1.
—Ah, entonces —dijo don Quijote al romperse la tensión heroica por esto— se me quita un peso de encima, porque las cosas que la justicia divina hace son omnipotentes e invengables
2.
Pero el peso de tantas y tan largas horas rebosantes de tensión,
3.
resolviéndose la tensión acumulada en un torrente de carcajadas que nos hicieron llorar
4.
La tensión que nos había mantenido en vilo durante los tres días que duraron los
5.
tendencia a acumular tensión y cuando pierden el control de sí mismos pueden
6.
tensión y discusiones constante?
7.
tensión todo el cuerpo, sobre todo la
8.
noche la mandíbula en tensión y los
9.
Para suavizar la tensión imperante, se organizan corridas de toros y hasta una procesión con el retrato de Bolívar, rodeado de militares y personajes del Cabildo de la ciudad, a insinuación del General Pedro Alcántara Herrón, manifestación que tuvo que ser suspendida por falta de concurrencia
10.
táctil en beneficio de lo visual, se esconde la tensión por generar
11.
De allí se deriva como consecuencia lógica que la relación comunicacional de los partidos políticos con sus electores a través de los medios (sean estos los tradicionales o los alternativos), hacen más compleja la situación, sino que en el proceso crean una tensión entre medios y políticos y entre comunicadores y propietarios de medios y entre propietarios de medios y profesionales de la comunicación
12.
A juicio de Rovigatti: "En esta relación de tensión entre unos y otros a pesar de que los directores de campaña tratan de repetir sus mensajes hasta lograr su objetivo, los periodistas operan bajo el principio de que "las noticias viejas no son noticias"
13.
66 La conclusión a que lleva lo expuesto es bastante clara: el fuego de la tensión sociopolítica fue alimentado, en un caso, por la dictadura y, en el otro, por la crisis económica
14.
Reflejan la tensión en su rostro, en su ceño fruncido, o en
15.
' La ansiedad, la tensión, y la negatividad
16.
cuál es el origen de la ansiedad, la tensión o la negatividad? El hecho de habernos apartado del momento
17.
Debemos comprender la diferencia entre la tensión y la intensidad, como
18.
Esta tensión ha tenido costos altos para la institucionalidad democrática: entre 1996 y el 2001 el país tuvo el nivel más bajo de confianza en las instituciones democráticas como el Congreso y los partidos políticos (Tanaka, 2006), pero también de desencanto y pérdida de confianza en el país en general
19.
Se necesita una valoración de los efectos que intencionalmente o no, producen sinergias o, por el contrario, generan tensión, altos costos sociales y un profundo descontento de la población con los regímenes políticos, como lo ha documentado el PNUD (2000)
20.
superaprendizaje, es el de un "masaje sónico", al eliminar la tensión del trabajo
21.
N buen grado de tensión estaban las impaciencias de
22.
Pero ya en el movimiento de los pies y en la dilatación de las naricesde Vezzera, conocí su tensión de nervios
23.
Grandes grietas se abren en el suelo violentadopor la tensión de los cables
24.
cabo de tierra,que rechinaba con la tensión
25.
elasticidad jugosa; las escenas de másalta tensión dramática,
26.
golpeabancon nerviosa persistencia, y de un modo que indicaba la alta tensión
27.
un incidente que denuevo puso en tensión mi vanidad y que le
28.
manifestaciones de puraimaginación por un esfuerzo de tensión
29.
ofreció ala tensión de su espíritu un alivio dulce y lento;
30.
rizado y el nacimiento provocador del moño que subíapor la nuca arriba con graciosa tensión y
31.
codeándose, pisándose, estrujándose, los músculos delcuello en tensión, por el afán de ver mejor
32.
en la más alta tensión el terror sobrenatural para ordeñarlocon
33.
molimiento y tensión del cuerpo y del espíritu, pues losodios enconados, la perpetua sospecha de
34.
espíritu en un estado de tensión dolorosa y en susquebrantos y
35.
curiosidad y miextrañeza en un grado de tensión extraordinario
36.
tensión en que sus nervios habían estado las últimashoras, había terminado por un
37.
brazo en tensión, señala con el índice a laesfera del reloj que tiene enfrente
38.
Las voces de clientes enojados rompieron la macabra tensión que se había establecido entre los dos
39.
Fue un gran alivio para su tensión nerviosa
40.
El director Barton intervino entonces para disminuir la tensión que adivinaba entre ambos hombres
41.
Antes de hablar, Coffey dejó que el silencio aumentara la tensión del despacho
42.
Remi tratando de ser casual, pero también escuchó la tensión en su explicación
43.
pincel en la paleta, sentía la tensión y la frustración de las últimas semanas
44.
Al mirar a Benjy, Gerry vio que su compañero también tenía los nervios en tensión
45.
Encogiéndose de la tensión de los hombros y
46.
Por un lado, nada de lo que la llevó a alejarse de la tensión en el hogar era
47.
hombros estaban caídos dejando salir la tensión de ellos
48.
