1.
Y despertó un olor salvaje en el aire
2.
vez salvaje, el gato es un animal que no obstante su disposición al
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de transformación del hombre en animal, de mujer en fiera salvaje,
4.
Además Se Le Asigna Otro Significado Que Es "La Tierra De Los Jabalíes", Pero El Problema Es Que El Jabalí Es Un Puerco O Cerdo Salvaje, Esto Es, Un Animal Ceremonialmente Impuro [Dícese De Lo Que Es Impropio, Inadecuado, Incorrecto, Imprudente] Acorde A La Ley Judía Y Si Bien Es Cierto Que Existen Formas Hebreas Como Tzavan O Shaban Que Quieren Decir "Jabalí", No Es Un Nombre Que Los Judíos Elegirían Como Apellido, Sin Embargo, La Realidad Muestra / Enseña Algo Diferente Y Existen Apellidos En El Castellano Como Jabalí, En El Dialecto (*1) Origen Beréber / Berebere / Berberí (*2) De Marruecos Como Djebali [Erróneamente / Equivocadamente Se Te Atribuye A Djebali El Sentido Etimológico De "Montañés" Cuando Esto Proviene Del Hebreo Harari {= Montañés}], Así Como Hay Más Variantes En El Castellano, Como Lo Son, Cerdas, Cerdeira O Cerdeiras, Cerdeiro O Cerdeiros, Cerdeiriña
5.
En El Alemán, Como Kailer (Origen Germánico O Germano, Significa Jabalí, Cerdo / Puerco Salvaje, Y Sus Derivados; Kajler, Kaler)
6.
Con sonrisa sarcástica y un expresivo alzar de hombros, dio a entenderFortunata que por ella no había inconveniente en que la sociedadvolviera al estado salvaje
7.
Tiempo hacía que él notaba ciertasequedad en su alma, y ansiaba sumergirla en la frescura de aquel afectoprimitivo y salvaje, pura esencia de los sentimientos del pueblo rudo
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¡Ah!, ya están regando esos brutos, y tengo que pasarme a laotra acera para que no me atice una ducha este salvaje con su manga deriego
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hombre salvaje enpresencia de los instrumentos y las formas
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volátil, han descubierto el secreto decombinar su libertad salvaje con su integración en
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Después de haber cogido en las aguas lonecesario para el sustento de la familia, el salvaje, satisfecho,
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dehombres se dedican á sorprender el pez salvaje que se agita en lasaguas: y muy poco numerosos
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Pero como todo lo que tenía de salvaje en la acepcióncompleta de la frase el
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contestabacon el valor pasivo y salvaje de las aldeanas avezadas
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tenía el aliento, el resoplido deun animal salvaje
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El jardín, abandonado, tenía la salvaje frondosidad de una
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princesa salvaje en elviejo palacio, escondido en un rincón de
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unavegetación libre y salvaje, me habían producido sensaciones
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salvaje, se entregó al cultivo de todas lasartes que estaban de acuerdo con sus facultades
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elegancia nativa, el andar gracioso y salvaje de lasnegras
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nativa, el andar gracioso y salvaje de lasnegras martiniqueñas
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vibraciones de un alarido salvaje y profundo,el quejido de las
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Y mientras ella habla, el salvaje errante la contempla extasiado, comoblanca
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caballos,hasta que en cuatro años se hace un salvaje hecho y derecho
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la diferenciaentre el hombre ilustrado y el salvaje estará en los términos de
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estado salvaje, y tal vez los sacrificios humanos, el canibalismoy las guerras constantes de unas
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tan salvaje, reír tan continuo queparecía repetido en la
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salvaje, conuna expresión de hambre feroz: hambre de comida y
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con un criterio semejanteal del salvaje, que aprecia los objetos por el brillo, no por su valor
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salvaje, sin saber que hay ya pueblos en el mundo,empieza a
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acompañadas de un salvaje barítono y de otro quetecleaba el piano y cantaron uno de los más preciosos
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aquella caricia con una mordedura salvaje
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cabeza, con flechas y ungran facón en la cintura, rodeado por una tribu salvaje que
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suciedad salvaje ysimpleza infantil
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Maltrana miraba estos animales sórdidos, de salvaje
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la había revelado la existencia de una vida distinta dela vida salvaje, sucia y violenta
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haciendouna vida salvaje, subsistiendo con las artes y astucias del hombreprimitivo,
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—¡Un salvaje! Sabía ya de referencia que los turcos eran
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miedo de los malosespíritus como la de cualesquiera salvaje de
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quedamos en la purabarbarie inicial, y asoma el salvaje que está
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"Presentad al salvaje, dice Lecky, la concepción de un ser
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de salvaje; pero en loque tiene de sublime sólo por los espíritus
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peligrosos que en el estado salvaje
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Reía con salvaje complacencia, y ensus
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aullido salvaje, lejos, muy lejos, casi en lasinmediaciones
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reclusión casi salvaje en la torre!
