1.
(Deducido del tipo de vestimenta de los asistentes al sepelio, con guantes para frio en las manos)
2.
Estando en esto, entró en la venta un pasajero con facha de cristiano recién llegado de tierras de moros, debido a su vestimenta, típica de persona que ha estado presa por ellos; de complexión robusta, de unos cuarenta años, con su rostro moreno, de barba y bozo bien cuidados, todo lo cual lo hacían ver de muy buena pinta
3.
Entró luego tras él, encima de un jumento, una mujer vestida totalmente a la morisca, cubierto el rostro con una toca, un bonetillo de brocado en la cabeza, y vestida con un manto grande que desde los hombros a los pies la cubría, todo lo cual fue la admiración de las mujeres presentes, quienes, debido a que por esos lares no veían todos los días una extranjera con esa vestimenta, la rodearon con la curiosidad más grande del mundo tan pronto como su acompañante la apeó en sus brazos
4.
realzada por la elegancia de su vestimenta y por el brillo
5.
Los estudios sobre el uso de las remesas recibidas en las regiones con mayor cantidad de emigrantes muestran que estas son destinadas a la alimentación, salud, vestimenta, educación, gastos de viaje y, raramente, en inversión (Herrera y Martínez, 2002)
6.
activación que lleva en su vestimenta y con ese modulo
7.
Quitádose que hubo esta vestimenta, tuve que
8.
vestimenta de brocado; todoun mundo de imágenes absurdas, en las que contrastaban
9.
La vestimenta de
10.
La vestimenta consistía en pantalones de cuero fino, una camisa adornada con brocados y un costoso chaleco
11.
Esa estaba en medio de la habitación envuelta en amplia vestimenta blanca
12.
En todo estaba patente, ya fuere en el desgaste del mobiliario, en lo raído de los cortinajes y de la vestimenta de los criados o en la escasez de animales en las cuadras
13.
Las mesas estaban llenas; una cantidad de hombres que por su vestimenta intuyó de cierta condición, se repartían por la extensa sala
14.
Ese era el artículo de vestimenta en que menos se fijaba
15.
En Marte, donde la vestimenta se reducía al mínimo debido al calor o al aire acondicionado, las ropas de gala consistían sólo en una camisa de seda blanca con dos hileras de botones nacarados, una corbata de lazo negra y pantalones de satín negro con cinturón de anchos eslabones de aluminio sobre fondo elástico
16.
Muchos se cambiaban de vestimenta lo que les dio un aspecto aceptable
17.
Ella tenía granos en los muslos y llevaba una vestimenta que le hacía parecer una prostituta y…
18.
Pero lo que encadenó la atención de ésta en el muchacho fue el estado en que aparecía su vestimenta, y la aparición de un tremendo miembro, de roja y bien desarrollada cabeza
19.
Uno de los lacayos declaró haber visto salir de la casa a una señora cuya vestimenta respondía a la descripción, pero se negaba a creer que fuera la novia, por estar convencido de que ésta se encontraba con los invitados
20.
Por la vestimenta, no resultaba difícil acertar quién era el agente de seguros y quién pasaba su vida en el mundo del arte
21.
Pantalones y chaleco eran los mismos de mi anterior vestimenta, y conservaba el reloj y dinero; pero mis botas de caña, por arte de magia, se habían convertido en zapatos de orillo, blandos y feos
22.
Un moro de buen porte y calidad, a juzgar por su vestimenta, corrió al socorro de los débiles
23.
La sangre no enrojeció las calles; nadie fue molestado; los llamados prohombres, que en el Congreso hicieron cuanto podían para aplastar la República, fueron conducidos a sus casas con refinada cortesía y miramiento; los espadones que se [70] reunieron en casa del Duque de la Torre se quedaron tan frescos, y si al poco tiempo pasaron la frontera fue para conspirar a sus anchas; los silbantes no tuvieron ningún deterioro en sus personas ni en su elegante vestimenta; el único que sufrió algún desavío, Becerra, a quien llevaron preso al Gobierno civil, fue puesto en libertad con apretones de manos y palmaditas en la espalda
24.
También la vestimenta la tranquilizó
25.
Los dos se pusieron la vestimenta de protección y entraron
26.
Era un individuo impecablemente acicalado, casi de la misma edad de Joanna y con vestimenta de quirófano
27.
Para desesperación de Joanna, el sonido de los tacones de Deborah en el viejo parquet combinado con su espectacular vestimenta provocó que todos los presentes las mirasen, incluida la doctora Donaldson
28.
