1.
Prosiguió don Quijote contándoles cómo las órdenes de caballería fueron extendiéndose por el mundo, y cómo en ellas fueron famosos y conocidos por sus acciones valientes caballeros, con todos sus hijos y nietos, hasta la quinta generación, hasta terminar diciéndoles:
2.
Algunos de los presentes intentaron seguirla, por lo cual a don Quijote le dio la ventolera otra vez y le pareció que era oportuno usar de su caballería socorriendo a las doncellas menesterosas, y poniendo la mano en el puño de su espada, en alta voz dijo:
3.
El cura escuchó con gran atención la tracalada del canónigo en contra de los libros de caballería, con lo cual le pareció que era un hombre de sesos y que tenía razón en todo cuanto decía, pues le parecía que la gente, en vez de estar leyendo esas pendejadas, debería leer algo provechoso
4.
Entre todo lo que dijo el cura, también dijo que otros autores, más conscientes y osados, representaban sus buenas comedias a su parecer, pero que, por esto, éstos luego eran perseguidos y castigados por representar cosas en deshonra de algunos linajes y en perjuicio del establecimiento, por lo cual era bueno se creara en la Corte un comité de clasificación para su representación, y así acabar con los bollos que se armaban, cosa que podría ser extensiva a los libros de caballería, con lo cual podrían salir algunos de ellos con las perfecciones que el canónigo decía
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—Ahora, valerosa compañía, verán cuánto importa que haya en el mundo caballeros que profesen la orden de la andante caballería
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símbolos de los pecados capitales según unos, los de la caballería según otros, mientras que el
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Durante La Edad Media, Y Que Fuera Escogido Patrón De La Caballería Y La
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caracolear de la escarceadora caballería
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de caballería caracoleaban por entre los carruajes,tendiéndose algunas veces sobre el cuello de
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esto vimos que la caballería francesa se retiraba del pueblo, ocupando el llano que hay a la
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dos regimientos de caballería; Cádiz mandó el batallón de tiradores que llevaba su nombre, y las
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dos piezas pasaron por junto a la barca, mientras el grueso del ejército con la caballería nos
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escuadrón de coraceros, la mejor caballería del ejército de Dupont
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caballería, y escasas, aunque sensibles, en la infantería, qué perdió un capitán del regimiento de
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de fuego y de la caballería de España, que cargó a los franceses por el flanco
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las cargas de la caballería del general Privé, que llegaron a dominar tan fuerte posición
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toda la caballería en su persecución; pero varias de sus piezas, desmontadas por nuestras balas,
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suerte en el segundo ataque, porque renunciando ellos a poner en movimiento la caballería en
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Ya se sabe que siendo el objeto de la caballería
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los regimientos a un lado y otro, agrupando a retaguardia fuerzas considerables de caballería
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Por eso cuando, leída la carta, alcé los ojos, vi delante de las primeras filas de caballería algunas
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en pro de los menesterosos, como está a cargode la caballería y de los caballeros andantes, como
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andantes caballeros; y que si él hubiera recebido laorden de caballería, que él le diera a entender
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era pobre y con hijos, pero muy a propósitopara el oficio escuderil de la caballería
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mundo era de caballerosandantes y de que en él se resucitase la caballería andantesca
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luz y espejo de la caballería manchega, y el primeroque en nuestra edad y en estos tan
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— Porque veas, Sancho, el bien que en sí encierra la andante caballería, ycuán a pique están los
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la caballería, hapermitido el dios de las batallas que se me diese este castigo
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composición en laorden de la caballería para todo
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me arrojó al mundo, y me hizo profesar en él laorden de caballería que profeso, y el voto que en
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estará más cercade alcanzar la perfeción de la caballería
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Elisabat y puntualidad de don Quijote en guardar eldecoro a la caballería, se quedó el cuento
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profesan la orden de la andante caballería
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las voces del pastor habían de alborotar la tierra, y quela caballería de la costa había de venir
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atribuyéndolos todos a quimeras de la andante caballería
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que como esas transformacionesse ven en los sucesos de la caballería; para confirmación de lo
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comunique el valor quese encierra en la caballería andante, ni os dé a entender el pecado
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¡vive Dios que me pone enconfusión! Pero quizá la caballería y los encantos destos nuestros
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caballería! Enmal punto os empreñastes de sus promesas, y en mal hora se os entró en loscascos
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caballería andante, que ellos enseñan, negándome que no hahabido en el mundo Amadises, ni de
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los caminos por donde lleva Dios a los suyos alcielo: religión es la caballería; caballeros santos
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ordinaria caballería de las aldeanas; pero, comono va mucho en esto, no hay para qué detenernos
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tratar los jumentos y alimañas que sirven de caballería alos escuderos de los caballeros andantes
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ytomar la estrechísima de la andante caballería, bastante para hacerleemperador en daca las
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— Miren cuánta y cuán lucida caballería sale de la ciudad en siguimiento delos dos católicos
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En resolución, ¡viva la andante caballería sobre cuantas cosashoy viven en la tierra!
