1.
Y a las seis horas de remar, bajo un cielo negroy tenebroso, arrullado por olas alborotadas, caen sigilosos sobre lacosta de Cuba, llenos de una dicha superior al peligro que habíancorrido y que habían de correr
2.
Hay algo de tenebroso yde inquietante en esas frentes cubiertas
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éstos llevaban la delantera en el camino delprogreso: pero, en el seno tenebroso de la
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de la sarta detodas ellas, y fue sacando del fondo tenebroso, una
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que seahoga se aferra en una paja, desapareció en el tenebroso
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de una creación armónica, brotaba el caos tenebroso
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salió, sintió que cerraban la puerta,y se encontró en un ámbito tenebroso, del cual no
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cuando encuentraun obstáculo en el tenebroso camino que sigue; sabio queno ha
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por lasoledad de las calles y lo tenebroso de la noche, a la puerta
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podidosalir del tenebroso abismo en que se habían sumido
11.
El aire obscurecido y tenebroso,
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A poco, a fuerza de mirar en el espacio tenebroso que le
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tenebroso y perfumadosilencio; otras levantaba el rostro y las pupilas hacia la altura
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fenicias, abriendo un canal entre el Mar Tenebroso, o sea
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misterio del Mar Tenebroso
16.
El Mar Tenebroso,
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Tenebroso sufrieroneste revés del destino luego de reconocer las
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poranticipado las recepciones en el tenebroso salón, á la luz
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el Mar Tenebroso, abrir nunca holladoscaminos y extender su conocimiento y su dominación por
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vencedores de Adamastor y de todos los genios delMar Tenebroso recibían el galardón de sus
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ahogándose en la propiasangre que corría por el fondo tenebroso
22.
uno a uno, en elantro tenebroso los hombres y los animales,
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34 La antorcha del cuerpo es el ojo: pues si tu ojo fuere simple, tambientodo tu cuerpo será resplandeciente: mas si fuere malo, tambien tu cuerposerá tenebroso
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nuestra destrucción y tornamos á vivir, describiendo sin cesar un tenebroso círculo desde la
25.
Tras la detención de los dirigentes del partido, comenzó un período tenebroso
26.
Era un suspiro largo y tenebroso
27.
Hemos salido del paleolítico -de las industrias paralelas a las magdalenienses y aurignacienses, que tantas veces me hubieran detenido al borde de ciertas colecciones de enseres líticos con un «no va más» que me situaba al comienzo de la noche de las edades-, para entrar en un ámbito que hacía retroceder los confines de la vida humana a lo más tenebroso de la noche de las edades
28.
El viento reposaba en calma absoluta y semejaba gravitar sobre la tierra algo invisible y tenebroso que absorbía cualquier rumor, cualquier ruido, haciendo adquirir a las plantas y al cielo la inmovilidad de las cosas muertas
29.
Caminito de la puente segoviana iba el hombre muy cabizbajo, revolviendo en su magín el grave conflicto que le abrumaba: la desaparición o eclipse inexplicable de la dama incógnita; el tenebroso porvenir del infeliz joven a quien amaba como a hermano, o como a muchos hermanos juntos, y su propia situación, que veía ya comprometida para siempre, por aquel enredo de comedia de máscaras en que tan mansamente y sin pensarlo se había metido
30.
Apartó la mirada del sombrío abismo que ocultaban las aguas, como si el misterio tenebroso que encubrían fuese responsable de las emociones que la habían dominado
31.
Tras una pausa en la cual Domiciana frunció su tenebroso entrecejo y dio a los morros toda la longitud posible, Cigüela, casi casi compungida, volvió a decir: «No me fío, Domiciana
32.
Pierce salió de un sueño tenebroso en el que se precipitaba en caída libre con los ojos vendados y sin saber dónde estaba el fondo
33.
Parecía más segura que el vestíbulo, al menos hasta que bajaron y franquearon la puerta del húmedo y tenebroso sótano
34.
Un hombre tenebroso ocupa el puesto de mando y los sabios y capaces sufren por ello porque, aunque les pese, deben seguir avanzando con él
35.
