1.
Responde la equivocación del narrador al quid pro quo del personaje, porque Moreno, en las perturbaciones superficiales quepor aquel entonces tenía su espíritu, solía confundir las impresionespositivas con los recuerdos
2.
Y todas las cabezas fijáronse en el narrador
3.
puesto que soy el narrador
4.
conocer el desenlace de la historia se aumentaba con laausencia del narrador
5.
afectación en el narrador vale más que los rodeosartificiosos para evitar que la
6.
sentimientos del narrador y la luz del cielo con que talvez ilumina los casos
7.
ojazos de campesina crédula, iban de laimagen al narrador, expresando admiración
8.
prorrumpieron en una ruidosa carcajada, mientras uno de ellosdijo al narrador de la
9.
porel respeto que le inspiraba la vejez del narrador
10.
La brisa levantaba el faldón del narrador, apareciendo su
11.
prodigioso, escuchando en silencio elrelato del narrador ó el
12.
Los ojos del narrador brillaron con una luz de demencia al
13.
parado el narrador, recordando, y al fin dio cuenta de que vido
14.
ojuelos clavados enlos del narrador
15.
cercano,según su cuenta, da en el pueblo del narrador y refiere
16.
en el café dela esquina, jugando al dominó, entrado ya en días, gran narrador
17.
derecho lasperplejidades del narrador y el convencionalismo de la Historia
18.
Los caballeros de alto rango se consultaron entre sí y discutieron algunos puntos, si bien se comunicaron mediante susurros para no poner en conocimiento del narrador qué era lo que más había capturado su atención
19.
Es la ilusión lo que uno persigue: el momento en que el juglar y el narrador se desvanecen de la vista de quienes lo miran y todo cuanto ve el público son los objetos que se elevan y caen, acompañados de la historia que se completa por sí sola
20.
Soy viajero, bardo, narrador de historias y tradiciones… Un juglar que actuó en las cortes de siete reyes
21.
–¿Juglar y narrador de tradiciones?
22.
Este grupo ejerce una demencia polifónica que los impulsa a comentar cada relato del Narrador y también a revelar toda intimidad, bajo la forma de un canto refinado
23.
La opinión general es que el Narrador recibe del libro una especie de inspiración, bajo cuya influencia va completando las historias
24.
El Narrador, el coro y las prostitutas más hermosas estaban entre los más entusiasmados
25.
[1] Esta humilde edición proviene de la copia de Dimas Santángelo, un anciano envidioso que tuvo en su poder los libros del Narrador y que los corrigió cruelmente, sólo para menoscabarlos
26.
Aun así, Hurón pronunció las palabras en voz alta en el tono rimbombante de un narrador de historias
27.
De aquel punto se oyó venir aquella tarde un ruido y tintineo de caballería ligera, y hasta este simple narrador pudo comprender, con asombro, que llegaba el general con su Estado Mayor
28.
Lo que más impresionó a nuestro narrador fue el singular empeño que el general mostraba de discutirlo todo con el mayor Murray; sin embargo esta preferencia, con tal de no ser exagerada, no tenía nada de extraño
29.
El narrador se quedó por allí unos minutos, y de pronto vio algo extraordinario
30.
Aquel día de la llegada del ingeniero, día de la curiosidad adueñándose del bar, de presentaciones y elogios a granel -"es un narrador de primera"-, cuando todos los almuerzos se habían atrasado en Ilhéus, Nacib había hecho la cuenta del tiempo transcurrido desde el anuncio de su llegada, día por día
31.
El lacónico narrador, antiguo cantante de baladas playeras y protagonista de un telefilme para la NBC, pronuncia sermones sobre el control de armas y la pena de muerte en medio de un desfile de atrocidades, muchas de las cuales son reales y alguna que otra preparada
32.
-El público escucha con tanto interés -nos explicó María, que el narrador puede dejar su historia sin acabar
33.
Así habló a sus cinco abnegados mamalik el narrador Abu-Alí
34.