La tensión aumentó exponencialmente
49.
Sumido en hondas reflexiones, hizo caso omiso de los tres visitantes que aguardaban en tensión su siguiente paso
50.
En la actualidad recuerdo sin sufrimiento la tensión, la tentación y la continencia, y me parece que aquellos momentos fueron para mí los que contenían mayor amor, pues la alegría es más fuerte que el placer y la comunión espiritual más genuina que la de la carne
51.
Una tensión indefinible preñaba el ambiente, flotaban oleadas de un miedo que apenas distaba del que les habría inspirado la Reina de los Dragones de surcar el cielo para exterminarlos
52.
»La tensión entre judíos y romanos aumentaba sin cesar
53.
Si controla sus manos y la unión de los pulgares, puede relajar la tensión de los hombros y bajarlos; por esa razón los yoguis meditan con los dedos en círculo… Mire bien: es necesario que los pulgares se toquen
54.
Me encontraba en un estado de tensión extrema, como el que precede al anuncio de una gran novedad
55.
Isabel escuchaba con creciente tensión
56.
Cayó hacia atrás, empujado por la inercia del disparo, con el rostro tornado en una confusión aberrante de sangre y carne, y los brazos aún estirados y circundados de músculos en tensión
57.
Me parece que la tensión constante a que estoy sometido es más de lo que un hombre puede soportar
58.
Los inevitables días que duraba el viaje a través del hiperespacio transcurrieron en tensión
59.
Nos hemos puesto de acuerdo, que conste, soy Rocío Marelli, dijo una, y besó a Felipe sin la menor tensión sexual no resuelta, no pienses que vamos con estas fachas por la vida, pero es lo que pide la ocasión, ¿no?, este chándal, estas zapatillas, esta gorra, esta bufanda, y esta pulsera para contrastar, todo muy Central Park a las cuatro de la tarde
60.
El simple hecho de mentir conscientemente de manera prolongada le originó un aumento de la tensión sanguínea
61.
Y el sol me entra por entre las piernas, me calienta los testículos, se trepa a mi columna vertebral, me revienta por los pectorales, oscurece mis axilas, cubre de sudor mi nuca, me posee, me invade, y siento que en su ardor se endurecen mis conductos seminales y vuelvo a ser la tensión y el latido que buscan las oscuras pulsaciones de entrañas caladas a lo más hondo, sin hallar límite a un deseo de integrarme que se hace añoranza de matriz
62.
Respiré profundamente y expulsé el aire con fuerza, esperando que de algún modo disminuyera la tensión que flotaba en el ambiente, de potencia comparable a la de una bomba atómica
63.
Gracias a Dios, Minnie rompió la tensión al morderse el trasero con vehemencia
64.
La tensión en la sala de sesiones se diluyó considerablemente y entonces el juez preguntó al señor Haversham si deseaba ponerse en pie y hacer su exposición inicial antes de que se procediera a llamar a los testigos
65.
El curioso estado de tensión que existía, según me describieron, entre los de la expedición
66.
Al parecer, le ha puesto en tensión los nervios
67.
—Mi querida Virginia, la tensión entre ciertas naciones centroeuropeas tiende aumentar
68.
Bien es verdad que las circunstancias de aquel mes no le pusieron difícil la victoria, porque en las tres semanas previas al 23 de febrero los conjurados acaso sintieron que la realidad les exigía perentoriamente el golpe, esgrimiendo un último arsenal de argumentos para terminar de persuadirles de que sólo un levantamiento del ejército podía impedir la extinción de la patria: el 4 de febrero, el mismo día en que se publicaba un durísimo documento de la Conferencia Episcopal contra la ley del divorcio, un grupo de diputados proetarras interrumpió con un alboroto de gritos y cánticos patrióticos el primer discurso del Rey ante el Parlamento vasco; el 6 apareció el cadáver de un ingeniero de la central nuclear de Lemóniz secuestrado por ETA; el 13 murió en el hospital penitenciario de Carabanchel el etarra Joseba Arregui, y en los días siguientes la tensión política se desbocó: durante una bronca sesión parlamentaria la oposición acusó al gobierno de tolerar la tortura, hubo enfrentamientos públicos entre el Ministerio del interior y el Ministerio de Justicia, hubo destituciones de funcionarios y acto seguido un plante policial que incluyó la dimisión de su directiva al completo; el 21, en fin, ETA secuestró al cónsul de Uruguay en Pamplona y a los de Austria y El Salvador en Bilbao
69.
La tensión pareció alejarse
70.
Los circunstantes percibían su tensión
71.
Los ayudantes me comentaron que el Führer vivía momentos de mucha tensión, pero que estaba convencido de que aún podía conseguir la victoria si el estado mayor se decidía de una vez por todas a aceptar las ideas que le presentaba y actuaba con la rapidez necesaria
72.
