1.
explanada y de ella, en efecto, salía un camino umbrío que tomaba la dirección sur
2.
La explanada del Ayuntamiento se llenó de sujetos de toda condición y edad, con polainas
3.
Las tierras resbalosas se fueron buscando el valle y el verde de la explanada se tornó cenizo, y los tallos, que antes de la llovida aparecían verdes y enhiestos, ahora se fueron al suelo buscando la tierra que les vio crecer
4.
Ido la bajó, casi como labajan los chiquillos, de un aliento, y una vez en la explanada quellaman el Mundo Nuevo, su espíritu se espació, como pájaro lanzado alos aires
5.
explanada de laCasilla, donde las criadas y los obreros
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una linda explanada tapizada de frescomusgo y sobre las que
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la Luz en susvacilantes paseos por la explanada y los senderos
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—Esto es vivir, señor Fermín—decía en la explanada de
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ver los pueblos extraños, a la Explanada delos Inválidos
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la explanada; Luisa y Juan Claudio la siguieron
11.
Enel momento de llegar a la explanada superior,
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Metió su cabeza igualmente entre las ramas, y pudo ver, veinte metrosmás abajo, una explanada arenosa, en el centro de la cual estaban lasruinas del rancho
13.
Algún tiempo después fueron entrando en la arenosa explanada los dosjinetes, armados con carabinas, y
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centralviéronse en la explanada de proa, al pie del palo
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Salió a la explanada de proa por un corredor de la cubierta
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septentrionalesamontonados abajo, en la explanada de popa
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ir, quisopresenciarlos, bajando a la explanada
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Por toda la explanada
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Funcionaba en la explanada de popa una estufa de
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Salió con ellos del edificio a una explanada llena de
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en el charco que hacia la mitadde la explanada se forma con las
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explanada exenta de toda vegetación y en la que fatídicamenteresuenan los pasos del viajero, un
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La gran explanada del monte estaba sembrada de heridos y de muertos
24.
Subiendo los pequeños peldaños de piedra que dominan la explanada, podía verse a quienes oraban ante el muro y a los que, más lejos, volvían de la mezquita de Omar tras las últimas oraciones
25.
»Allí, ante la Explanada, entre las murallas de Jerusalén y la puerta Dorada, se encontraba la casa madre de Jerusalén, la Casa del Temple, en el mismo lugar que ocupó el Templo de Jerusalén
26.
Me enseñó el mapa: era un plano topográfico de la Explanada del Templo
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Mientras tanto en la explanada los acontecimientos volvían a tomar impulso, después de la pausa impuesta por el respeto al dolor de la madre
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como la explanada del foro y los muelles del puerto, estaban siempre concurridos, sobre todo por la mañana, por una variada multitud de gentes
29.
Cestio organizó rápidamente un rastreo a gran escala y en seguida los guías de Saluvio localizaron en una explanada, a un par de millas de la población, un campamento de guerreros francos
30.
Hizo un gesto al barman al tiempo que dejaba un billete sobre el mostrador indicando que abonaba ambas consumiciones, y abandonó el abarrotado local para trepar a uno de los enormes camiones que se encontraban aparcados en la amplia y oscura explanada exterior
31.
Despertó, digámoslo así, saliendo de su estupefacción, y en aquel mismo instante se la vio descender a buen paso de la explanada
32.
El elefante, dócil a las órdenes de su conductor, emprendió la marcha, atravesando con pesado paso la ciudad, a todo lo largo, y se detuvo cerca de una explanada donde se hallaba reunida una multitud enorme, en espera del real cortejo
33.
Amali, Juan Baret y el capitán, salieron precipitadamente de la pagoda, armados y vieron a Durga y los marineros arrodillados detrás de una esfinge que se levantaba en medio de una explanada
34.
Sobre la explanada se marcó un círculo de trescientos cincuenta metros y dentro de éste otro de cien: el primero correspondía a la línea de la muralla y dentro del segundo se levantarían los dormitorios de los marineros, los cuartos de los oficiales, los almacenes y el polvorín
35.
Andando de puntillas, Gwenda se encaminó nuevamente hacia la explanada
36.
El cortejo se detuvo algunos instantes en la explanada del templo para rendir homenaje a la divinidad a la que estaba dedicado y, luego descendió por la escalinata opuesta, redoblando su estruendo
37.
En condiciones ideales, esto debería llevarse a cabo en la Explanada de las Mezquitas, la inoportuna sede de los santos lugares musulmanes; pero, en todo caso, el auténtico lugar en el que supuestamente Abraham blandió el cuchillo sobre el cuerpo vivo de su propio hijo
38.
Atravesaron la explanada, no sin cierta emoción y con las manos en la empuñadura de los yataganes
39.
Llegados a la explanada, todos echaron a correr hacia el bosque, mientras los centinelas continuaban haciendo fuego sin resultado
40.
En aquel momento una nueva tropa de filibusteros se precipitó en la explanada
41.
Frailes y monjas, a pesar del espanto que los dominaba, avanzaron a través de la explanada llevando las escaleras
42.
