skyscraper

skyscraper


    Sprache wählen
    flag-widget
    flag-widget
    flag-widget
    flag-widget
    flag-widget
    flag-widget
    flag-widget
    Gehen Sie zu den Synonymen

    Verwenden Sie „pícaro“ in einem Satz

    pícaro Beispielsätze

    pícaro


    1. —No se me borra de la mente, ni habrá quien me pueda hacer pensar lo contrario, que el pícaro del doctor Elisabat se lo comía con la reina Grasinda


    2. «Las implacables flechas del pícaro Cupido se ensañan estos


    3. El Duendede los Cafés y al pícaro Concisín que se encargarán


    4. imputan lashazañas de este pícaro Araceli, dejando en el olvido


    5. hablar del pícaro ciego


    6. A lo que respondió el pícaro barbero:


    7. gusto pícaro y burlonas, y, con ser muy honestas, eran algodescompuestas, por dar lugar que las


    8. vista deque había jugado al tute, en el pícaro Casino del Príncipe, su


    9. en entrar a darle los buenos días, el pícaro de D


    10. ya queda indicado, por el pícaro Lucas, hijo delcacique

    11. que ella ha llorado, las palizas quela ha dado su padre y la estimación que ha perdido por un pícaro de


    12. llevabacalados hasta las orejas, rodeando su cara de pícaro de un


    13. Laculpa toda es del pícaro mundo, de ese tunante


    14. ¡Cómo pesa este pícaro libro!


    15. audacia y presteza—respondió el pícaro, remedando la gravedadde los doctores


    16. eraAlejandro: el pícaro pardo había cumplido su promesa; un día de unaltercado


    17. Seguir a un pícaro en nuestras calles, tan llenas de


    18. pero me arrastrabaa la derecha el pícaro deber encarnado en


    19. lugar, apretó el pícaro laslisonjas y los chicoleos, y hasta la


    20. Del pícaro fugitivo sólo volvió a saberse que anduvo por las

    21. del pícaro nodaban la menor tregua, un día, la víspera del en que


    22. pensar en el chasco que sellevaría el pícaro ladrón


    23. Stefan es un pícaro, un granuja


    24. Es cierto: fue un pícaro sin formación, fue un falangistilla de provincias, fue un arribista del franquismo, fue el chico de los recados del Rey; sus detractores tenían razón, sólo que su biografía demuestra que esa razón no es toda la razón


    25. Desde el primer momento el pícaro sin escrúpulos interpreta con aplomo el papel del aristócrata de izquierdas, y todo cuanto ve o experimenta en la cárcel parece ayudarle en su interpretación, sacudiendo su conciencia: el mismo día de su llegada lee en las paredes de su celda los mensajes póstumos de los partisanos fusilados; los prisioneros se ponen a sus órdenes y lo tratan con el respeto que merece quien personifica para ellos la promesa de una Italia en libertad, le preguntan por parientes y amigos que lucharon en unidades bajo su mando, bromean sobre el destino desdichado que les aguarda, le ruegan sin palabras que les infunda ánimos; uno de los presos que frecuenta Bardone se suicida antes que convertirse en delator; para afincarle en su papel de De la Rovere, más tarde los alemanes torturan al propio Bardone, lo que a punto está de encender un motín entre sus compañeros de cautiverio; más tarde todavía Bardone recibe una carta de la condesa De la Rovere en la que la mujer del general intenta confortar a su marido asegurándole que sus hijos y ella se encuentran bien y sólo piensan en ser dignos de su coraje y su patriotismo


    26. Quizá la postrera ocasión en que Suárez interpretó a Bardone ocurrió justo antes de ser elegido por segunda vez presidente del gobierno, en marzo del 79; ante el temor de una victoria del PSOE, ensayó entonces su último número de ilusionista, la última gran trapacería del pícaro de provincias: compareció en televisión la vigilia de las elecciones clamando contra el peligro de que triunfara la izquierda revolucionaria y destruyera la familia y el estado; él sabía muy bien que ese clamor no era más que un espantaviejas, pero quizá sospechaba que sólo arriesgándose a una cabriola demagógica podría ganar las elecciones, y no dudó en arriesgarse


    27. Y cuando en Francia me proponía sacar dinero de algún pícaro labriego ricachón (cosa casi imposible), me agradaba la idea de ver destacarse su indignada cabeza contra el fondo gris de los álamos trasquilados, en esas solemnes llanuras de las Galias donde ronda el potente espíritu de Millet


    28. -reconoció el pícaro con sincera admiración


    29. Pero Antonio tenía un arte raquero, de antiguo pícaro, para soslayar las dificultades distrayendo la atención


    30. —Recuérdalo: yo soy un patán de pueblo, y tú un pícaro de ciudad

    31. Celestino loco de alegría: paseaba con la sotana suelta por su habitación, y aunque no estaba presente ni aun en sombra el pícaro sacristán, mi amigo profería con desaforado acento estas palabras:


    32. -Que a nuestra disposición tenemos El Robespierre Español, El Duende de los Cafés y al pícaro Concisín que se encargarán de poner cual no digan dueñas a los apaga-candelas