Era grande y tenebroso, alejado del pulso de la vida, adormecido entre los recuerdos; contestaba a los pasos con un sonido hueco o un rumor lejano
36.
La planicie era una tierra de nadie, entre Fuerte Tenebroso y Cuerno Alto, que ambas fortalezas intentaban controlar
37.
Fuerte Tenebroso ejercía su influencia a través de pequeños señores de la guerra, grupos de bandidos y otros agentes nefarios
38.
A la vista de que sus órdenes eran de penetrar directamente hasta el paso de la Serpiente Amarilla, lugar cercano a Fuerte Tenebroso, Lunt había encomendado a Radnor la tarea de eludir a los habitantes de la pradera
39.
A casi cien kilómetros de Fuerte Tenebroso, uno de sus exploradores había encontrado el rastro de Cyric, y el grupo de Robles Negros viró hacia el norte, en su persecución
40.
Y cuando sepas cuáles son sus motivos, te habrás enterado del más tenebroso y despreciable y único mal de la tierra, pero te encontrarás fuera de su alcance
41.
El interés de Wilkinson por la «ruta secreta de evasión» a través de los Balcanes disminuyó en cuanto quedó claro que la flota de caiques clandestinos de Pirie, organizada por un tenebroso personaje llamado Black Michael, era más fruto de un optimismo basado en hechos imaginarios que de la realidad
42.
Desde el fondo de un pozo tenebroso miró a la sirena, que suplicaba con el mismo silencio de su canción
43.
Mientras Benison enumeraba la importancia de las seis Tradiciones y el modo en el que muchos Vástagos se habían desviado del orden natural impuesto por Dios, consagrado por el Padre Tenebroso Caín en bien de aquellos que portaban su mancha, una clara división comenzó a producirse
44.
Estábamos a oscuras: sólo la puerta iluminada proyectaba unos metros cuadrados de luz sobre el amanecer tenebroso y suave
45.
Entonces quedaría solo en el mar tenebroso
46.
Un hielo de muerto, un lúgubre horror tenebroso congelaba la sangre, apretaba el corazón, adoloría el vientre vacío y poblaba de pesadillas rojas el cerebro anémico…
47.
María siguió con las otras mujeres por un corredor tenebroso, y al final entró en un dormitorio colectivo donde las guardianas recogieron las cobijas y empezaron a repartir las camas
48.
IX - EL CASTILLO TENEBROSO
49.
Una temblorosa columna de hombres reemprendió el camino, aunque no se hizo mención alguna de acampar hasta la puesta de sol, tan ansiosos estaban de poner tierra por medio, entre ellos y el tenebroso bosque que atravesaban
50.
En el Castillo Tenebroso
51.
—El Señor Tenebroso no hace preparaciones en caso de fracaso, director —dijo Snape—
52.
Slughorn es el hombre responsable de la habilidad del Señor Tenebroso con los Horrocruxes en primer lugar
53.
Lucius había decidido hacía tiempo qué familia serviría de anfitrión para el "regalo" del Señor Tenebroso
54.
Aníbal sintió un dolor punzante por lo tenebroso de sus pensamientos
55.
Publio no encontró odio, tal y como los senadores de Roma publicaban a los cuatro vientos cada vez que se reunían y apabullaban al pueblo con el tenebroso odio del cartaginés
56.
Aún no había habido tiempo suficiente para la reconstrucción después de un tenebroso año de guerra civil y locuras imperiales
57.
En cada ciudad ocupada por el ejército rojo, Calogero imaginaba un tenebroso hormigueo de fuga, a los hombres de la injusticia y la opresión trastornados por el pánico, y a los trabajadores en las plazas llenas de luces rodeando a los soldados de Stalin
58.
El hombre contempló en las pupilas de su amada el tenebroso hundimiento de la vida en los abismos [368] ocultos, cuya luz no vemos los Página 263 de 266
59.
La desquiciada, bulliciosa, iluminada Nueva York era para Yudel un bosque tenebroso
60.