Cuando el narrador abre la botella, el genio es liberado al mundo y cuesta Dios y ayuda volver a meterlo dentro
35.
La Fatalidad, causa cómoda de los hechos oscuros, y luz mentirosa de lo que no puede alumbrarse, [451] se presenta aquí reclamando su página, la página a que le dan derecho las perplejidades del narrador y el convencionalismo de la Historia
36.
Pocos ejemplos de arrojo personal que al de aquella noche puedan compararse ofrecerá seguramente la Historia militar del mundo; y por mucho que el narrador apure los resortes del lenguaje para describirlo, siempre ha de resultar como un combate fabuloso entre fingidos héroes de la Mitología o la Leyenda
37.
Pero como otros autores afirman lo contrario, manifestando que las corcovas, y con ellas el dolor y tirantez de músculos, aumentaron horrorosamente, el narrador de estos sucesos cree obrar con prudencia quedándose en el justo medio entre tan opuestas aseveraciones, y así declara y establece que las protuberancias, los sufrimientos físicos y morales y el avinagrado genio de Jacoba Zahón, eran los mismos que en los días aquellos del convite que abrió a Calpena las puertas de la casa
38.
Agotada la preciosa colección de cartas que un Hado feliz puso en manos del narrador de estas historias (lo que no ha sido flojo alivio de tan rudo trabajo), su afán de proseguirlas, revistiendo de verdad la invención y engalanando lo verdadero, oblígale a lanzarse otra vez por valles y montes, ojeando los acontecimientos y las personas, que de unas y otros da pingüe cosecha la España de aquellos días
39.
(A continuación, con el fondo de una coreografía de rumberas en plena actividad artística, y que de tan carnosas tienen la zona umbilical como un caucho de automóvil, se oye la voz del narrador, que dice:)
40.
Es esta la guerra del Español desde que apareció en el valle de Tettauen, y se refiere con verdad y estimación natural de todos los hechos presenciados por el narrador, para que los venideros conozcan la brava defensa que de su religión venerada hacen los hijos de El Mogreb El Aksá
41.
Benny no me parece precisamente un narrador de fiar
42.
Era el gran escritor en persona, el creador del capitán Hornblower y el mejor narrador de cuentos sobre el mar desde Joseph Conrad
43.
Para complicar aún más las cosas, el oficial que está al mando del falso ejército se fuga con la mujer del narrador
44.
—replicó el viejo narrador, con una inclinación de cabeza
45.
Al término de la cena, como era costumbre en sus visitas a la casa, los comensales pidieron al viejo narrador que les contara una historia
46.
—Eso no tiene importancia —dijo el viejo narrador, inclinado sobre el hombre que jadeaba en el suelo del establo
47.
El narrador guardó de nuevo las monedas en la bolsa y arrojó el pequeño saquito de cuero al hombre sentado en el suelo
48.
—Tampoco sería la primera vez que la reina del Pueblo Serpiente se entromete en cosas que no son de su incumbencia —apuntó el viejo narrador
49.
Prohibidas las novelas en las que el narrador, o cualquiera de los personajes, sea identificado simplemente por la letra inícial
50.
Agradecimientos En esta novela el narrador se hace eco de las siguientes voces (por orden de aparición):
51.
Su abuelo era un narrador impresionante de vivencias que la hacían viajar
52.
Como le preguntara la Petra si no venía también Su Majestad la Reina, quedose un momento parado el narrador, recordando, y al fin dio cuenta de que vido también a la señora del Rey, pero con la cara muy tapada, como la luna entre nubes, y por esta razón Mordejai no pudo distin-guirla bien
53.
Responde la equivocación del narrador al quid pro quo del personaje, porque Moreno, en las perturbaciones superficiales que por aquel entonces tenía su espíritu, solía confundir las impresiones positivas con los recuerdos
54.
Era el Narrador sucio, el llamado Letrina
55.