    33. El pícaro gobierno absoluto es la peor cosa del mundo


    34. El pícaro había cambiado por completo en gesto y modales para conmigo


    35. Pero el punto en que más insistió, por ser aquel en que se encontraba más fuerte, fue el de la protección que Tilín había dado a un pícaro sectario y jacobino que andaba por el país malquistando a los realistas unos con otros, y metiendo cizaña y haciéndoles desconfiar de sus jefes y dándoles dinero para que atropellasen e hicieran atrocidades


    36. Pero ignoras el estado en que hoy se encuentra Gracia, el desorden traído por el pícaro amor, y las pasiones nuevas que la pasión contrariada despierta en ella


    37. Decían esto parados en la esquina de las Amazonas, donde acordaron separarse, el pícaro para ir a su comedero, la taberna de Tachuela; el otro en dirección de su casa


    38. A pesar de su rostro grande y fuerte, lo que más me impresionó fue la bondad que reflejaba y el humor pícaro que le asomaba a los ojos


    39. Cuña vio por el rabillo del ojo a pícaro Jefe mientras ejecutaba la operación


    40. Lo consiguió algunas veces; otras, hubo escándalo, y él —Siempre él— tuvo que apagar el incendio, haciendo regalos millonarios a las artistas agraviadas por el imbécil pícaro, sin maneras con las damas, de Petán

    41. Por la noche, antes de comer, Víctor entró muy gozoso y dio un abrazo a su suegro, al cual no le hicieron gracia tales confianzas, y estuvo por decirle: «¿En qué pícaro bodegón hemos comido juntos?»


    42. -Se supone que tienes que estar preparando el café –rezongó ella, dándole un empujoncito pícaro con su cadera desnuda


    43. -Ya sabe el pícaro que padrinos le valen -replicó Halma sonriendo, y todos reunidos, después que los jinetes entregaron a Cecilio las caballerías, se encaminaron al castillo, que así en la comarca era llamada la casona, aunque de tal castillo sólo tenía la robustez de sus paredes, y una torre desmochada, en cuyo cuerpo alto, mal cubierto de tejas, había un palomar


    44. –Hace muchos años, señor Harker -replicó Holmwood con un brillo pícaro en los ojos


    45. He vuelto a oír por vez primera -la obertura de Richard Wagner para Los maestros cantores: es éste un arte suntuoso, sobrecargado, grave y tardío, el cual tiene el orgullo de presuponer que, para comprenderlo, continúan estando vivos dos siglos de música: -¡honra a los alemanes el que semejante orgullo no se haya equivocado en el cálculo! ¡Qué savias y fuerzas, qué estaciones y climas están aquí mezclados! Unas veces nos parece anticuado, otras, extranjero, áspero y superjoven, es tan caprichoso como pomposamente tradicional, no raras veces es pícaro y, con más frecuencia todavía, rudo y grosero, – tiene fuego y coraje y, a la vez, la reblandecida y amarillenta piel de los frutos que han madurado demasiado tarde


    46. El cronista Raimundo de Brancafort, aquel que fuera caballero en la corte del archiduque de Borgoña, y ahora lo era en la del rey don Carlos, se refiere con comprensión a este episodio, justificando el comportamiento de Flaviano, quizá porque él mismo en su juventud había sido juglar y, como todos ellos, un tanto pícaro


    47. Enorme estante de roble contiene una rica y escogida biblioteca, y allí está Horacio el epicúreo y sibarita junto con el tierno Virgilio, en cuyos versos se ve palpitar y derretirse el corazón de la inflamada Dido; Ovidio el narigudo, tan sublime como obsceno y adulador, junto con Marcial el tunante lenguaraz y conceptista; Tibulo el apasionado, con Cicerón el grande; el severo Tito Livio, con el terrible Tácito, verdugo de los Césares; Lucrecio el panteísta; Juvenal, que con la pluma desollaba; Plauto, el que imaginó las mejores comedias de la antigüedad dando vueltas a la rueda de un molino; Séneca el filósofo, de quien se dijo que el mejor acto de su vida fue su muerte; Quintiliano el retórico; Salustio el pícaro, que tan bien habla de la virtud; ambos Plinios, Suetonio y Varrón, en una palabra, todas las letras latinas, desde que balbucieron su primera palabra con Livio Andrónico, hasta que exhalaron su postrer suspiro con Ruttilio


    48. Constant es un pícaro garboso, de los que gustan a mi hermano; por eso le lleva siempre consigo y le trata jocosamente, con bromas que el astuto criado sabe manejar para tener contento al emperador


    49. “-Ese pícaro no cambia -continuó Ski y sin pensar cómo la cuasi ceguera del universitario entristecía y hacía cómicas sus palabras, agregó: “-Siempre un ojo para las mujeres” “Vea usted -dijo el señor de Cambremer- lo que significa encontrarse con un sabio


    50. “¡Ah, pícaro! Puede usted decir que es envidiable












    Weitere Beispiele zeigen

    pícaro in English

    page leaf

    Synonyme für "pícaro"

    anverso reverso plana folio hoja