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diversas cosas; pero todastocantes al ejercicio de las armas y de la andante caballería
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de la andante caballería; estos pies quiero besar,de cuyos pasos pende y cuelga todo el remedio
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de la caballería andante que profeso, cuyo ejercicio aun hasta hacerbien a las ánimas de
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se encierra y cifra todo el valordel andante caballería
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órdenes de la andante caballería, sin dudaalguna guardará la que le he dado, en cumplimiento de
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las estrechezas de la andante caballería usadasen las selvas y en los montes, si bien tal vez la
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la andante caballería, y que tenía pensado de hacerse aquel añopastor, y entretenerse en la
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completa,metió las manos en el armero y sacó dos grandessables de caballería
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Delante y detrás de él evolucionaba la caballería, dando trompetazos yagitando sus sables
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Todos éramos de caballería, porque hacíamos las marchas á caballo; peroen el momento del
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homenaje que recordaba los buenos tiemposde la caballería ó la refinada cortesanía de
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estarlos de la isla apercibidos y con caballería, ques loque más temen los turcos
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la Eucharastia, hicieron un solo escuadron de suinfantería, y la caballería dividida igualmente en dos tropas á cadalado del escuadron la suya, y otro escuadron dejaron en la retaguardapara socorrer á donde la
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Oriente en el cuerno siniestro puso lastropas de caballería de los Alanos y Turcoples á cargo de Basila, en elcuerno derecho se puso la caballería mas escogida de Thracia yMacedonia, con los Valasco y los
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escuadrones queno fuese roto, hasta que los Almugavares le abrieron por el otrocostado, y por la frente, y entonces su caballería con mucha pérdidadejo el puesto, huyendo la vuelta de Cipsela
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andava peleando con la caballería, y fué tan importante suayuda, que luego dejaron los enemigos el paso
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En descubriendo á los nuestros ordenó susesquadrones, y porque tenia mayor confianza de la caballería, la pusotoda delante, y él en persona con una tropa de doscientos caballerosFranceses, y los mas lucidos de la Provincia, tomó la vanguarda
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siendo muerto el Duque, y empantanadas lasprimeras tropas de la caballería, hubo gran desorden en lo
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suencuentro con las fuerzas de caballería, que eran, sin embargo, detriple número que
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españoles una exhibición del poder de la caballería delos patriotas en una hermosa
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Los caudillos árabes juntaron la caballería que andaba desmandada
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la sangre del valiente oficial de Caballería quecirculaba en sus venas se alborotaba toda, y
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El mozo era de los de caballería y no se limitaba a entrar
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de la caballería y los gemidosde los que marchaban a la zaga
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entrada de las calles,mientras la caballería y fuertes patrullas de
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—¡Olé los hombres valientes! ¡Viva la caballería
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Estas, novelas trazan lafigura de un hombre ideal lo mismo que los libros de caballería
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Al mismotiempo un escuadrón de caballería bajaba por la calle del Conde-Duque,y un batallón
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arqueros y cerraba la marcha elresto de la caballería, es decir, los hombres de armas
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soldados de caballería, que chocaban, por el temblor de laspiernas, con las vainas de
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Los de caballería eran objeto de susmaldiciones
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cajones de pólvora,de balas y de obuses; la caballería, la infantería y los
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que son los mejores para la caballería, laartillería y la impedimenta; pero como están
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espadón de caballería y un par depistolas de arzón al cinto, y a Frantz Materne, al
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» El menor choque de caballería, un
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—Importa poco el conducto, pero sabe que se lo dijeron esta mañana enel muelle de Caballería
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infantería se reclutaba entre lo mas bajodel pueblo y la caballería estaba
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Un Oficial y 30 individuos de tropa de Caballería, y
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caballería imponía respeto y subyugaba a las demásnaciones; que sus naves, bien artilladas,
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El ejércitocuenta con infantería, caballería y artillería
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Había sido oficial de caballería, más por afición a los caballos que ala guerra
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de Gaula; esa caballería en que nohay de real y positivo sino el trastorno y el escarnio de las
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Los principios de la caballería incluían la prudencia, razonó el joven, y, en este caso, eso significaba ganar tiempo mientras discurría la mejor forma de luchar con el enorme hombre toro
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Ella había continuado soñando con esa clase de caballería pese a los tropiezos en las luchas y la incertidumbre del mando, pese a las desencaminadas visiones en los ópalos y a los desastres que parecían sobrevenir cuando el muchacho era guiado por las piedras, el broche y los augurios
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Y el camino hasta el Castillo Di Caela era largo, duro incluso para un soldado de caballería
92.