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mundo, para la gente de escalera abajo de la casasolariega el ama representaba un salvaje muy
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bueno; pero desvirtuada por el estado salvaje en que has vivido, porel abandono y la falta de
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aquí,la bravura salvaje, la lobreguez de los abismos, el silencio
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obstinada en laidolatría, salvaje en las costumbres, y
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Comieron y bebieron con esa voracidad salvaje de las fiestas nocturnas,a las que se
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La fisonomía del salvaje era poco accesible generalmente a lasinterpretaciones del
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dar a la idea, en la ocasión precisa, su vozestentórea, su brazo salvaje y su representación
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con su salvaje independencia, adornan lasfaldas del coloso, esparciendo á su alrededor finísima
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De hondonada en hondonada, y caminando siempre entre una salvaje yexuberante vegetación, entre la que
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¡Qué triste, qué salvaje, y á la par qué hermoso es todo esto!—dijeá mi buen amigo, al par que ligeramente rozaba con la espuela loshijares del caballo
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Un pueblo que ha sufrido desde los tiempos en que fue reducido por los egipcios a la esclavitud, un pueblo al que se impidió practicar su religión hasta la Edad Media, cuando los cruzados, en su salvaje y desatinada aventura en la tierra que llamaban santa, saquearon pueblos y ciudades, masacrando comunidades enteras que morían con el Shema Yisrael[3] en los labios, pensando que la Redención llegaría con el Mesías…, y hasta hoy, ayer apenas, con la espantosa catástrofe
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Su estallido fue tan salvaje que el mago y el hombre-toro lo miraron con el estupor de quien se enfrenta a un demente
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Uno de los atolondrados jóvenes escaló la pared occidental con ayuda de la cadena del puente levadizo, y estaba agarrado al enrejado que había encima de la gran puerta cuando Carnifex arremetió contra ella y, cual poderoso ingenio como los empleados en los asedios, sometió el macizo portal al mismo salvaje tratamiento con que había destrozado la entrada de las cuadras
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En el salvaje, la preocupación por la prole puede hallarse reducida, como en el animal, al instinto de conservación de la raza, a la protección de los recién nacidos y su cultura física, hasta que se hallen en situación de bastarse a sí propios
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La distinción que hizo Lucien Lévy-Bruhl entre el pensamiento lógico del civilizado y el prelógico del salvaje no siempre se justifica (v
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En buena parte del planeta los bosques y la vida salvaje están confinados en zonas aisladas, y no podrán trasladarse cuando cambie el clima
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Mientras nosotros nos dirigíamos hacia una casa donde sabíamos que había algún animal salvaje, nuestros jóvenes ayudantes se dispersaban y exploraban todas las calles y callejas de la vecindad, dando palmadas a las puertas de las casas e interrogando a personas totalmente desconocidas sobre los animales que tenían en casa
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El rastro de un animal salvaje
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Me esperaba la arena y un salvaje thag o un feroz tarag, a no ser que los mahars prefirieran llevarme a las bóvedas
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Algunas de las mujeres seguían deambulando por los pasillos, abrazadas unas a otras; no se atrevían a bajar, porque la escalera era una alfombra salvaje de cuerpos abatidos y apilados en escalofriantes montañas
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Recordaba con salvaje alegría el espectáculo de sus frustrados asesinos retorciéndose en el patíbulo de Pezzaro, y
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Mi pregunta, antes de proceder con la demostración de lo contrario es la siguiente: entre los amigos razonables y bienintencionados de mis lectores, ¿hay alguien que no esboce una sonrisa escéptica cuando se le anuncia que el altruismo presidirá el quehacer de la gran mayoría antes de muy poco tiempo? ¿Hay alguien que esté dispuesto a aceptar que la conducta de la gente no estará siempre condicionada al impacto del entorno y de la genética, sino también a cambios provocados en sus mecanismos mentales? ¿Hay alguien convencido de que para domesticar a una zorra salvaje no hará falta que progresen treinta generaciones sucesivas como ahora y bastará, al contrario, con interferir en determinadas conexiones mentales del cerebro de la zorra?