En el panel opuesto, el infierno era representado como un lugar tenebroso, donde criaturas con aspecto de pájaros destripaban a los condenados, despedazaban sus cuerpos y los colocaban en parrillas para luego ponerlos sobre hogueras ardientes
61.
Vio al viejo Beppo, que usaba su escoba con tiento, mientras se balanceaba sobre una cuerda por encima de un abismo tenebroso
62.
Se había encarado a momentos muy difíciles durante su vida, pero ni el más tenebroso de todos ellos podía compararse con aquello
63.
Un hombre alto entró en el tenebroso compartimiento con pasos ligeros y silenciosos como los de un indio
64.
Y precisamente en el punto de inflexión de Stalingrado en el momento en que las llamas de Stalingrado eran la única señal de libertad en un reino tenebroso, dio inicio este proceso de reinterpretación
65.
Glaucoma cruzó con los ojos bajos el tenebroso portal ancestral incrustado de piedras preciosas, perlas, huesos y rubíes
66.
El caso de Sonzogno me distrajo y anduve extraviada analizando los motivos y las consecuencias del tenebroso asunto
67.
A continuación un breve, tenebroso y tortuoso paseo por las entrañas de la Torre
68.
Un rumbo retorcido y desandado le había llevado a un pasillo tenebroso, que el proyecto decorativo se había saltado, cubierto de paneles de madera que nadie había pintado todavía para darles el aspecto del mármol, y atestado con los retratos y demás enseres de los d’Ozoir —algunos montados en las paredes, la mayoría apoyados contra cualquier cosa que los sostuviese—
69.
El mundo se había desmoronado a su alrededor por culpa de unas malditas piedras, una superstición medieval capaz de alcanzar, con su tenebroso aliento, a un hombre que no creía en nada
70.
Perdió la cuenta de las puertas examinadas y el tenebroso pasadizo parecía continuar sin fin en la negrura
71.
Lowry quema sus últimos cartuchos y dice: “En cuanto a la desaparición del alférez Miguel Giralt —como también la del maquinista Miguel Silvany— solo me resta declarar que el más completo misterio envuelve la desaparición de esos infortunados oficiales no habiéndome sido posible rasgar el velo que cubre tan tenebroso asunto pues las diligencias del plenario no han producido más luces al respecto, y ante los resultados negativos de las investigaciones practicadas a los efectos de la causa y en presencia de los preceptos establecidos tanto en el capítulo VII del Tratado VIII de las ordenanzas militares como igualmente en otras de la Armada de que el jefe es el directo responsable de la tropa confiada a su cuidado así como un comandante de bajel lo es de sus enseres y muy especialmente de su oficialidad y tripulación y no habiendo el capitán de fragata Funes justificado suficientemente la desaparición de ellos en el naufragio y percance, es de mi parecer que debe ser responsabilizado de la vida de esos oficiales
72.
Como contrapeso moral y físico de la enormísima exaltación de las tardes, Horacio, al retirarse de noche a su casa, se derrumbaba en el seno tenebroso de una melancolía sin ideas, o con ideas vagas, toda languidez y zozobra indefinibles
73.
Todos ellos traerían anzuelos y tanzas y las provisiones que pudieron robar, de un modo tenebroso y secreto, como convenía a gentes fuera de la ley; y aquella misma tarde todos se proporcionaron el delicioso placer de esparcir la noticia de que muy pronto todo el pueblo iba a oír «algo gordo»
74.
El Tenebroso Vengador permanecía aún con los brazos cruzados, dirigiendo una «última mirada» a la escena de sus pasados placeres y de sus recientes desdichas, y sintiendo que «ella» no pudiera verle en aquel momento, perdido en el proceloso mar, afrontando el peligro y la muerte con impávido corazón y caminando hacia su perdición con una amarga sonrisa en los labios
75.
El Terror de los Mares y el Tenebroso Vengador de la América Española no se durmieron tan fácilmente
76.
Lo supo y supo que estaba solo en el tenebroso flanco de la montaña
77.