Era un breve relato de la excursión del narrador y su amigo Harley Warren a un viejo cementerio, en plena noche
56.
Fue entonces cuando el compañero del narrador, Warren, descendió solo llevando consigo un teléfono portátil para comunicarse
57.
Arriba esperaba el narrador, hasta que el clic de la señal le avisó que cogiera su receptor-transmisor y escuchase
58.
Cuando el narrador lo llamó, oyó un clic en la línea, y el sonido de otra voz profunda, retumbante y aterradora que decía:
59.
Es un buen narrador
60.
Una voz, la del narrador francés o alemán, se despide del neoyorquino y luego, cuando la escena se funde en negro, dice la fecha de su muerte, pocas semanas después
61.
Por fin, el narrador se apoyó en el respaldo, le hizo una señal al barman para que le llevara otra bebida y dijo:
62.
: «Neftalí, el narrador, y su caballo Sus», en Cuentos judíos, traducción de Andrea Morales, Anaya, Madrid 1989
63.
Como ninguna «pieza» es consciente de que la están «moviendo», incluyendo al narrador Boyd Hakluyt, en el relato se recogen muchos hechos que no equivalen directamente a los movimientos de la partida, pero sí constan todos los movimientos, en su orden correcto, con la única excepción de lo que Vados menciona a Hakluyt en su confesión y, siempre que es posible, en correspondencia precisa con su efecto en la partida real
64.
Luego vino el magistrado starrio y muy severo en el tribunal de primera instancia, y goboró algunos slovos muy duros contra vuestro Amigo y Humilde Narrador, después de toda la cala y las grasñas mentiras que dijeron P
65.
Lo que interesó bastante a Vuestro Humilde Narrador
66.
Pasaje éste (del ensayo Vecchi collezionisti) que pertenece por derecho propio a la antología ideal de Praz escritor y aun narrador
67.
En un instante era Drizzt el narrador, que entretenía a los nuevos amigos con una historia de aventuras, y al siguiente, mientras levantaba un palo para golpear al muñeco, había dejado de ser él mismo
68.
Ante acto tan solemne, el más hermoso que existe en religión alguna, el narrador calla
69.
Por desgracia, no me he vuelto a encontrar nunca más con el narrador
70.
–¿El cuento? Bien, el narrador recuerda su infancia, cuando comulgaba y le enseñaban a no tocar la hostia con los dientes
71.
Eso es lo que decide el narrador con su vida al final del cuento
72.
Fue una interpretación sobrecogedora, ofrecida sin el menor esfuerzo por un narrador nato
73.
Con El desorden de tu nombre, una historia de amor y muerte, construida sobre el diseño de una relación triangular, Millas alcanzó su consagración como narrador y autor de éxito
74.
«¿Destruirán los jueces liberales a nuestras familias?», preguntaba el narrador en tono sombrío, con lo que no dejaba lugar a dudas de que acabarían haciéndolo si se les daba la oportunidad
75.
Me lo imaginaba entrando por la puerta con su mano maltrecha (pobrecito) y sentándose en la sala y explicando su secuestro una y otra vez, ciento cincuenta mil veces en los próximos años, ciento cincuenta mil explicaciones reiterativas y aburridísimas todas ellas, porque Ramón era lento y tedioso y un narrador horrible
76.
Lo que dijo el narrador fue lo siguiente: que a los niños que Manson había tenido con las mujeres de La Familia los enviaron a varios orfelinatos para que fueran adoptados, con apellidos que les había dado el tribunal y que, por supuesto, no eran Manson
77.
[11] Nota del corrector digital: En este relato, debido a la edad del narrador, se encuentran diferentes faltas de ortografía
78.
Luego, el narrador les explicó que la empresa le había ordenado que pusiera especial énfasis en la historia del obrero y repitiera algunas partes
79.
Su historia me reconfortó, porque aquél era el Joe que me resultaba conocido, el narrador que iba de una mujer a otra; en cambio, el hombre que había amenazado con alterar el equilibrio de nuestra relación el mes anterior era un completo desconocido
80.
