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pamela example sentences
pamela
1. Mi estatura no es exagerada y tuve que dar saltos impropios del acontecimiento que se desarrollaba ante nuestros ojos hasta que di con el objeto de mi batida: una mujer que ocultaba sus facciones bajo una enorme pamela negra, tras unas gafas de sol y ayuso un espeso y variopinto maquillaje que desfiguraba sus prístinos rasgos
2. no, Pamela Reeves
3. Reeves señaló a Pamela en el centro del equipo
4. —¿Has comprendido, Florencia, que es de enorme importancia que se conozca todo lo que hizo la pobre Pamela el día de su muerte?
5. La intrigaban Pamela y el tío de Ahmed
6. Su madre llevaba puesto un vestido de tirantes estampado con piñas amarillas y mandarinas naranjas y una pamela ondeante en la cabeza
7. —Han examinado ya el cadáver de Pamela Wisher y lo han puesto a disposición de la familia —respondió D'Agosta
8. —Así pues, ¿coincide con nosotros en que el asesinato de Pamela Wisher y los asesinatos de mendigos están relacionados? —preguntó Hayward, todavía un poco recelosa
9. Las dos mujeres lo miraban, pero fue Pamela quien habló, en tono suave
10. Pamela era una mujer calida y encantadora, todo lo contrario de su esposo, que era muy reservado
11. Cuando Dana y Jeff llegaron, Roger y Pamela estaban en la puerta, recibiendo a los invitados
12. Cuando Roger Hudson cortó la comunicación, oyó que Pamela entraba por la puerta de calle
13. Pamela lo miró con desprecio
14. Y la que le había recomendado a la señora Daley era Pamela Hudson
15. Leyó los créditos casi con el mismo asombro que le había inspirado la película: la dirección era de Steven Spielberg…, el guión y la producción de Pamela Phillips…, asesor creativo y supervisor de efectos especiales, George Lucas
16. Pamela retorció la servilleta con aire pensativo
17. - Y que todavía tiene -murmuró Pamela, mirando en silencio hacia la montaña-
18. El vibrante arreglo musical que Giorgio Moroder hiciera de la canción Cali me, de Blondie, salía a todo volumen de la enorme radio Panasonic que llevaba en precario equilibrio sobre el hombro, y ahogó la respuesta que Pamela le dio a la hipotética pregunta de Jeff sobre volver a revivir el infierno de Auschwitz
19. Llevaban seis semanas en Nueva York, después de haber pasado más de un año viviendo por temporadas en la cabana de Jeff, al norte de California, y en la casa de Pamela, en Topanga Canyon
20. Por el momento, no había tenido tanta suerte con un sistema de vídeo holográfico propuesto por dos amigos del mundo del cine, amigos de Pamela
21. Por su parte, Pamela había vuelto a la producción de películas con una nueva sensación de libertad y diversión
22. Darryl Hannah, una joven desconocida, fue elegida para interpretar el principal papel femenino, y Pamela había insistido en encargar la dirección al cómico de televisión Rob Reiner
23. La mujer entrecerró los ojos con ligera curiosidad cuando Jeff y Pamela pasaron a su lado
24. Pamela hundió la cuchara en la paella de hierro y se la ofreció para que probara
25. Pamela encendió unas velas y puso una cinta con el Concierto de Aranjuez, interpretado por Laurindo Almeida, mientras Jeff servía más vino
26. Cuando terminaron, Jeff retiró los platos mientras Pamela ponía una bandeja con queso manchego y lonchas de melón
27. Tal como le había pedido a Pamela, se recordó una vez más que aquello no acababa allí
28. Qué lejos habían llegado, cuántas cosas habían hecho; le enorgullecían tanto los logros de Pamela en el cine como si hubieran sido propios
29. Estaba seguro de que en alguna parte habría una ramificación de la realidad en la que el legado artístico de Pamela continuaría vivo, y en las generaciones futuras seguiría conmoviendo e iluminando al público
30. Tal vez Sean, el hijo de Judy, encontraría el modo de que las especies inteligentes de los océanos y las masas habitantes de la tierra pudieran comunicarse; si lo lograba, ese supremo don de sabiduría planetaria compartida habría nacido directamente de la visión de Pamela
31. Pero ¡diablos, había despertado tres meses más tarde de lo debido! Pamela debía de estar desesperada preguntándose por qué no se había puesto en contacto con ella
32. - Siento molestarla a estas horas, pero es muy importante que hable con Pamela
33. Por el amor de Dios, Pamela…
34. El padre de Pamela lo sacó bruscamente hasta los escalones de la entrada y le cerró la puerta en las narices
35. Por las ventanas abiertas de la sala Jeff oyó unas voces airadas, a Pamela que lloraba confundida, a su madre que suplicaba que se calmaran y a su padre que alternaba el tono acusador y el tono protector
36. Pamela continuaba siendo una niña desconocida, que ignoraba quiénes y qué habían sido anteriormente
37. Pero en ese caso, ¿en qué situación quedaría la niña inocente que vivía en Westport? ¿Acaso esa persona sería simplemente el cascarón de un cuerpo carente de espíritu, un simulacro de la verdadera Pamela Phillips que pasaría por esta vida sin objetivo alguno? Tal vez su objetivo podía compararse al de una pieza animada de utilería de las que se usan en una obra de teatro o en una película, a un robot sin alma
38. La inconcebible fuerza exterior desencadenada por aquellos replays podría estar utilizando a la falsa Pamela pura y exclusivamente para mantener la ilusión de que el mundo continuaba por su curso original y normal, mientras el reparto formado por millones de personas permanecía intacto
39. Jeff advirtió que el padre de Pamela también había notado el drástico cambio producido en la voz y el comportamiento de su hija y que le molestaba enormemente que de la noche a la mañana se hubiera transformado de niña en adulta
40. Pamela le acarició la cara y le lanzó una tierna mirada llena de comprensión
41. Jeff creyó con más convicción que antes que él y Pamela estaban solos en todo aquello y que seguirían estando solos
42. Pamela se dispuso a romper otro kleenex cuando traspusieron el imponente portón, pero Jeff le detuvo la mano nerviosa y le sonrió para infundirle ánimos
43. Jeff y Pamela se miraron y luego lo miraron a él, embargados por la confusión
44. - ¿Qué era lo que les gustaba? -preguntó Pamela, frunciendo el ceño
45. En marzo de 1979, Jeff y Pamela descubrieron esta nota en el Chicago Tribune: LOS
46. Jeff se quedó observando las cajas que tanto dinero le habían costado y luego miró a Pamela a la cara
47. Después de aquello, de las restantes compañías aéreas para las que Jeff y Pamela habían pronosticado algún desastre, sólo Air Algerie y Royal Nepal Airlines decidieron hacer caso omiso de la advertencia y no cancelar los vuelos en cuestión
48. Pamela se inclinó hacia adelante resueltamente
49. Hacía tiempo que Jeff y Pamela sabían que la relación que Russell Hedges tenía con el Departamento de Estado era más bien insustancial
50. Al principio, Jeff y Pamela habían considerado su estancia en ese lugar como unas vacaciones, pero a Jeff le preocupaban cada vez más los interrogatorios minuciosos a los que los sometía Hedges, que al parecer había sido asignado al caso como enlace permanente