La luna en cuarto creciente presidía la noche sobre la explanada del Borne, que era el lugar destinado a las justas y torneos
43.
Oyó el rumor de un automóvil que se detenía en la explanada delante de la puerta de su casa
44.
Por eso tuvo todo el tiempo del mundo para girar a la izquierda cómodamente y detenerse en la explanada que había frente a la entrada del motel
45.
Se acercó al bordillo por la izquierda, trazó la curva, enfiló el caminito que conducía a la vivienda, llegó a la explanada, se detuvo, bajó, abrió la puerta, la cerró a su espalda y buscó a tientas el interruptor, pero su mano quedó en suspenso en el aire
46.
El camino terminaba en una amplia explanada al borde del
47.
Al instante abrió la puerta que comunicaba la explanada con la huerta, y se puso junto a la tapia y debajo de mí
48.
La víctima, una novilla gorda y blanca, aguardaba al cuidado del popa y el cultarius, rumiando el pienso drogado y mirando con sus cálidos ojos castaños los apresurados preparativos del banquete en la explanada del mercado
49.
A media noche despertaron a Lúculo con la noticia de que las puertas de la ciudad estaban abiertas y comenzaban a salir sesenta mil hombres para tomar posición en la explanada entre la ciudad y el muro de asedio que habían levantado los romanos
50.
Pablo rodeó la construcción y salió a una explanada de pedregullos, bordeada de ligustros y con un mástil sin bandera en el centro
51.
Explanada dentro de las murallas servianas hacia el lado del Aventino, situada entre la puerta Raudusculana y la Nevia, en la que estaban los mataderos y otros almacenes
52.
Tres helicópteros de la policía sobrevolaron en formación la explanada del desfile y los cadetes terminaron la ceremonia lanzando sus gorras al aire
53.
De pie en la explanada del muelle, haciendo visera con una mano sobre los ojos, Desfosseux sonríe, complacido
54.
Pasando entre los cuarteles de los batallones de marina, Mojarra recorre las avenidas rectas de la población militar, deja atrás la explanada de la iglesia y entra en el edificio de la izquierda, tras identificarse ante un centinela
55.
Cuando Tizón sale a la calle, la mujer se aleja entre la lluvia, hacia la explanada de Capuchinos
56.
Improvisando cobijos con mantas, jergones, lonas y velas de barco, los desplazados ocupan la plaza y parte de la explanada que, contigua, se extiende entre los baluartes de la Candelaria y el Bonete
57.
Sentado en un pilar de piedra de la explanada real, me abrigué los hombros con el herreruelo viejo del capitán que para mí hacía las veces de capa, y seguí esperando sin perder de vista las puertas de Palacio, de donde los centinelas me habían alejado ya en tres ocasiones
58.
Después de salvar un intrincado sendero que cruzaba la floresta, tropezamos con el ábside del templo y lo rodeamos para ir a dar a una explanada a cuya derecha quedaba la hostería, en la que fuimos acogidos con cordialidad y simpatía por el viejo monje encargado de atender a los peregrinos
59.
Encontré al muchacho jugando en la explanada, frente al edificio, con un enorme gato pardo que parecía tener malas pulgas
60.
El anticuario decía que eso eran menudencias y que el gran tesoro se encontraba en el auténtico palacio funerario del emperador, pero aún tardamos un buen rato en salir de los jardines y toparnos, al fin, con la edificación más enorme que habíamos visto en nuestras vidas: una especie de pabellón inmenso de paredes rojas con varios tejados negros superpuestos y numerosas escaleras se levantaba en mitad de una nueva explanada de la que no se divisaban los confines
61.
Una vez en la cima, observaron la gran explanada que empezaba a vaciarse de gente
62.
El guía corrió hasta el prado, desató uno de los burritos y bajó a toda velocidad por la explanada
63.
El gobierno romano y el establishment judío toleraron a este grupo subversivo mientras les pareció inofensivo, cuatro pescadores y ganapanes embaucados por un individuo marginal y contracultu-ral dado a las declaraciones contundentes («dejad que los muertos entierren a sus muertos» y otras por el estilo, siempre buscando un buen titular en la inexistente prensa), pero esta paciencia llegó a su límite cuando la emprendió a patadas con los cambistas, nada menos que en la explanada del templo, lugar sagrado, y les tiró los tenderetes por los suelos con el consiguiente esturreo de la calderilla
64.
Ignoraba, por ejemplo, que Antonio Machín había comenzado su carrera española actuando en la Explanada de Alicante y que en los años cuarenta no había en esta provincia más salas de fiestas ni cines que los de la capital y, por esa razón, todos los mozos de los pueblos iban allí los fines de semana a buscar novia, a pesar de que poco pudieran hacer en una época en la que canciones como Bésame mucho o Fumando espero estaban prohibidas (no hablemos ya de los tangos de Gardel que tanto le gustaban a mi tía Reme y que hablaban de cosas tales como «calzones de seda con rositas rococó») y no se podían escuchar en la radio ni bailar en público y mucho menos ver u oír en el cine, porque una mano delante del proyector censuraba cualquier escena de amor en películas que, para colmo, ya se habían censurado previamente
65.
