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códice
1. Limitándonos ahora á España, hállase la más antiguanoticia de ella en un códice litúrgico de la catedral de Gerona del año1360[175]
2. en códice que se conserva enla biblioteca del Palacio real[58];
3. [12] Véase el Códice de las Cantigas
4. El códice S dice que se compuso el 1343, lo cual queda confirmadopor este
5. Hállase igualmente en otro códice
6. Es el mismo representado en el Códice Alfonsino (RIAÑO, f
7. Deyuso, en el único códice (!)
8. Este colofón del códice G es del copista, el cual acabóde copiar el libro el año 1389
9. un códice del siglo XVII, según se los escucharon y seimprimió por la Sociedad de
10. Hállase esta traducción, de letra del siglo XVI,en un códice en 4
11. 3º del tomo LXXVII) códice queno es sino el extracto de un
12. doy por buena esta figura, porque el sentimiento se expansionaba en mí al modo de un popular instinto, pidiendo libertad, vida, reformas, y mostrándome la conciencia de su valer y las muestras de su pujanza, mientras la rutinaria y glacial razón hacía débiles concesiones, evocaba el pasado a cada instante y no soltaba el códice de sus rancias pragmáticas
13. Entonces, por una coyuntura favorable tuve en mis manos un tomo que me mostró un fraile que fue miniador59 habilísimo, y que acostumbraba coleccionar los mejores trabajos que le interesaran de miniadores antecesores suyos; en esta ocasión se trataba de un códice muy curioso en cuyo lomo se veía claramente un número 1, y del que el monje al que encargaron el original, por orden de su superior según constaba en la primera página, hizo una copia donde se podían ver todas las manchas que se atribuyen al maligno, manchas que figuraban en la piel de algunos de los condenados por herejía, a fin de reconocerlas posteriormente en descendientes de los mismos, sobre todo en caso de que tuvieran relación carnal fuera del matrimonio con cristianos viejos y ésta tenía consecuencias
14. Un paquete llevó en sus manos con los dos efectos que no abandonaba jamás: el códice cuyo descubrimiento le hizo emprender su viaje y la llave de la casa de sus antepasados
15. Cayó en sus manos, en esta búsqueda, un códice cuyo epígrafe era: «Manchas del diablo y otras huellas que éste deja en el cuerpo de sus fieles para distinguirlos en éste y en el otro mundo», trazado con sumo cuido y esmero por un iluminador de libros santos que tenía un don especial para aquella delicada tarea
16. Antón, que entrevió el peligro que implicaba la conservación de aquella carta y el códice, hizo una trampilla al fondo del armario donde guardaba sus herramientas de carpintería y, tras envolverlo todo en una lona que resguardara de humedades y de mordeduras de ratas el comprometido envoltorio, lo puso allí, cubriendo con un par de cajas de cartón llenas de clavos la tapa del escondrijo, hasta que llegara el momento de enviar aquel peligroso material a la persona que creía debía de ser su destinataria
17. Volvió a empaquetar el códice con la hoja correspondiente a las señales que habían figurado en la piel de los judíos quemados en la hoguera en Lisboa hacía más de siete u ocho generaciones y se fue a buscar a don Pedro, que estaba dirigiendo la clase de los alumnos más aventajados
18. Al-Mundhir dio una orden y uno de sus hombres trajo un gran códice
19. Está oscureciendo y en cuanto el sol se ponga iremos a hacer una visita a la iglesia de San Sergio —dijo el árabe, regresando al gran códice
20. Por otra parte, ahora veía con claridad que Epitafio de un asesino y el hecho de que los crímenes narrados en sus páginas hubieran sido llevados a la realidad estaban relacionados con la obra sobre el monasterio, y ésta a su vez con la adquisición del códice por parte de Abelardo
21. —Ya ha leído el Códice, Garion —respondió Belgarath—
22. —El Códice no lo explica todo —afirmó ella—
23. —Está confirmado en el Códice de Mrin —dijo Belgarath, un poco a la defensiva
24. Esa es la razón por la que estamos tan interesados en ese códice
25. —¿Quién más está interesado en el códice?
26. —Tratándose de un organismo oficial, el gobierno podría incautar el códice
27. —¿Este fax corresponde a la traducción de esa página del códice?
28. —Necesito saber, con el mayor detalle posible, las circunstancias de la aparición del códice
29. —¿Qué pasó con el códice? —le pregunté sin la menor consideración
30. —Para su conocimiento, le diré que esa reunión estaba relacionada con la venta de un códice
31. Por lo que se ve, hay alguien más interesado en ese códice
32. Mientras yo hablaba, Ann había hojeado el códice con mayor detenimiento
33. eso significa que Boulder les tuvo que decir que el códice estaba en la caja fuerte
34. Era preciso conseguir aquel códice, antes de que lo hiciese quien estuviera detrás de los dos asesinatos
35. —¿Ese Hoffmann es quien le ha hablado del códice?
36. —Günther Hoffmann afirma estar en posesión de ese códice
37. —Que está dispuesto a entregarle el códice a Su Eminencia
38. —La conexión entre esas dos muertes es un códice del que usted tiene importante información y a mí me gustaría conocerla con todo detalle
39. Al parecer, está también interesado en el códice que ustedes habían venido a comprar
40. —No puedo apartar de mi memoria la emoción con que nos hablaba cuando, en los jardines de Groppi, afirmaba que el códice había superado todas sus expectativas
41. —¡Eso es el pergamino que había oculto en la guarda del códice!
42. encima del códice un sobre con tres palabras escritas: «Para la policía»
43. —Cuando te volviste, tenías el códice en las manos
44. —¿Cómo sabía Hoffmann que el profesor conocía que ese códice contenía una información tan comprometida?
45. —Que si registraban los equipajes de Naguib y de un individuo que lo acompañaba, encontrarían el códice y la pista para llegar al asesino
46. —¿Ha declarado Hoffmann que fue él quien entró en la habitación para apoderarse del códice?
47. —Que el códice estaba en nuestro poder y él nos lo robó en la habitación del Shepheard
48. Es un códice de gran tamaño, escrito con una caligrafía más amplia, limpia y ordenada que la que recuerdo haberle visto a él, en letras negras y rojas
49. Cumplida por mí dentro de la mejor manera que mis pocas fuerzas me permitían la versión en lengua vulgar del Códice Martiniano, mientras, por una parte, el ilustrísimo Monseñor Airoldi se entregaba a enriquecerlo con eruditas anotaciones, emprendía yo una nueva tarea en lengua vulgar, traduciendo del árabe este otro Códice, que a Vuestra Majestad ahora presento y que me fuera enviado por el generoso Muhammed ben Osman Mahgia, quien al regresar de Nápoles (donde Vuestra Majestad benignamente le había acogido como Embajador del Emperador de Marruecos) y detenerse en esta tierra durante algunos meses, contrajo conmigo tal afecto y familiaridad que, cumplido su retorno a la patria, me ha dado manifiestas señales de la más amplia y liberal de las correspondencias
50. Y por cierto que le soy deudor de muchos folios, que en el Códice Martiniano faltaban, de aclaraciones diversas acerca de la historia de los Árabes y de muchas medallas, que concurren de maravilla a ilustrar aquellos hechos y, lo que es más, de este Códice presente, el cuál contiene todas las cartas sobre asuntos de gobierno que por el espacio de casi cuarenta y cinco años fueron cambiadas entre los Sultanes de Egipto, el famoso Roberto Guiscardo, el Gran Conde Ruggiero y el hijo de su mismo nombre que éste hubo, que fundara luego la Monarquía de Sicilia y que invistiese el primer título Real