Es un buen narrador de historias, ¿verdad? – comento la señorita Clagg-
81.
Con frecuencia había oído hablar de ello, era conocido de toda criada de servir, y con frecuencia había visto brillar los ojos del narrador y siempre me había sonreído un poco con aire de superioridad, un poco con envidia
82.
La composición de este párrafo es tan sutil, sirve tan de maravilla los propósitos del narrador, que conviene un análisis minucioso, y, en la medida de lo posible, que se vean sus ingredientes y la distribución de que han sido objeto
83.
Sólo así quedará patente el tejemaneje que el narrador se trae cuando su propósito es embarullar al lector, o, si se prefiere caer en la trampa, dejarlo con las consecuencias
84.
Para ello es necesario darse cuenta de que el narrador, al principio, reclama el interés del lector y lo orienta hacia el modo de estar vestido don Quijote: usa el adjetivo «extraño», pero en grado superlativo: «el más extraño traje del mundo»
85.
Se trata de un capítulo, o de una serie de ellos, en que en el narrador transcribe por lo general las palabras textuales de los hablantes, con lujo de «dijo» y «respondió», así como toda clase de acotaciones complementarias
86.
Al lector le hubiera gustado conocerlo en su entera textualidad, pero el criterio del narrador difiere del que tiene el lector
87.
(Se parte del supuesto, acaso indiscutible, de que los títulos de la novela los puso el autor y no el narrador
88.
Cosa curiosa y que acaso alguna vez se haya advertido es la «coincidencia de opinión», a otro respecto, entre el capellán de los duques y el narrador; pues el capellán de los duques dice:
89.
Han caído en la trampa del narrador y juzgan a don Quijote loco sin paliativos, y a Sancho bobo
90.
El narrador no olvida ningún detalle a este respecto, de modo que se asiste a la envanecida satisfacción de don Quijote al sentirse adorado, y al temor ridículo de que la adoración pase de las canciones a las obras: «…para dar a entender que allí estaba, dio un fingido estornudo (…) ¡Que tenga de ser tan desdichado caballero andante que no ha de haber doncella que me mire que de mí no se enamore! ¡Que tenga de ser tan corta de ventura la sin par Dulcinea del Toboso, que no la han de dejar a solas gozar de la incomparable firmeza mía!»
91.
¿Es él mismo el objeto de su engaño, el espectador de su ficción? La respuesta no es fácil, y conviene maldecir aquí al autor y al narrador (o quizá sólo a este último), que así embarullan al lector curioso
92.
[42] El del Verde Gabán asume aquí la «función» del narrador; el que pueda hacerlo refuerza la tesis de que el narrador, con sus opiniones y en ellas, representa el «sentir común»
93.
los cuentos de un narrador mentiroso
94.
El narrador hizo aquí una pausa, saboreando su introducción, disfrutando de la atención que había
95.
El narrador se levanta y recuerda
96.
Asra no entendía bien la intromisión del narrador en la narración
97.
» —Pero ¿qué entiende usted por esto? —Verá usted: todo lo que usted lee, supongamos que en la relación de un narrador militar, los hechos más menudos, los acontecimientos más pequeños, no son más que signos de una idea que hay que poner al desnudo, y que con frecuencia encubre otras, como un palimpsesto
98.
Este es Billy dijo el narrador presentando a "los compañeros"-
99.
Hoy, Butch y Billy están aprendiendo a dominar la telequinesia- al pronunciar el narrador esas palabras, apareció en pantalla una entrada de diccionario correspondiente a la palabra telequinesia-, una de las principales habilidades espirituales, a través de un sencillo partido de kickball
100.
Éstos leían para desaparecer en lo leído, para perder su conciencia individual y adquirir la de los héroes cuyas fechorías, peligros y pasiones compartían desde adentro gracias a la diestra manipulación de sus sentimientos y su inteligencia por parte del narrador