Pero ahora lo divisó, andando por el borde de la explanada
66.
Recorrió la explanada con la linterna, sin ver nada
67.
La forma en que la explanada central rendía homenaje a la corona soviética que remataba la municipalidad
68.
De vuelta en la explanada, Arkady apagó el parloteo del dosímetro
69.
–Se han llevado una cesta con comida a las cascadas que hay junto a la explanada
70.
–Salta y corre hacia las luces y la gente que está en la explanada del Smithsonian
71.
Siguieron doce kilómetros por la autopista 74, alejándose del mar, giraron hacia el norte a través de una explanada de matorrales y se detuvieron delante de una granja
72.
En la cima había una explanada y en ésta había una cabaña construida sobre unos pilotes
73.
Paul cogió la linterna del suelo, agarró a Christine del brazo y juntos cruzaron la explanada del campamento
74.
Un «poli» cruzaba la explanada, dirigiéndose hacia ellos
75.
Y, luego, cuando hubieron dejado atrás la extensa explanada de la zona hotelera, añadió en tono lapidario-: Todos una porquería
76.
Avizoró una explanada en forma de X: el aeropuerto
77.
Y, humillada la cara, los hombros encogidos, se internó en la explanada
78.
La explanada estaba vacía y el pabellón, sin luces y en silencio
79.
Un estrecho camino, adoquinado con piedras blancas (caliza, sin duda), nos condujo en línea recta hasta la explanada abierta al pie mismo de la escalinata de mármol que daba acceso a la casa
80.
Haciendo caso omiso de las sugerencias de sus propios discípulos, que le suplicaban que se dirigiera a la muchedumbre, Jesús de Nazaret, en silencio y con su peculiar paso rápido, dejó a la gente plantada, entrando a la gran explanada del templo por la llamada puerta Doble
81.
Poco a poco, la multitud que le había seguido, incluso, hasta la gran explanada que rodea el Santuario, fue olvidando al Nazareno, y el Maestro, en compañía de sus discípulos, penetró en el templo por el Pórtico Corintio, perdiéndose en su interior
82.
La proximidad de la Pascua mantenía la explanada de los Gentiles en plena ebullición
83.
Finalmente, cuando la fiesta era ya inminente, los «cambistas» se dirigían a Jerusalén, estableciendo su «cuartel general» en la mencionada explanada de los Gentiles
84.
Por si no fuera suficiente con aquel tumulto, en esos momentos irrumpió en la explanada una manada de bueyes -algo más de un centenar- que era conducida, a través del atrio, hasta los corrales situados en el ala norte, junto a la Puerta Probática
85.
Con una seguridad inaudita, el Galileo fue reuniendo a los astados, sacándolos del templo entre sonoros gritos y secos y potentes golpes de látigo sobre el embaldosado de la explanada
86.
Como ya he mencionado, Jesús había predicado otras muchas veces en aquella misma explanada del templo y jamás se había comportado de aquel modo
87.
Los fariseos y sus compinches quedaron como electrizados mientras un murmullo recorría aquella zona de la explanada
88.
Una vez en la explanada de los Gentiles, el rabí se acomodó en su lugar habitual -las escalinatas que rodeaban el Santuario- y en un tono sumamente cariñoso comenzó a hablar:
89.
Varios cientos de legionarios -todos ellos libres de servicio a juzgar por su indumentaria- se habían ido congregando en la explanada, formando corrillos y cambiando impresiones en voz baja
90.
Cuando el Range Rover entró a la explanada de acceso, salí volando
91.
—Esa es la razón por la que Ysabeau estaba tan disgustada ayer por nuestro beso en la explanada de acceso
92.
Al llegar a la explanada donde se extendían los edificios de cristal tuve la misma sensación de pánico que había experimentado la primera vez
93.
Salvada la última curva las luces del Sicario indicaban el refugio de la venta en una explanada aledaña a la carretera
94.
En la explanada del aparcamiento no se movía ningún coche
95.
Sebastián observó un coche que acababa de detenerse en medio de la explanada y del que bajaba un hombre que ni siquiera se había ocupado de cerrar la puerta antes de comenzar a correr hacia el edificio
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En lugar de volver a las instalaciones de la estación de Santa Justa, callejean entre los hangares hasta salir a una explanada de albero que el aguacero ha convertido en lodo
97.
Bajó las escaleras y se dirigió hacia la explanada
98.
El general supremo Agón esperaba en el centro de la explanada de grava blanca rastrillada del jardín de estatuas del castillo e intentaba no delatar la incomodidad que sentía
99.
Un grito llegó hasta ellos a través de la explanada: —¡Ah, Will!
100.
Sin embargo, al mirar a su alrededor y ver los diversos elementos de la escultura distribuidos por la explanada, se dio cuenta de que tenía ante sí un código fragmentado, un symbolon comparable a la pirámide masónica