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Tal vez sea el momento de recordar el detalle del experimento al que apuntábamos en el capítulo 7 para domesticar a una zorra salvaje
70.
Milans encontró en esas dos ofensas personales argumentos suficientes para condenar a Gutiérrez Mellado a la condición de arribista dispuesto a violar su juramento de lealtad a Franco a cambio de satisfacer sus sucias ambiciones políticas; esto explica que favoreciese con todos los medios a su alcance, incluida la presidencia de la junta de fundadores de El Alcázar, una salvaje campaña de prensa que no dejó de explorar ni uno solo de los recovecos de la vida personal, política y militar de Gutiérrez Mellado en busca de ignominias con que persuadir a sus compañeros de armas de que el hombre que estaba llevando a cabo una depuración alevosa de las Fuerzas Armadas carecía del menor atisbo de integridad moral o profesional; y esto explica también que, apenas llegó Gutiérrez Mellado al gobierno, Milans pasara a encarnar la resistencia del ejército a las reformas militares de Gutiérrez Mellado y a las reformas políticas que las permitían: entre finales de 1976 y principios de 1981 el ejército apenas conoció una protesta contra el gobierno, un incidente disciplinario de gravedad o un amago de conspiración donde no estuviese mezclado Milans o donde no se invocase el nombre de Milans
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Es muy probable que Tejero nunca supiera o quisiera o pudiera vivir el terrorismo más que como una salvaje agresión íntima, y no hay duda de que fue el terrorismo lo que lo convirtió en un insumiso crónico y lo saturó de razón conforme el estado se mostraba incapaz de atajarlo y una parte de la sociedad indiferente ante los estragos que causaba entre sus compañeros de armas
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Era una bomba, y a punto estuvo de estallarle en las manos: había tomado aquella decisión salvaje porque sus triunfos le habían dotado de una confianza absoluta en sí mismo y, aunque esperaba que la sacudida en el ejército sería brutal y que habría protestas y amenazas y tal vez amagos de rebelión, la realidad superó sus peores presagios, y en algunos momentos, durante los cuatro días de locos que siguieron al Sábado Santo, Suárez quizá pensó en más de un momento que había sobrevalorado sus fuerzas y que el golpe de estado era inevitable, hasta que al quinto tradujo de nuevo en beneficio propio la catástrofe anunciada: presionó hasta el límite a Carrillo y éste consiguió que el partido renunciara públicamente a algunos de sus símbolos y aceptara todos los que el ejército consideraba amenazados con su legalización: la monarquía, la unidad de la patria y la bandera rojigualda
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El lugar era cada vez más salvaje
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Pero a la salida de la estación, que daba directamente a las primeras pendientes, el silencio de una naturaleza salvaje ahogaba poco a poco las interjecciones y los gritos, el pequeño tropel terminaba por subir la cuesta en silencio, los perros trazaban alrededor infatigables arabescos
75.
Los dos hombres, a dos metros uno de otro pero a la misma altura, el perro delante, él siempre atrás, y el tío con su mirada súbitamente salvaje y astuta, verificaba a cada instante que mantenía la distancia, y era entonces la marcha silenciosa e interminable a través de los matorrales, de los que salía a veces con un grito penetrante un pájaro desdeñado, la bajada al fondo de pequeños barrancos llenos de olores, la subida hacia el cielo, radiante y cada vez más caliente, el calor que aumentaba resecando a toda velocidad la tierra todavía húmeda a la hora de la partida
76.