Una vez que me mantuve al paso de la traqueteante bestia, fue relativamente fácil saltar sobre su espalda al estilo en que los soldados de caballería montan sus caballos a la carrera
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«La eterna rivalidad entre la infantería y la caballería», exclama el Adelantado, riendo, Es evidente -pienso yo- que cierto clero urbano debe parecer singularmente ocioso, por no decir tarado, a un ermitaño con cuarenta años de apostolado en la selva; y queriendo serle grato me doy a apoyar sus decires con ejemplos de sacerdotes indignos y mercaderes del templo
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Le pintaba un ser sin asidero para nuestras leyes, que sería inútil tratar de alcanzar por los caminos comunes; un arcano hecho persona, cuyos prestigios me habían marcado, luego de pruebas que debían callarse, como se callaban los secretos de una orden de caballería
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Este hermetismo quizá sólo podía mantenerse, por lo demás, gracias a una suerte de espíritu de secta; según aseguran quienes estuvieron a sus órdenes en aquellos años, Cortina consiguió insuflar ese espíritu en sus casi doscientos hombres y consiguió de ese modo formar con ellos una élite compacta que se imaginaba a sí misma como una orden de caballería disciplinada por la lealtad a su jefe y a un lema compartido con otras unidades del ejército: «Si es posible, está hecho; si es imposible, se hará»
96.
Hacia las siete y media u ocho de la tarde, mientras el Rey y Fernández Campo aún estaban sondeando a los capitanes generales y exigiéndoles que mantuvieran acuarteladas sus tropas, en la Zarzuela había empezado a discutirse la posibilidad de que el Rey compareciera en televisión con un mensaje que despejase cualquier equívoco sobre su rechazo al asalto del Congreso y reiterase la orden de defender la legalidad que ya les había hecho llegar por teléfono y por télex a Milans y a los demás capitanes generales; la idea se trocó en seguida en urgencia, pero antes de que en la Casa Real pudiesen plantearse la forma de satisfacerla hubo que afrontar un problema previo: de momento era imposible grabar y emitir la alocución del monarca porque los estudios de radio y televisión en Prado del Rey estaban ocupados por un destacamento de caballería de la Brunete; así que la Zarzuela se movilizó durante los minutos siguientes para desalojar de allí a los golpistas, hasta que por fin, después de averiguar que el destacamento ocupante pertenecía al Regimiento de Caballería Villaviciosa 14, mandado por el coronel Valencia Remón, el marqués de Mondéjar, jefe de la Casa del Rey y general de caballería, consiguió que su compañero de arma retirara a sus hombres, y poco más tarde la Zarzuela solicitaba a la televisión recién liberada un equipo móvil para que el Rey pudiera grabar con él su mensaje
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¿Quién es el recién llegado? ¿Por qué se le ha permitido la entrada en el hemiciclo? ¿De qué está hablando con Suárez? El recién llegado es el comandante de caballería José Luis Goróstegui, ayudante del general Gutiérrez Mellado; verosímilmente, el asalto al Congreso le ha sorprendido en las inmediaciones del edificio o en alguna dependencia del edificio; también verosímilmente, ha hecho valer su condición de militar, de amigo o conocido del capitán Muñecas y de conocido de Tejero para que éste le permita tomar asiento junto al presidente y contarle lo que sabe
98.
La llegada de su columna levantó el ánimo de los guardias civiles sublevados, que empezaban a ser víctimas de la fatiga y del desaliento, conscientes de que el fracaso de la negociación entre Armada y Tejero había impedido un desenlace favorable del secuestro y de que a cada momento que pasaba era más difícil que el ejército acudiera en su auxilio; pero, además de proporcionar una momentánea dosis de moral a los rebeldes -permitiéndoles creer que por fin la Brunete se había unido al golpe y que aquel destacamento era sólo la cabeza de puente del esperado movimiento general-, tan pronto como se puso a las órdenes de Tejero Pardo Zancada se concentró en la tarea de insubordinar otras unidades: provisto de un listín telefónico de la división que se había procurado en el Cuartel General y saltando de teléfono en teléfono a medida que quienes dirigían el asedio al Congreso le cortaban las comunicaciones con el exterior hasta dejar únicamente cuatro o cinco aparatos en funcionamiento de los ochenta de que disponía el edificio, Pardo Zancada habló (desde un despacho de la planta baja del edificio nuevo, desde la centralita, desde las cabinas de prensa) con numerosos jefes de la Brunete dotados de mando en tropa; tras dar novedades a San Martín llamándole al Cuartel General, habló con el coronel Centeno Estévez, de la Brigada Mecanizada II, con el teniente coronel Fernando Pardo de Santayana, del Grupo de Artillería Antiaérea, con el coronel Pontijas, de la Brigada Acorazada XII, con el teniente coronel Santa Pau Corzán, del Regimiento de Caballería Villaviciosa 14
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Las reacciones a sus soflamas telefónicas oscilaron entre el derrotismo de Pardo de Santayana y el entusiasmo de Santa Pau Corzán («¡Descuida, Ricardo, no te dejaremos con el culo al aire! ¡Iremos con vosotros!»), y hacia las tres y media de la madrugada sus esfuerzos parecieron fructificar cuando un ayudante de Milans llamó al Congreso para anunciar que los regimientos de caballería Villaviciosa y Pavía acababan de sublevarse y se dirigían a la Carrera de San Jerónimo