Un viejo lombardo ataviado con la vestimenta de peregrino nos sonrió
29.
Hay que tener en cuenta su vestimenta
30.
Desde el primer momento, Ayla había considerado la vestimenta de los Zelandonii muy interesante -y, en algunos casos, preciosa, sobre todo ciertas prendas de Marthona-, pero desconocía la complejidad de los significados asociados a la ropa
31.
Su cara colorada y su peluca de tirabuzones estaban en contradicción con su vestimenta, como sus pensamientos lo estaban con sus palabras
32.
A pesar de su vestimenta era un lama, el preceptor imperial, el consejero y hechicero principal del emperador
33.
No habían podido cambiar su vestimenta desde que habían iniciado el viaje, y sólo con dificultad Monge fue reconocido por su mujer
34.
Mientras en la vestimenta de todos los demás
35.
La vestimenta inadecuada o la falta de ella, la mala alimentación y las ratas contaban entre las principales causas
36.
Sus padres eran sumamente rigurosos en cuanto a los modales, la vestimenta y el respeto a las normas sociales, mientras que en otras cuestiones mostraban una tolerancia casi desconcertante
37.
Era difícil correr con la vestimenta de protección, pues había que cuidar constantemente de no quedar enganchado en algún sitio y rasgarla
38.
Era un invento novísimo, pero le recordaba a Karl muy vivamente aquellos retablos que en su tierra se muestran, en la feria de Navidad, a los niños asombrados; muchas veces también Karl, empaquetado en su vestimenta invernal, se había parado ante ellos, y había cotejado incesantemente las vueltas de manubrio que allí ejecutaba un viejo con los efectos que tenían lugar dentro del retablo: cómo avanzaban a empellones los tres Reyes Magos y relucía la estrella y se desarrollaba esa vida cohibida en el establo sagrado
39.
Un poco agachado, seguía el movimiento de las agujas oscilantes; mientras tanto el soldado, ante una señal del oficial, le cortó con un cuchillo la camisa y los pantalones, por la parte de atrás de modo que estos últimos cayeron al suelo; el individuo trató de retener las ropas que se le caían, para cubrir su desnudez, pero el soldado lo alzó en el aire y sacudiéndolo hizo caer los últimos jirones de vestimenta
40.
En ese tren vinieron los dirigentes y también la policía del ghetto con su vestimenta y gorros con una cinta anaranjada
41.
Gustaban de reforzar su vestimenta con pieles colocadas por doquien pero por lo demás usaban la misma ropa que nosotros; en cuanto a las armas, la única diferencia estribaba en que la mayoría se pertrechaba de un cuchillo de hoja larga, atroz en el combate cuerpo a cuerpo, y muchos usaban grandes hachas capaces de cortar un escudo en dos de un solo golpe
42.
Le arrancaron la máscara de la cara, le arrebataron porciones de su vestimenta y se halló inerme ante la violación de las cámaras identificadoras
43.
El dinero ya había desaparecido entre los pliegues de su vestimenta
44.
Menudos revolucionarios, estos jóvenes con formación, buenos sueldos, buena alimentación, que, como en mi caso, gastan tanto en su vestimenta como para alimentar a familias enteras
45.
Unos instantes después los dos se habían puesto la vestimenta de los guerreros veltopismakusianos y Tarzán puso su túnica verde en el cuerpo de aquél al que había matado
46.
Onganía, un ultracatólico, pretendía incluso determinar la vestimenta de los argentinos y prohíbe el pelo largo en los hombres y la minifalda en las mujeres
47.
Como respuesta, Vierna sacó un extraño látigo de los pliegues de la vestimenta sacerdotal
48.
Su armadura de malla, el casco y el reluciente escudo eran también de aquel precioso metal; ¡una vestimenta propia de un rey y no de un soldado!
49.
–Has mantenido el código de vestimenta preferido por la nobleza autorizada por el Emperador Final
50.
Domiciano, confiado en el anonimato que le confería su vestimenta de sacerdote de Isis, abordó a uno de los esclavos
51.
Su vestimenta tenía detalles más propios de un guerrero andalusí que de un castellano, como la lóriga de cuero con placas de metal cosidas y la túnica decorada con una cenefa de trama de seda y decoración geométrica como las que usaban en el sur
52.
Por desgracia, parece que fue asesinado ritualmente, por lo que su vestimenta y su dieta no se correspondería con la de cualquier germano de su época
53.