Abajo, esas masas sombrías, esos fragmentos de noche dislocados y filosos, eran la Cabilia, la parte salvaje y sangrienta de ese país, durante mucho tiempo salvaje y sangriento, hacia el cual cien años atrás los obreros del 48, amontonados en una fragata con ruedas, «Le Labrador», decía el viejo doctor, «así se llamaba, imagínese, Le Labrador, para ir hacia los mosquitos y el sol», Le Labrador en todo caso se afanaba con todas sus palas, removiendo el agua helada que el mistral agitaba como una tempestad, los puentes barridos durante cinco días y cinco noches por un viento polar, y los conquistadores en el fondo de las calas, sintiéndose mal hasta reventar, vomitando unos sobre otros, deseando morir, hasta entrar en el puerto de Bône, con toda su población aguardando en los muelles para recibir con música a los aventureros verdosos que venían de tan lejos, que habían abandonado la capital de Europa con mujeres, niños y muebles para aterrizar tambaleándose, al cabo de cinco semanas de errancia, en esa tierra de lejanías azuladas, cuyo olor extraño, hecho de estiércol, especias y [ ][118] descubrían con inquietud
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Multitudes enteras habían llegado allí durante más de un siglo, habían labrado la tierra, abierto surcos cada vez más profundos en ciertos lugares, en otros cada vez más irregulares, hasta que una tierra ligera los recubría y la región volvía a la vegetación salvaje, y procreaban y desaparecían
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Jacques, y Pierre también, aunque en menor grado, se sentía de una especie diferente, sin pasado ni casa familiar, ni desván atestado de cartas y de fotos, ciudadanos teóricos de una nación imprecisa donde la nieve cubría los tejados mientras ellos crecían bajo un sol fijo y salvaje, armados de una moral de lo más elemental que les proscribía por ejemplo el robo, que les recomendaba defender a la madre y a la mujer, pero que guardaba silencio en cantidad de cuestiones vinculadas con las mujeres, la relación con los superiores
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El halcón salvaje al cielo que el viento barre,
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Cuando el niño tuvo un año, hora tras hora registrada con una muesca al ponerse el sol y al amanecer, charlaba con los pájaros y llamaba a Ne-Kâ el ganso salvaje, que llamaba a su vez al niño desde el cielo:
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Cuando llegó el invierno -no hay escarcha en la isla del Dolor-, Ne-kâ, el ganso salvaje, muy alto entre las nubes, clamaba:
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Es algo salvaje
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Y es que atravesaban extensas zonas en las que proliferaban las plantaciones de coca, puesto que las suaves laderas abiertas al norte recibían horas de insolación directa, permitiendo que la planta sagrada creciera salvaje
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No lograba imaginarme aquella mujer tan elegante transformándose en loba, sobre todo con la reputación salvaje y vulgar que los lobos tenían dentro de la comunidad de los cambiantes, pero las impresiones que recibía de su mente eran inconfundibles
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El soldado había dejado su rifle contra un árbol, en la orilla opuesta del arroyo, y corría hacia él con expresión salvaje, cerrando los puños, en un loco afán por coger el cuello del estudiante
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Estaba tan bella y tan pálida, tan fija en su abstracción, con una expresión tan completamente salvaje y como sonámbula, en un sueño de horror de no sé qué
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Pero entonces ella le había pegado, y rechazándolo con el furor de un gato salvaje, se había escapado de la habitación
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En tiempos históricos, este rito salvaje fue sustituido por ceremonias mágicas destinadas a rejuvenecer al monarca, como la Fiesta del Jubileo, o bien se obtenían sustitutos como animales, reproducciones de la imagen del rey, y probablemente personas que se habían ahogado accidentalmente en el Nilo
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»Por salvaje que sea todo carácter, se inclina ante una acción sublime, y aunque es probable que ninguno de los bandidos hubiese hecho lo que Carlini, todos apreciaron el valor de aquella acción
90.
Una mueca salvaje se dibujó en el rostro del joven elfo al imaginar los resultados del pían de su jefe
91.
Durante largo rato, el elfo salvaje se quedó en silencio
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Arilyn se inclinó hacia adelante y puso ambas manos en los hombros del elfo salvaje
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Su resolución grave se tornó salvaje regocijo, e incluso exaltación
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La oscuridad era completa, y con todo, Alí, gracias a su naturaleza casi salvaje, y el conde a una cualidad adquirida, distinguían en medio de aquella oscuridad tan profunda las menores oscilaciones de los árboles del jardín
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–Un gato salvaje, ¿no? – dijo el tesorero sonriendo-; eso es lo que ha dejado usted fuera del saco
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Y lo que hubiera podido pintar era un jardín salvaje y una casa bastante triste
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fuera por la civilización no existiría una señora Boynton! ¡En una tribu salvaje
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Parecía una bestia salvaje al acecho de su enemigo
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Arrancando la larga rama, la extendió en dirección del salvaje, que lanzó un alarido terrible creyendo que el hombre blanco quería terminar de hundirlo
100.
Sciapal, que tenía entre los dientes la pistola recién cargada del capitán, sintiéndose libre la empuñó con la izquierda, disparando contra el salvaje, que lanzó un alarido y se desplomó