Al tartufo cazador de herencias y estafador de viudas José Ma-ría Escrivá de Balaguer, fundador de la secta franquista del Opus Dei y más perverso y tenebroso él solo que toda la Compañía de Jesús junta, lo canonizó
78.
Era trabajo perdido; advertía más o menos su masa, su peso, pero en cuanto a sus formas, las confrontaba con el tenebroso cautivo acurrucado en la noche interior y me decía: No es eso
79.
Y no fue un mal aviso, en realidad fue una llamada a la puerta, para decirme que el tenebroso vigilante rondaba por ahí y que quizá llegara antes de lo previsto
80.
Con el aire y el movimiento empezó a aclarársele la cabeza, pero a medida que se iba sintiendo mejor físicamente, el futuro se iba haciendo más tenebroso
81.
—Vamos, Hermione —dijo Ron impaciente—, ya sabemos que Dumbledore es muy inteligente y todo eso, pero siempre es posible que un mago tenebroso realmente listo lo pueda engañar
82.
¿Qué demonios hacían en una casa que parecía la del más tenebroso de los magos?
83.
—De los dos, Potter, hablaba de los dos… ¿Nunca te has preguntado por qué el Señor Tenebroso intentó matarte cuando eras un crío?
84.
—Sí, creo que ésas son las intenciones del Señor Tenebroso
85.
El bucanero extendió un pulgar hacia el tenebroso bosque
86.
Sus dioses son Crom y su oscura estirpe, que reinan sobre un lugar tenebroso de tinieblas eternas que es el mundo de los muertos
87.
El faraón muerto fue pues naturalmente también comparado con el sol poniente y dirigiéndose hacia el tenebroso hemisferio inferior, que debe recorrer para renacer de nuevo por oriente y devolver la luz y la vida al mundo superior (el que habitamos), del mismo modo que el rey difunto tenía también que renacer, bien para proseguir sus transmigraciones o bien para habitar el mundo celestial y ser absorbido en el seno de Amón, el Padre universal»
88.
No tenía ningún miedo, por lo que fue fundiéndose poco a poco en aquel medio tenebroso donde la vida y la muerte libraban una lucha sin cuartel
89.
el héroe que venció al Señor Tenebroso
90.
Autor de títulos como El enemigo: marxismo, anarquismo, masonería y El tenebroso Plan Koosevelt— Stalin, Karl asocia homosexualidad y comunismo y asiste al avance del vicio por todas partes
91.
La nieve puso un tenebroso sudario sobre la nave
92.
Y se puso a palpar las paredes mientras Guillermo se debatía entre la impaciencia de encontrar a Bruna, sus oraciones para que estuviera bien y la inquietud de perderse en aquel lugar tenebroso y nunca más ver la luz del día
93.
¡El anzuelo traidor, cebado con la ilusión del progreso para sacar del vacío tenebroso a las innumerables generaciones piscícolas!
94.
Pensar en Bill le dio fuerzas para trabajar y sumergirse en el mundo tenebroso de Mata todos mis mañanas sin problema alguno, y a la hora de comer aún tuvo menos tiempo para pensar en la mujer del cuadro
95.
El cuarto era sórdido y tenebroso
96.
La oscuridad invadió su visión periférica hasta crear la impresión de que miraba el sucio dormitorio de la casa rodante desde el extremo de un túnel largo y tenebroso
97.
Está hundida en un lugar profundo, tenebroso
98.
Tan ridículo se vio, en la vitrina y en la mente, con aquella bata y aquellos sórdidos designios de conquistar a cualquier precio un sillón y unas alcobas («y luego envejecer, enfermar, morir y confundirse con los muertos, dejando atrás una sarta de fracasos y embustes»), que torció el trayecto hacia el rincón del parque donde solía comer, empujando el carrito con una furia general e incendiaria que le recordó la del enanito gruñón de los cuentos que, tras ser sorprendido en el instante de esconder un saco de esmeraldas, huye amenazadoramente con su tesoro hacia el corazón tenebroso del bosque