También habían encontrado el cuerpo de un hombre de casi treinta años, cuya vestimenta encajaba con la de un cosaco del siglo dieciséis
54.
Convencido de que sólo las fuerzas del orden y no las del mal rondaban por allá, me metí en el lavabo de caballeros y, con gran perplejidad por parte de quienes en aquel lugar aliviaban sus metabolismos, saqué de la manga del quimono tres huevos que habíamos comprado de camino y me los estrellé en la cara con miras a dar a mi cetrina tez un tinte más acorde con mi vestimenta
55.
Este problema, de suyo molesto, venía agravado en la ocasión por una vestimenta cuyo procedimiento me era ajeno y por la afluencia de turistas que, so pretexto de retratar tal o cual edificio, pretendían animar con una instantánea de mis frecuentes desahogos la insoportable vaciedad de sus álbumes de fotos
56.
Alnac detuvo a uno de ellos, una mujer que llevaba una vestimenta ricamente decorada en verde y oro, y señaló hacia la procesión que se alejaba
57.
Daba la impresión de que toda su sangre hubiera teñido su vestimenta dejándolo a él exangüe
58.
Abajo, Elric vio un destello encarnado que reconoció como la vestimenta del Arquero Rojo
59.
Cuando iban allí, Inyanna y Sidoun vestían su mejor ropa, robada en los más selectos establecimientos del Gran Bazar, que no era nada comparada con las prendas exhibidas por los aristócratas, pero sí muy superior a su vestimenta cotidiana
60.
No se exigía ninguna vestimenta en particular
61.
–Sean, tú y Frikkie den un rodeo por la izquierda y…-Steff habló por sobre el hombro, pero antes de que completara la frase toda la maleza a su alrededor- estuvo llena de zulúes, por lo menos un centenar de ellos, con vestimenta de guerra
62.
Entró en la cocina con un delantal floreado atado a la cintura por toda vestimenta; de todos modos, le cubría los moretones del abdomen
63.
Más tarde, cuando la fascinación de su vestimenta me era más familiar, acostumbraba a divertirme observando los objetos de su habitación
64.
El policía con vestimenta de paisano le indicó con la cabeza la dirección de mi asiento
65.
Mary Kingsley defendía así su vestimenta: «Me encontraría ridícula si en los viajes me vistiera de distinta forma a como suelo hacerlo en casa
66.
Mediante la vestimenta y el estilismo, hombres y mujeres juegan a parecerse al género opuesto o muestran un look ambiguo
67.
Familias de musulmanes vivían entre ellos, idénticos en raza y vestimenta, y sólo diferenciados por una imperceptible variante dialectal, y por su menor ostentación de la emigración y de sus resultados
68.
– La enfermedad de la voluntad se ha extendido sobre Europa de una manera no uniforme: donde más amplia y compleja se muestra es allí donde más tiempo hace que la cultura está aposentada, y desaparece en la medida en que «el bárbaro» hace valer todavía -o de nuevo- su derecho bajo la desaliñada vestimenta de la cultura occidental
69.
Un viejo nudoso con una vestimenta blanda corría hacia el Inferior, sus codos y rodillas moviéndose a alta velocidad
70.
Tony reconoció la vestimenta
71.
Aparecieron seis guardianes con abultada vestimenta de choque
72.
Observaron durante largo tiempo a todos los ancianos con los que se cruzaban, estudiaron su andar cansino, el tipo de vestimenta que usaban, y escucharon su manera de hablar
73.
El manilargo lo miró con ojos desorbitados, sorprendido, y sacó un puñal largo y estrecho del interior de su vestimenta
74.
Y yo quería tocar el borde de la vestimenta de Ibn Sina
75.
Cara estaba inmóvil en la línea entre los dos agujeros, rodeada de escombros, y su vestimenta de cuero parecía haber impedido que éstos la hiciesen pedazos
76.
Observaron en silencio mientras los hombres y mujeres de elaborada vestimenta se acomodaban en sus puestos en la tribuna
77.
