harrison dio unas palmadas al estuche de las cintas
86.
Abre el estuche y extrae un objeto cilíndrico envuelto en seda
87.
Pero la última, más moderna, mejor encerrada en el estuche de madera oscura, puso en movimiento su cilindro de cobre erizado de puntas, y las lengüetas de acero dejaron de pronto oír una musiquilla grácil, en tonos agudos, argentinos: el famoso Carnaval de Venecia, y ellos ritmaron sus besos de acuerdo con esos sonidos de alegría desilusionada, y cuando su abrazo se aflojó se sorprendieron al darse cuenta de que los sones habían cesado hacía rato y que sus expansiones no habían seguido otra huella que la del recuerdo de aquel fantasma de música
88.
Y un estuche negro de plástico del tamaño de un libro
89.
Volvió a encajar la pistola en el estuche y cerró la tapa corriendo los pasadores
90.
Dejó la sierra y retiró las mordazas del torno y separó los cañones de la caja de la escopeta y metió las dos piezas en el estuche y cerró la tapa y ajustó la cerradura
91.
sacó un estuche de joyería de un cajón del escritorio, quitó los pendientes de perlas y acomodó el cristal sobre el forro de terciopelo
92.
– Devolvió la baraja al estuche y se la lanzó a Gates
93.
Cerré el estuche y fui a abrir
94.
Caleno se inclinó para coger un estuche de piel escarlata sellado con cera púrpura y se lo entregó a Bruto por encima de la mesa
95.
Cuando D'Agosta guardó la radio en el estuche, Coffey se acercó, seguido del jefe de seguridad del museo
96.
Mientras el hombre lo envolvía, Cordelia se detuvo junto a un estuche de aturdidores decorados con esmalte
97.
Extrajo un panel de la pared, se puso unas gafas protectoras que encontró en el estuche, ocultando de esa manera su rostro, trepó a la pared para que no se notase su altura y comenzó a fingir que trabajaba en una caja de controles y algunos caños