Este ultimátum pareció vencer la resistencia de Milans, quien apenas lo hubo recibido cursó a todos sus grupos tácticos la orden de regresar a los acuartelamientos, pero la tensión en la capitanía general de Valencia se había prolongado aún durante varias horas, y no sólo a causa de los fallidos intentos de arrestar a su titular impulsados desde el Cuartel General del ejército por el general Gabeiras, sino sobre todo porque las dudas no dejaban de atormentar a Milans ni le permitían dar del todo su brazo a torcer, como si confiase en que alguna adhesión rezagada pudiera proporcionar todavía la victoria a los golpistas, o tal vez como si le avergonzase abandonar a su suerte a los ocupantes del Congreso, a quienes a fin de cuentas él había metido allí
73.
Todavía bajo el efecto de la tremenda tensión militar provocada por el consejo de guerra multitudinario y por la condena de algunos de los jefes más prestigiosos del ejército, hubo quien interpretó el cuádruple atentado como un signo de que estaba en marcha un nuevo golpe militar y como un aviso al CESID para que esta vez no se interpusiera en el camino de sus organizadores; lo más probable es que fuese un aviso más personal: muchos militares y guardias civiles estaban furiosos con el CESID porque el 23 de febrero no se había puesto del lado del golpe y había hecho lo posible por pararlo, pero aún estaban más furiosos con Cortina, que según ellos había lanzado a los golpistas a la aventura, los había abandonado a mitad del recorrido y había logrado pese a todo salir indemne del juicio
74.
El silencio se alargó durante un tiempo antes de que los dos hombres continuaran hablando y me contagiaran la tensión que surgía de las fluctuaciones de la corriente eléctrica que circulaba entre ellos
75.
La tensión podía cortarse con cuchillo en el vehículo, a pesar del ambiente aparentemente alegre, un vehículo con capacidad para llevar cómodamente a cincuenta pasajeros, pero que en aquel momento apenas iba lleno a la mitad, incluyendo a los androides de servicio
76.
En efecto, en lo alto de la calle, que se ensanchaba en ese lugar, había una gran cantidad de cables eléctricos e incluso de alta tensión que habían servido en otros tiempos para la maniobra de los tranvías y que, caídos en desuso, no habían sido desmontados
77.
Y de pronto el cielo, contraído sobre sí mismo hasta la máxima tensión, se partía en dos
78.
Históricamente, siempre había existido una tensión entre el poder del señor de la tierra de Jemet y el de ellos, pero resultaba difícil discutir cuál había sido realmente el resultado final cuando los últimos habían conseguido imponer su voluntad
79.
La tensión de aquel mes de marzo hacía que la gente aprovechara el más raro pretexto para manifestar sus esperanzas
80.
En 1933, mi abuelo murió a los cuarenta y cinco años de edad debido a la tensión y al exceso de trabajo
81.
Colgamos las hamacas casi en el vacío, y agotados por el esfuerzo y la tensión, tratamos de descansar un par de horas
82.
Para entonces, mi brazo había comenzado a temblar ligeramente por la tensión y el nerviosismo
83.
Quería reducir la tensión de la situación, si era posible
84.
Primero fueron largos minutos; luego unas horas que se antojaron interminables, y mientras el sol iba ganando altura la tensión se acentuaba, ya que un pesado silencio se había convertido en el único dueño de las montañas y el estrecho camino
85.
-¿Te he hablado de la tensión de los opuestos? – me pregunta
86.
-¿La tensión de los opuestos?
87.
La tensión de los opuestos
88.
–Es la tensión de los opuestos, Mitch
89.
Se produjo lo que se dice un silencio cargado de tensión
90.
Notaba la tensión en el cuerpo de Bill y entonces apareció Debbie
91.
Transcurrido un mes de creciente tensión, se declaró la guerra entre China y los Estados Unidos
92.
Eran hombres valientes, por supuesto, pero ¿no es posible que muchos de ellos se arriesgaran como lo hacían por no sentirse capaces de soportar la tensión en sus hogares? Se interrumpió, ya borrada su semisonrisa
93.
Eran de un color oscuro y melancólico y, mientras hablábamos, parte de la tensión pareció esfumarse
94.
Un poeta expresa así la alegría y el relajamiento de la tensión al subir Merenptah al poder:
95.
Los elfos se pusieron en tensión y sus dedos curvos se ciñeron en torno a sus arcos mientras los músculos, tirantes, se preparaban para echar a correr por el mortal campo de batalla
96.
–¿Es producto de la tensión?
97.
Rhif Ehrran agitó las orejas levemente, rompiendo la tensión del momento
98.
La tensión impuesta por la gravedad era considerable y le resultaba difícil respirar
99.
Vio cómo la boca de Geran se agitaba levemente, la tensión de su cuello, el esfuerzo que le costaba hacer brotar las palabras
100.
Pyanfar notó la tensión de los dedos que sostenían su copa, el relieve de las venas y los tendones bajo la piel gris oscuro