El segundo se insinúa en una hipérbole inserta en la descripción de la vestimenta de Montesinos: «cuentas (de rosario) mayores que medianas nueces, y los dieces asimismo como huevos medianos de avestruz»; se sigue con la inclusión de detalles «realistas» en contraste con el carácter fantástico del conjunto: el «puñal buido, más agudo que una lezna»; el adjetivo «peluda» (en vez de «velluda») aplicado a la mano de Durandarte; el «pañizuelo de puntas» en que Montesinos envuelve el corazón de su pariente; la serie sal-mal olor-mojama referida al corazón del mismo; la mención de una situación extraordinaria que, por el lugar en que está situada y, sobre [182] todo, por el tono con que está contada, puede tener efectos cómicos: «siendo esto así, y que realmente murió este caballero, ¿cómo ahora se queja y suspira de cuando en cuando, como si estuviese vivo?»; la recitación, por Durandarte, de un romance escrito visiblemente después de su muerte (un romance popular); una declaración de Montesinos que quita a la escena y a sus palabras toda espontaneidad y la mecaniza por repetición: «Esto que agora os digo, ¡oh, primo mío!, os lo he dicho muchas veces, y como no me respondéis, imagino que no me dais crédito o no me oís, de lo que yo recibo tanta pena cual Dios sabe»; un estereotipo (cuyo comentario se hace en el capítulo siguiente) cuya vulgaridad desentona en el conjunto y en labios del difunto Durandarte[41]; por último, la descripción de Belerma como mujer fea, y, momento el más bajo de este sistema en degradación, la mención, por Montesinos, del «mal mensil» y de los años que ha que no asoma por sus puertas (de Belerma), mención que el relato como tal no exige, ya que la causa, expuesta en el segundo miembro de un período subordinado, puede enunciarse correctamente sin el primero
78.
El primer cliente del banco entró sobre las nueve y cuarto: un cincuentón bastante orondo con una vestimenta extemporáneamente juvenil, en especial los vaqueros de última moda, que se compraban ya con la cremallera rota y salpicaduras de vómito en los bajos
79.
Por el contrario, en Cap d’Agde, uno asiste a la coexistencia pacífica, tanto en supermercados como en bares, de gran variedad de atuendos, que van desde la desnudez integral a la vestimenta tradicional, pasando por la ropa de vocación abiertamente erótica (minifaldas de rejilla, lencería, ligueros)
80.
Su simple vestimenta, unos pantalones de seda roja, estaba empapada, al igual que el ancho cinturón con hebilla de oro y la vaina con la espada que colgaban de éste
81.
Era tan extraño el aspecto del Papa… La cicatriz, la barba, el contraste entre su posición y su humilde vestimenta… Pero cuando estuvo frente a frente con él en su propia casa, ante la trivialidad del café y las galletas, ya no la impresionó su rareza, sino su extraordinaria sencillez
82.
Le pareció que trabajaba duro un largo rato y prestó atención a todos los detalles de su vestimenta
83.
Llevaban pantalones anchos metidos en botas de cuero flexible y toda su vestimenta era de tonalidades marrones, grises o verdes que, a su juicio, debían de confundirse tan bien con la maleza y las rocas como las capas de los Guardianes
84.
La vestimenta de Setaú contrastaba con la de los cortesanos y con la de los escribas admitidos en palacio
85.
Meren lo observó sin interés, se detuvo a arreglarse los complicados pliegues de la vestimenta y golpeó el suelo con el bastón
86.
, con gaya vestimenta, caminaba gravemente, adelantado por un virrey y sin ser observado
87.
La silla del residente de la mansión, en verdad, estaba vacía ante el hogar, pero a ambos flancos de ella, la figura de Bannon en vestimenta de explorador, con pantalones cortos de tweed y zapatones de vaca marina salada, contrastaba marcadamente con la elegancia prímula y los modales ciudadanos de Malachi Roland St
88.
Presión inhibitoria del cuello de la camisa (talla 17) y chaleco (5 botones), dos artículos de indumentaria superfluos en la vestimenta de los varones de edad madura e inelásticos a alteraciones de masa por expansión
89.
En su vestimenta imitaba un poco los ropajes asociados al nombre de Carlos II, por haber oído decir en un período anterior de su carrera que tenía un extraño parecido con los desventurados Estuardo y en los labios llevaba una boquilla de su propia invención que le permitía fumar dos cigarros a la vez
90.
Resolver la vestimenta nocturna era más problemático
91.
Nunca le gustó aquella vestimenta
92.
Desde el primer momento, Ayla había considerado la vestimenta de los zelandonii muy interesante –y, en algunos casos, preciosa, sobre todo ciertas prendas de Marthona–, pero desconocía la complejidad de los significados asociados a la ropa
93.
En la oscuridad, los primeros ya escapan de las cadenas de su vestimenta